PAG. 29 SECCION: INTERNACIONAL CABEZA: ¨Cuanto vale la victoria del canciller Kohl? CREDITO: JORGE GUTIERREZ CHAVEZ esta victoria liberal-conservadora esta destinada a superar las fronteras del pais y a influir enormemente en la reordenacion politica y economica que esta experimentando la hoy llamada Nueva Europa. Tocando directamente el proyecto unificador europeo y aquel otro que esta determinado el futuro de los paises del ex bloque comunista, caballos de batalla de la administracion Kohl, esta continuidad presupone el obvio fortalecimiento de ambos proyectos, pero tambien, al menos en teoria, un periodo de estabilidad para el Viejo Continente. No obstante su actual crisis economica y social, producto en gran medida de la reunificacion del pais, Alemania sigue siendo la columna vertebral del Tratado de Maastrich y por ende la "locomotora" que podria conducir al exito o al fracaso la tan anorada unificacion economica y monetaria de la Union Europea. La necesaria y urgente consolidacion de las instituciones comunitarias, desde esta perspectiva, exigia la confirmacion en el poder de Kohl y su partido ello sobre todo por el caracter decididamente europeista de su politica. Una radical redefinicion de la colocacion alemana, dentro del marco de la Union Europea, hipotesis que hacia ventilar el eventual triunfo socialista (SPD), podria haber comportado un desfasamiento estructural y la posible modificacion de los tiempos y las formas que Maastrich tiene predispuestos para la final y definitiva integracion europea. Para los paises del ex bloque comunista, el triunfo de la CDU tiene sin embargo un especial significado. La administracion Kohl, por razones de orden geopolitico o simplemente por la agresividad economico-comercial de los empresarios de su pais, ha sido la que con mayor impetu ha contribuido al impulso y al desarrollo de las desastradas economias de estas naciones. En toda esta region permitacenos la metafora, hoy se habla aleman. Con gran vision Kohl de hecho ha propiciado y estimulado las inversiones alem anas representa la virtual dependencia economica de todos los paises del ex bloque comunista respecto de la politica exterior teutona, en gran medida es la unica posibilidad que han encontrado no solo para poder resurgir de sus cenizas sino para hacer realidad uno de sus grandes suenos: ingresar, como ya lo han solicitado, a la Union Europea. Es imposible ocultar que una imprevista modificacion del escenario politico aleman, nos referimos nuevamente al temido triunfo de la social democracia del pais, hubiera comportado inmediatas repercusiones y serias dudas sobre el futuro de estas naciones: su incipiente sistema mercado se habria desplomado y su embrional democracia politica sufrido un peligroso retroceso. Estas al menos, son las dramaticas senales que emergen de la colectiva insatisfaccion que ha provocado su abrupto ingreso a un sistema capi talista que esta lejos de salvar, al menos a mediano plazo, las enormes necesidades economicas y sociales que esta transicion ha traido aparejadas. Dejando a un lado la tranquilidad que ha dejado el triunfo electoral de esta alianza liberal-conservadora en toda Europa, es importante no perder de vista que este es din duda, uno de los mas grandes triunfos politicos del canciller Helmut Kohl. Los graves problemas economicos y sociales que ha provocado la reunificacion del pais (desocupacion, alza de impuestos, encarecimiento del dinero y hasta la misma reactivacion del racismo y la xenofobia), que presagiaban no solo en un reforzamiento de la oposicion s ocial democrata sino en su eventual ascenso al poder, no fueron sin embargo suficientes para determinar el cambio de estafeta en el poder aleman. Kohl, no obstante ello, ha tenido que reconocer la sensible perdida de votos de su organizacion y su imperiosa necesidad de recurrir al partido liberal para poder gobernar. Diez son los escanos que separan a la coalicion gubernamental de la oposicion, un porcentaje que hace enormemente vulnerables las futuras acciones del canciller, pero no solo por la fuerte pres encia de la oposicion en el Parlamento, sino mas bien porque en la lealtad de sus aliados liberales podria encontrar el talon de Aquiles de su proxima gestion al frente del pais. ¨Es capaz esta anomala dependencia, que podria revelarse demasiado incomoda para el gobierno entrante, garantizar la estabilidad del pais? A decir verdad, Alemania parece haber ya superado los traumas y desencantos que le ha traido su reunificacion. El voto de confianza que ha recibido Kohl, con todo y sus limitaciones, es una prueba de que el pais esta de acuerdo con los terminos de la estabilidad que propone su Canciller. El verdadero problema que hoy enfrenta la fragil y emergente coalicion liberal-conse rvadora, no es pues este sino mas bien el de la justicia social. Como siempre sucede en momentos de crisis, los costos de la reunificacion fueron descargados sobre las clases mas debiles y sobre los causantes cautivos provocando su inmediata reaccion en contra del gobierno. Si Kohl no quiere fracturar la alianza con los liberales y exasperas aun mas los animos de la poblacion del pais, debe necesariamente disminuir este enorme peso distribuyendo mejor los costos de la crisis. No seria extrano que su nuevo gobierno tomara en cuenta algunas opciones en el campo social y que ponderara asimismo los efectos que ha comportado la politica liberista implantada poco despues de la caida del Muro de Berlin. Si esto se transforma en una verdadera reforma social capaz de aliviar este peso y las tensiones presentes en los sectores mas deprimidos del pais, Kohl obtendria seguramente el reforzamiento politico que actualmente requiere y al mismo tiempo refrendaria no solo su liderazgo interno y continental sino el papel de estadista que le hizo ganar su historica decision de reunificar el pais. .