PAG. 11 SECCION: INF. GRAL. CABEZA: Poder zorruno ENTRETEXTO: El priismo, el perredismo, el mundo juridico y mucho mas, le han reclamado a Fox que haya dado un golpe de mano a un poder debil CREDITO: ARTURO MIRANDA MONTERO* Vicente Fox Quesada es un hombre de empresa llegado a la politica activa apenas al mediar la decada pasada. Su formacion como politico la ha adquirido en las filas del Partido Accion Nacional, aunque sus ideas y acciones rebasan constantemente los limites partidarios. Su pragmatismo empresarial se enreda en las sutilezas politicas y juridicas de los otros, a las cuales no les tiene mucho aprecio, antes bien, considera que "tanto rollo" impide avanzar mas aprisa, conforme el lo ha decidido. Impedido su ascenso a la gubernatura una vez, alla por 1991, se dedico a cultivar su presencia politica como figura nacional. Como esponja absorbe todo lo que considera util y benefico para su idea fuerza: "Sacar a esos cuates del PRI de Los Pinos". Al panismo guanajuatense, descalabrado por dos derrotas electorales consecutivas en 1994 (las legislativas y las de ayuntamientos), mas el desdoro que le propino el interinato salinista-medinista, solo le quedaba una carta fuerte: Vicente Fox. A pesar de que no era simpatica su candidatura en los propios circulos dirigentes panistas, no quedaba de otra, habia que lanzar a Fox como unica posibilidad real de ganar la gubernatura. Fox se hizo del rogar para aceptar la candidatura, sabia que el era clave; acept o, pero condiciono tambien su presencia, logrando un margen de maniobra mas alla de los compromisos estrictamente partidarios. Su campana arranco fuerte y culmino fuerte. Su triunfo contundente por dos a uno sobre Ignacio Vazquez Torres le dio una fortaleza mayuscula. Fox reclamaba desde la contienda una gubernatura tan fuerte que le permitiera andar rapido en busca de soluciones a las demandas ciudadanas. Queria tal cosa para hablarse de tu a tu con el Presidente de la Republica. Sin ningun conflicto, con legitimidad electoral plena y con grandes expectativas, Fox se convirtio en gobernador constitucional de Guanajuato, asumiendo, por tanto, la titularidad de un Poder Ejecutivo obligado a compartir responsabilidades estatales con un Legislativo controlado por la mayoria priista y con un Judicial debil y desacreditado por su origen medinista. Su gobierno desperto interes porque se constituia como de oposicion verdadera en el contexto politico nacional. Dadas las condiciones extraordinarias de la eleccion y de la conformacion gubernamental, Fox tomo las riendas del poder a mitad del ano, lo que le impedia modificar lo ya programado, de tal suerte que echo mano de muchos de los funcionarios medinistas, ratificandolos o cambiandolos de posiciones, cosa que no agrado a muchos, pero que se entendio como un tiempo de transito hacia el pleno proyecto foxista alla por 1996, cuando ya tenga las bases de lo que quiere desarrollar y un presupuesto adecuado a sus int enciones. Un largo plazo lunamielero de seis meses se le dispensa a Vicente Fox gobernador; pero ya ha tenido dos tropezones en su prisa. Uno fue al iniciar su mandato, cuando en su primera gira por Celaya, la aficion futbolera enfebrecida le reclamo apoyo para el estadio, a lo que se nego publicamente, porque habia otras prioridades; el rechazo populachero se manifesto a pedradas e insultos; terminaba asi el candidato y comenzaba el hombre de gobierno. El otro, mas escandaloso e innecesario, lo propicio el mismo azu zado por sus asesores, cuando llamo a los magistrados del Supremo Tribunal de Justicia del Estado a palacio de gobierno para "convencerlos" de que renunciaran, facilitando asi que Fox tuviera el camino libre para transformar al Poder Judicial. Esa maniobra palaciega, ademas de suscitar airadas interpretaciones juridicas, desnudo el estilo personal de gobernar de Fox. El priismo, el perredismo, el mundo juridico y muchos mas, le han reclamado a Fox que haya dado un golpe de mano a un poder debil y sometido sin antes contar con una propuesta de reforma. El gobernador resiste escudandose en su interpretacion de la ley y descalificando reduccionistamente a sus opositores. Lo cierto es que su capital politico ha sufrido merma gratuitamente, porque podia haber hecho un acuerdo entre los tres poderes y anunciar la intencion reformadora conjuntamente, incluida la remocion de lo s magistrados renunciantes. Pero la prisa foxista propicio el tropezon. La impaciencia de Fox choca con los formulismos juridicos, con las maneras politicas y con los tramites parlamentarios. Le molesta sentirse un zorro atrapado en un berenjenal. Piensa que no es justo que tenga candados en el ejercicio del poder, cuando el hizo un enorme esfuerzo por ganar contundentemente la eleccion. Por eso, constantemente afirma que si encuentra resistencia en el Congreso o en los ayuntamientos, recurrira a la sociedad; es la vision de los neopoliticos que rechazan las formas de hacer pol itica. A fin de cuentas, Fox salio raspado con este asunto, porque ademas de ensenarnos como concibe el poder, el priismo le comio el mandado con los nuevos abogados propuestos para el Tribunal, simplemente porque la mayoria tiene filas tricolores, y porque en la misma sesion de la Comision Permanente del Congreso que conocio la propuesta gubernamental, la fraccion priista dio entrada a su iniciativa de reforma del Poder Judicial, en un claro albazo politico y legislativo. *Historiador y analista politico. .