PAG. 2 SECCION: INF. GRAL. CINTILLO: EDITORIAL CABEZA: Mexico dice no a la aplicacion extraterritorial de la ley Con la aprobacion por la Camara de Representantes de Estados Unidos de la llamada Acta para la Libertad y Solidaridad Democratica de Cuba de 1995, los grupos mas conservadores de la Union Americana pretenden imponer, a la soberania de otros paises, la aplicacion extraterritorial de sus leyes internas. En momentos en que desde muy diversos frentes se trabaja en favor del dialogo y la distension entre Estados Unidos y Cuba, con la aprobacion del Acta se intenta fortalecer el embargo o bloqueo economico, comer cial y financiero que pesa sobre el regimen cubano desde hace mas de 30 anos. El deplorable documento, que parece ignorar que el mundo vive una nueva etapa en las relaciones internacionales, preve una serie de castigos para paises o individuos que tengan tratos comerciales o economicos con Cuba, o que negocien con bienes expropiados a estadounidenses en la isla. Reafirma la Ley Torricelli de 1992, segun la cual Estados Unidos debe retener ayuda economica directa a los paises que tengan, por via publica o privada, relaciones comerciales con Cuba y llega al extremo de advertir a Mexico y a Canada que se abstengan de convertirse en puentes para el ingreso de productos cubanos a territorio estadounidense. A pesar de que el Acta no es todavia una ley, ya que no ha sido aprobada por el Senado ni firmada y publicada por el Ejecutivo, su aprobacion es un peligroso precedente para las relaciones interamericanas, y pone de manifiesto la doble vara de los intereses del poder con la que los radicales conservadores juzgan el acontecer del mundo. A diferencia del trato que se aplica a Cuba, hace apenas unas cuantas semanas Estados Unidos reanudo relaciones diplomaticas con el gobierno comunista de Vietnam. El derecho de cualquier pais a decidir como y con quien comerciar es uno de los elementos intrinsecos a la soberania. Por ello, Mexico y Canada se aprestan a formar un frente comun para protestar ante el gobierno y la opinion publica de Estados Unidos, por el alcance extraterritorial de esta ley estadounidense que vulnera los principios basicos de la igualdad juridica de los estados. En su oposicion a la Ley Helms-Burton, asiste plenamente a la cancilleria mexicana la razon de la ley y de la moral internacional. El documento refleja un absurdo y anacronico reduccionismo, caracteristico de los anos de la Guerra Fria. Mexico, Canada y todos los sectores prudentes y tolerantes del gobierno y la sociedad estadounidense, evitaran que se retrotraigan las relaciones interamericanas a una epoca oscurantista, por fortuna ya superada. .