SECCION CULTURA
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CABEZA:
CREDITO: HECTOR ORESTES AGUILAR*



en un dandy vienes Roth constataba de alguna manera su bautismo literario, su nacimiento como escritor. En la antesala del fin de la monarquia dual, aquel joven estudiante judio-oriental nacido en un pueblo de Galizia ese territorio mitico al Oeste y al Oriente de Ucrania, comenzaba un itinerario que lo convertiria en el mayor poeta de la decadencia de un imperio, de la desaparicion de un mundo que padecio una agonia en muchos sentidos semejante a la que consume, en nuestros dias, a varios paises de Europ
a Oriental y de los Balcanes.
Moses Joseph Roth, nacido en 1894 en Brody, entonces confin del imperio astrohungaro, es nuestro contemporaneo. Sus poemas, cronicas, reportajes, relatos y novelas, que hoy se conocen en numerosas y variadas ediciones, asi como en mas de viente lenguas, no han dejado de poseer, en su mayoria, vitalidad y beligerencia. En el deslumbrante epos de obras como La marcha de Radetzky, solo para citar una de las mas conocidas, Roth concentra la nostalgia real-imperial con una desoladora y profunda ins
peccion del alma de quienes se vieron obligados a dejar de pertenecer al orden hasburguico, que mas que un conglomerado multinacional fue un sentimiento compartido de pertenencia.
Junto a monumentos de la historia danubiana como la villa imperial de Francisco Jose en Bad Ischl o la Cripta de los Capuchinos de Viena, la obra completa de Joseph Roth sigue alimentando la mitologia de una cultura que a un tiempo es crisol de la modernidad y epilogo de un cambio de siglo. Mas a diferencia de los mas de dos mil trofeos de caza que cuelgan de las paredes del Spa del Emperador o de los titanicos sarcofagos de la dinastia de Maria Teresa, lo que alojan los escritos de Roth son
personajes despojados de una heroicidad marmorea pero impregnados de una humanidad desgarradora, heridos por una crisis de identidad irreparable. Mitomano sin igual, Roth como novelista de frontera padecio tambien una identidad fracturada y de ello dan cuenta las diferentes versiones que propagaba en torno a su lugar de nacimiento. De manera todavia mas ejemplar, las creaturas literarias de Roth cargan a sus espaldas una biografia confusa y postiza, efimera o francamente inconcebible. Friedrich Kargan en El
 profeta mudo, Anselm Eibenschtz en El peso falso, los Trotta en La marcha de Radetsky, los menesterosos judios, rutenos y galizianos de las cronicas que forman Judios errantes: todos arrastran una relacion tormentosa con su pasado; han dejado de ser para poder seguir viviendo y, sin embargo, se aferran a los simbolos, a los mitos, a la fe que un dia les dio una razon para vivir.

literatura es uno de los territorios mas habitables que acaso puedan encontrarse.
Bad Ischl / Strobl am Wolgangsee, verano 1994.
*Ensayista.
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