SECCION ECONOMIA PAG. 23 CREDITO: ENRIQUE CONTRERAS MONTIEL CABEZA: El capital especulativo, un peligro? Tardara un buen rato en asimilarse la amarga experiencia que se vivio con la crisis de diciembre de 1994. Ha sido una experiencia traumatica de la que todo el mundo cree saber quien fue el culpable, pero pocos que hay que hacer para remediar las consecuencias. El caso es que al concluir 1993 se contaba con razones para desbordar el optimismo. Las reservas internacionales estaban alrededor de 25 millones de dolares. La economia del pais, aun cuando ya habia mostrado algunos signos de debilitamiento que le eran atribuidos al periodo electoral, se desenvolvia con tasas de inflacion y de interes descendentes. Las finanzas publicas mantenian su estricta disciplina de equilibrio presupuestal. Todo parecia ir muy bien y dentro de un rango razonable los acontecimientos parecian predecibles. Sin pretender minimizar ninguno de los hechos que enturbiaron el ambiente en 1994, quiza el primer signo verdaderamente alarmante que mostro que la economia no tenia la robustez que se le atribuyo, se dio a finales de marzo y principios de abril, cuando el Banco de Mexico tuvo que responder empleando alrededor de 9 millones de dolares para contener los ataques de nervios sobre el tipo de cambio. La razon es que el proceso electoral se vio manchado por el magnicidio del candidato a la Presidencia de la Republica del Partido Revolucionario Institucional, Luis Donaldo Colosio. De ahi en adelante, el ritmo de entrada de capitales externos disminuyo de manera notoria, lo que a la vez repercutio sobre la tendencia del deficit en las cuentas con el exterior. El acabose fue al concluir el ano. En los primeros veinte dias de diciembre, salieron entre 5 y 7 millones de dolares del pais. Lo que habia sucedido, segun explico el gobernador del Banco de Mexico, Miguel Mancera Aguayo, en una mesa redonda del Pan American CEO Institute llevada a cabo el 9 de febrero de 1995: "De enero de 1989 a diciembre de 1993, el superavit acumulado de la cuenta de capital de la balanza de pagos sumo 94 millones de dolares... Cerca de 66 por ciento de dicho superavit se explica por inversion extranjera, que entro al pais via inversion directa, compra de titulos de renta fija y de acciones. Durante este per iodo, la inversion financiera extranjera represento 68 por ciento de la inversion extranjera total. A su vez, el incremento en el endeudamiento externo del sector privado explica el 35 por ciento del superavit de la cuenta capital". Lo que habia sucedido es que una parte sustancial de la inversion que llego al pais entro como capital especulativo y se mantuvo asi hasta final, en que el nerviosismo se convirtio en debacle. Aunque gran parte de la explicacion descanse en la movilidad de los capitales, cabe hacer algunas precisiones. En primer lugar, la Bolsa de Valores de Mexico, por su tamano y la cantidad de inversionistas, tiene un comportamiento oligopolico. Significa que unos cuantos inversionistas pueden determinar su comportamiento y, aun mas, dar un tinte politico a su desenvolvimiento. En segundo lugar, efectivamente el deficit en balanza comercial se sostenia con los alfileres que proporcionaron los inversionistas extranjeros. Pero si el deficit en balanza que estaba financiando el ahorro externo no se atenuo, se debio a la capacidad de la planta productiva para modernizarse y aumentar asi su productividad y su competitividad en el mercado internacional. Lo que es un hecho, es que la economia nacional no puede estar al margen de los mercados internacionales. En ese sentido, una normatividad que pretenda regular el comportamiento de los inversionistas extranjeros, podria desincentivar el arribo del ahorro externo que requiere el pais. Lo que si puede hacer es un esfuerzo conjunto en un plan de desarrolllo industrial para la modernizacion economica nacional, con una clara direccion que apunte hacia la eficiencia y calidad para alcanzar mayor competitividad en el comercio mundial. En las circunstancias actuales, ello es factible aprovechando que, por un lado, la crisis se puede convertir en un momento de restructuracion y, por otro, la devaluacion permite fomentar la productividad de las exportaciones. .