SEC. INF. GRAL. PAG. 6 CINTILLO: RAZONES CABEZA: Chiapas: ¨salidas politicas o legales? CREDITO: Jorge Fernandez Menendez En las Naciones Unidas, el presidente Carlos Salinas de Gortari hablo, por primera vez en un foro internacional de esa dimension, sobre el caso Chiapas. "Frente a una experiencia dolorosa en el sur de mi pais senalo Salinas, Mexico transformo el reto armado que se nos presento el 1 de enero en dialogo politico, diez dias despues. Escucho las voces de los mas necesitados, y se comprometio la via politica de solucion con el dialogo y con la libertad". Ese privilegiar la via politica de solucion para el conflicto chiapaneco, no esta, de ninguna manera, cancelada. Al contrario, todo indica que el caso Chiapas puede entrar, de forma definitiva, en una via politica que cancele lo militar y que debe buscar cancelar la fuerza como opcion en todos los sentidos. Quizas el mayor de los avances, no percibido aun por muchos sectores de la opinion publica, es que el conflicto chiapaneco se ha convertido cada vez mas en local. Incluso en las ultimas apariciones del s ubcomandante Marcos, el eje ya ha dejado de ser el problema nacional y se ha centrado en la eleccion chiapaneca. Eso, que en terminos globales puede ser considerado un avance, es lo que obliga a agudizar los sentidos en el caso Chiapas y a no dar pasos en falso. En este sentido, si bien Chiapas requiere de un tratamiento especial, diferenciado, esencialmente politico, un punto que no puede obviarse es la necesidad de continuar avanzando en algo que durante mucho tiempo se olvido en ese estado y que ahora es lo que obliga a soluciones de excepcion: el respeto a la ley. El problema central en Chiapas es que la ley no vale nada. Es verdad que mucho se ha avanzado en los ultimos meses, pero no es aun suficiente. Y ello se aplica tanto a una informacion tan "poco politi ca" (pero tan trascendente en terminos de la vida real) como que 6 mil 500 ninos volveran a perder en las zonas en conflicto el ano lectivo, como en el reciente proceso electoral. Alli tenemos dos problemas: uno, la limpieza del propio proceso en el ambito local. Segundo, las inconformidades que pudieran surgir de el. Por la informacion que tenemos, el proceso electoral local tuvo problemas, incluso aquellas soluciones "de excepcion" de las que hablabamos y que se implementaron en Los Altos para permitir la eleccion (no identificacion de los electores, manejo especial de listas nominales, de las credenciales, de las autoridades de casillas e incluso de los paquetes electores) no cont ribuyeron a aumentar la legalidad del proceso, aunque fueron medidas necesarias. Con todo, desde el punto de vista legal, no deja de ser significativo que, para todo el estado, se hayan presentado solo 30 impugnaciones, ocho de las cuales son de casillas ubicadas en Tuxtla Gutierrez. Si consideramos que el PAN, para impugnar la eleccion local en Monterrey, presento unas 150 impugnaciones, de las cuales procedieron 42, lo que permitio cambiar el resultado electoral en su favor, o que en Jalisco logro, con argumentos de peso, abrir los paquetes electorales del distrito VII y con ello tamb ien cambiar los resultados de la eleccion federal en ese distrito, veremos que no existen argumentos legales que permitan cambiar el sentido de la eleccion chiapaneca, incluso aunque se resolvieran en favor de los impugnadores eso recursos de protesta. En sintesis, el problema poselectoral en Chiapas no es legal. Se trata de un problema politico: el EZLN y Samuel Ruiz han afirmado que no permitiran que Eduardo Robledo tome el poder, no tanto porque impugnen la eleccion sino a la persona. Pero ello no deberia alcanzar para anular una eleccion o cambiar sus resultados. Robledo, en mas de una oportunidad lo hemos senalado en este espacio, no nos parecio el candidato adecuado para Chiapas: es un hombre estrechamente relacionado con los sectores mas tradicionales de la clase politica local, que fue secretario de Gobierno de Absalon Castellanos, y lider del PRI local y senador con Patrocinio Gonzalez Garrido. En lo inmediato, hizo su precampana apoyado en un punto: su amistad con Luis Donaldo Colosio, que no deberia haber sido tan fuerte cuando, por lo menos, en sus tres prim eros discursos de campana jamas recordo al malogrado candidato priista. En este sentido, como ocurrio en otras oportunidades, el PRI esta cosechando lo sembrado por el apoyo a candidaturas muy problematicas. Partiendo de este punto y buscando forzar una solucion similar a la adoptada en 1991 en Guanajuato (pero incluso sin los argumentos politicos y legales de peso que en esa oportunidad presento el PAN, que por cierto tampoco alcanzaban para anular legalmente la eleccion y por eso se adopto la decision que conocemos), el PRD, pero sobre todo el EZ y Ruiz, estan tratando de que se designe un gobernador interino. No deja de ser paradojico que, en terminos reales, el PRD no haya hecho enfasis en esa reclamacion p or un problema muy sencillo: practicamente se ha quedado sin cuadros politicos en esa entidad y algunos de ellos, como Eraclio Zepeda, han manifestado un apoyo critico a que asuma Robledo. Samuel Ruiz, por su parte, se ha mostrado muy fluctuante en sus opiniones: en alguna oportunidad llego a apoyar a Robledo para que asuma el poder y en otras oportunidades lo ha criticado acremente. El EZ ha sido terminante: no permitira el 8 de diciembre que Robledo asuma el poder. Vale la pena preguntarse si los zapatistas estaran dispuestos a tirar por la borda todo lo avanzado en este ano y a solo ocho dias de haber comenzado la administracion Zedillo, solo por ese objetivo. Pero lo que le da mayor fuerza a esas versiones es que la propuesta del gobernador interino parece ser mas receptiva para ciertos sectores gubernamentales y priistas, que en la oposicion. Apenas la semana pasada se publico en dos periodicos un documento, de extrano origen, en el cual se aconsejaba, desde alguna instancia no especificada, que el gobierno eligiera un gobernador interino de origen priista que durara tres anos en el poder y organizara elecciones extraordinarias. Seguian en el documento otros 32 puntos sobre medidas politicas, economicas y sociales para apoyar esa propuesta. No es descabellado plantearlo, lo que no parece logico ni sano es como se plantea, como se maneja esa informacion, los movimientos por debajo de la mesa que se realizan (que incluyen una intensa practica del golpe bajo) y la misma situacion global del priismo chiapaneco. En ultima instancia se deberia recordar que no es aceptable una salida "politica" que olvide dos cosas que no son menores: la propia legalidad y la trascendencia en *Director adjunto de El Nacional .