SEC. INF. GRAL. PAG. 2 CABEZA: CIUDADES CON PROYECTO O CIUDADES EN CRISIS CREDITO: Jordi Borja * Enfatizar los "problemas urbanos" (un urbanista britanico ironizaba que para muchos en ingles es una sola palabra, es decir, que no se utiliza "urbano" sin "problema") es una costumbre de la epoca. Inseguridad y pobreza, congestion y contaminacion, desempleo y falta de servicios basicos, trafico imposible y deterioro de los espacios publicos, privatizacion e ingobernabilidad, etc. La lista es interminable y los medios de comunicacion parecen competir en la busqueda de titulos catastrofistas. Las ciudades son "invivibles" e "inviables". Las personas "no estan geneticamente preparadas para vivir (en ellas)", en consecuencia "se despueblan". La ciudad es "dura" y "asesina". Vivimos en el "infierno urbano". Todos los entrecomillados corresponden a titulares del periodico espanol de mayor difusion recogidos al azar en algunas semanas. Asi es en todas partes. Sin embargo, nadie discute seriamente que la ciudad es hoy nuestro modo de vida. Mejor o peor la gran mayoria de la poblacion, sobretodo en America y en Europa, tiende a vivir en ella. Historicamente ha sido el lugar privilegiado del desarrollo del comercio y de la industria, del avance de la ciencia y de la cultura y de la expansion de las libertades publicas y de los derechos civiles. Es en las ciudades donde reside el mayor potencial de innovacion tecnica y de progreso social. De nada bueno sirve satanizar a las ciudades. En ellas se encuentran nuestras debilidades y nuestros recursos. De lo que se trata es de tener un proyecto para reducir aquellos y optimizar estos. Sartre decia que precisamente lo que distingue a la humanidad del reino animal es el proyecto, es decir, la posibilidad de construir su futuro. El proyecto de ciudad debe responder hoy America Latina a tres tipos de retos. En primer lugar, el reto que nos plantea la pero tambien economico: el deficit funcional se vera agravado por la Otro reto es el de la inadecuacion del de un sistema electoral que un liderazgo ejecutivo y mayoria asamblearia), facilite la cooperacion publico-privada y la concertacion interadministrativa, simplifique las normativas y los procedimientos y estimule la participacion ciudadana. El camino iniciado en algunos paises en los 80 es muy insuficiente lo cual ha determinado que algunas grandes ciudades se hayan planteado una reforma ambiciosa de su organizacion politica (incluye coordinacion metropolitana y descentralizacion), de sus competencias y de su base financiera. Las reformas en curso o en proyecto en Mexico D.F., Buenos Aires, Bogota, Santiago de Chile o Sao Paulo pueden ser un laboratorio interesante. Parece obvio que las grandes ciudades necesitan un regimen legal propio. En todos los casos estas reformas no pueden hacerse en el marco estrecho y exclusivo de los Parlamentos y de los Concejos Deliberantes. El tercer y ultimo reto al que queremos referirnos es el que representa la debil as normas de limpieza y circulacion, impago de tasas e impuestos, etc). Probablemente las manifestaciones mas espectaculares de esta debil integracion es el peso importante de la La respuesta positiva a este reto es la que dara un contenido material al anterior, el nuevo marco politico-legal, y tambien el que creara condiciones favorables para transformar la infraestructura urbana. Es preciso que se genere un bloque social "saint-simoniano", es decir, de "productores" o "activos" (frente a rentistas y parasitos) que incorpore junto a administraciones publicas democraticas y organizaciones empresariales y profesionales, a los movimientos populares, a las Universidades y a las ONGs. La elaboracion de un gena de Indias, en Buenos Aires, en Santiago de Chile. El seguimiento de estos planes estrategicos puede ser una experiencia apasionante. * Urbanista y funcionario del Ayuntamiento de la Ciudad de Barcelona. .