SEC. INF. GRAL. PAG. 2 CABEZA: Encontrar a los culpables, pero no a cualquier precio CREDITO: Jacqueline Peschard* En efecto, en este 1994, la acumulacion de los hechos violentos que han alcanzado las mas altas esferas del poder, ha hecho que las respuestas de los diferentes grupos sociales ante el fatal atentado en contra del futuro coordinador de la mayoria priista en la Camara de Diputados, hayan sido mas prontas y firmes. Empero, no todas ellas han sido positivas y propositivas. Mientras que algunos grupos como el Instituto de Estudios para la Transicion Democratica, de inmediato propusieron que los principales partidos politicos convocaran a una manifestacion conjunta en contra de la violencia (por cierto, la propuesta no fue atendida), en otros campos de la vida publica las reacciones frente al asesinado dan cuenta de que existe un clamor por la venganza mas que por la justicia. Esto desde luego que tiene que ver no solo con la ineficacia, sino con la impunidad con la que han act uado tradicionalmente los organos encargados de la procuracion de justicia en nuestro pais. Lo mas grave del asunto es que algunos comunicadores de estaciones de radio de alcance nacional parecen haberse erigido en verdaderos promotores de ese llamado a la venganza, o sea, de una exigencia de castigo a los culpables, mas a manera de expiacion que de cumplimiento de la legalidad. Este es un artificio que en caso de que deje contentos a los mas directamente involucrados y agraviados, choca frontalmente con los principios y la vigencia de un marco legal objetivo y universal, en una palabra, moderno, que se apegue a los procedimientos regulares y normales, es decir, que no eche mano de argucias inconfesables o de procedimientos oscuros. De otra parte, la actuacion de las autoridades encargadas de perseguir los delitos tambien ha sido pronta y mucho mas visible, sobre todo comparada con la de los meses anteriores. En poco mas de una semana, se han identificado conexiones entre autores materiales e intelectuales del crimen y se han capturado a probables implicados. Ademas, el subprocurador general de la Republica ha ofrecido informes sobre el desarrollo de la investigacion e incluso ha planteado una hipotesis sobre los moviles del asesinato, en el sentido de que se trata de un asunto politico, aunque con financiamiento del narcotrafico. A pesar de que el subprocurador ha sido enfatico en el hecho de que se debe de obrar "con responsabilidad y respeto a las personas y sus derechos", no han dejado de cometerse actos de prepotencia policiaca detras de los afanes de ser eficientes en la persecucion de los posibles implicados. De acuerdo con lo que ha resenado la prensa nacional, la irrupcion con lujo de fuerza de la policia judicial en la Camara de Diputados y en domicilios personales de algunos politicos relacionados con el desaparecido ex go bernador de Guerrero, son muestras de la prepotencia policiaca. Por otro lado, si bien es cierto que el hecho de que la cabeza del proceso que esta haciendo las averiguaciones sobre el asesinato de Ruiz Massieu sea, por artes del destino, su hermano, tiene un efecto simbolico porque alienta la creencia en que la Procuraduria, en efecto, esta interesada en que se aclare el asesinato, no deja de tener un sentido personal, de caso particular, no necesariamente extendible ni generalizable como esquema de procedimiento de dicha dependencia federal. Dicho de otra manera y paradojicamente, las caracteristicas del caso no permiten que este pueda traducirse en la edificacion de una percepcion generalizada de confianza hacia la dependencia federal, ni tampoco en senal inequivoca de que los cambios que se han introducido en los ultimos anos, a decir del propio subprocurador, esten ya rindiendo sus primeros frutos. En todo caso, la disposicion de llegar al fondo de las investigaciones y de identificar a los culpables, independientemente de la posicion politica que ocupen, revela que existe voluntad politica para hacerlo y la sociedad asi lo demanda. Pero la busqueda de los culpables no puede hacerse a cualquier precio, es decir, sin asegurar con rigor que se respetaran los derechos de los individuos y que se seguiran fielmente los procedimientos juridicos pertinentes. El clamor por la venganza solamente puede alimentar actos y posturas irracionales, que si bien pueden explicarse por el momento de tensiones politicas por el que atraviesa el pais, en modo alguno pueden justificarse y mucho menos alentarse desde foros privilegiados de resonancia publica como son los medios masivos de comunicacion. *INVESTIGADORA DE EL COLEGIO DE MEXICO oros privilegiados de resonancia publica como son lo .