SECCION CULTURA PAGINA 36 BALAZO: MUSICA CABEZA: Temporada de la OFUNAM, tradicion y nostalgia CREDITO: ROBERTO GARCIA BONILLA en trabajarla sonancia y particularmente la tonalidad, o bien estar presente en la estructura interna de la partitura. Un caso ejemplar habria sido Bartok (1881-1945) cuya musica historicamente no es vista como avantgarde, pero que si fue profundamente renovadora. Su musica, con frecuencia (Ning)un sueno de una noche de verano (1985) Alfred Schnittke (Engels, 1934), del compositor ruso, fue estrenada por la Orquesta Filarmonica de la UNAM la semana pasada en Mexico; la intencion parece ser parodica: la obra, por su instrumentacion, se escucha como un Divertimento (pre)clasico y a la vez como un Concerto grosso, donde distintos instrumentos cumplen sus partes concertantes (piano, clavecin, violin, distintas maderas). Pero paulatinamemte la tonalidad se diluye y la musica va de l a disonancia al ruido; una especia de caos, que lejos de oirse la tension casi tragica de musicas que oscilan entre la tonalidad y la atonalidad. Hay algo de festivo en esta obra que pasa incluso por atmosferas reposadas y nebulosas que evocan al sinfonista Ralp Vaugh Williams (1872-1985). La musica siempre regresa a su origen tonal. Mas alla de la ironia puede entenderse que la tonalidad (es decir el sistema donde prima un sonido de la escala, sobre el resto en sus relaciones armonicas sobre el resto) es una sombre que siempre perseguira a la musica occidental. Fue contraste escuchar despues del intermedio el estreno mundial de Parajes de la memoria de Graciela Agudelo (1945); una obra que tiene una intencion descriptiva de imagenes memorables, geografias tropicales, y sensaciones entranables de la compositora, sin excluir referencias de literarias. A decir por los notorios cambios de forma, y desarrollo instrumental, la obra esta dividida en unas nueve partes, donde el mayor signo distinguible es una timbrica muy cambiante. Aunque, en general, la s onoridad es densa; la orquestacion es para gran orquesta y profusa seccion de percusiones. Es dificil precisar la conformacion estructural de la obra que parece eclectica: desde la improvisacion en el momento de la ejecucion (aleatorismo) hasta fragmentos marcados en discontinuos; es decir una secuencia, digamos, melodica seccionada al aparecer con muy breves diferencias de tiempo. El efecto es una textura abigarrada (nubes sonoras; ejemplares en un autor como Ligeti 1923). Hubo parajes, sobre todo entre los primeros de una enorme riqueza timbrica, cimentados en un fondo denso de cuerda s; con la agregacion de las percusiones. La partitura en general tipifica las obras contemporaneas, donde crescendos son interrumpidos por fortissimos, seguidos de instantaneos silencios. Es advertible que con obras como esta los matices de dinamica son fundamentales; son estos que emergen la esencia de la musica; la OFUNAM, dirigida por Ronald Zollman, ejecuto (es casi imposible que en unos cuantos ensayos una obra comno esta alcance una interpretacion) estos parajes como una sucesion de muestrarios timbricos; por momentos una masa sonora excedida en su intensidad. Esta ambiciosa obra merece una interpretacion donde el tiempo y la intensidad sonora sean mas controladas. Luego de esta audicion aparecen muchas preguntas sobre el proceso de composicion, por ejemplo, šlos compositores siguen luchando entre abrazar y rechazar la tradicion?, šviven una incertidumbre? Si es esto ultimo es cierto, no es menos cierto que los oidos de los espectadores se pasean entre la extraneza atonita, el hastio indiferente y la conmocion momentanea. .