17 SEC. INF. GRAL. PAG. 8 CABEZA: Mujer y politicas sociales** CREDITO: Beatriz Schmukler* Consideraremos aqui las politicas sociales llamadas de "mujer y desarrollo" en America latina, que, desde los anos setenta han tenido a la mujer como centro. Lo paradojico de las mismas es que han considerado a la mujer como "objeto" de politicas por dos razones antagonicas: su vulnerabilidad y su situacion de minusvalia y, simultaneamente, por su capacidad de resolver estrategias de sobrevivencia tanto a nivel del grupo familiar como de la comunidad. Al paso del crecimiento de las politicas de ajuste tambien crecieron los servicios sociales comunitarios resueltos por organizaciones de mujeres semivoluntarias: las cocinas populares, los centros de cuidado infantil, los centros de salud comunitarios, y muchas mas invensiones han salido al paso de las necesidades populares cada vez menos resueltas por el Estado. A menudo se ha pensado que si se tenia a la mujer como centro de la politica se estaba favoreciendo su crecimiento economico y se estaba reduciendo la proporcion de mujeres pobres y la brecha de desigualdad con los hombres. Este es un error; a menudo las politicas de desarrollo destinadas a mujeres reforzaron sus roles laborales tradicionales (costura, alimentos, artesanias, cuidado infantil) y reforzaron su lugar en la familia como responsable del control de la natalidad, del cuidado de los ninos y del mantenimiento de la casa aun sin el apoyo o la falta de comprension de los companeros o conyuges. Estas politicas han ignorado la funcion del hombre en la reproduccion, facilitando su ausencia y su falta de compromiso en las practicas y decisiones reproductivas. Dicha marginacion ha sido complice de relaciones de poder en la pareja y en la familia que margina a las mujeres de las decisiones, al mismo tiempo que la deja sola para resolver estrategias de sobrevivencia familiar. Dentro de los enfoques de mujer y desarrollo, la perspectiva "antipobreza", una de las mas utilizadas, supuso que la desigualdad entre hombres y mujeres se basa en las diferencias de ingresos y no visualizo las relaciones de dominacion entre los generos vinculadas con aspectos psicosociales, culturales, economicos y sociales. Otro de los enfoques, el de la "eficiencia", deriva de las politicas de ajuste estructural promovidas por Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional, desarrolladas a partir de mediados de los anos setenta. Estas politicas, sobre todo aquellas de privatizacion de servicios del Estado supusieron un desplazamiento de "costos de la economia remunerada a la impaga", fundamentalmente apoyandose en el trabajo gratuito de las mujeres (Moser, 1991). Muchos proyectos nacionales, el de Peru del Vaso de Leche, por ejemplo, preven la participacion de las mujeres en la distribucion gratuita de alimentos, cuidado de los ninos, preparacion de comidas, atencion a enfermos; recortes presupuestarios de los gobiernos en salud, educacion y en subsidios de alimentos han llevado a la organizacion de servicios comunales, donde la tarea de las mujeres de distribucion o de produccion es impaga o remunerada muy por debajo del salario minimo. La proliferacion de servicios a los sectores pobres, en los ultimos anos se basa en el voluntariado de las mujeres, que si bien les ha permitido organizarse, cabe preguntarse hasta que punto no ha profundizado las desigualdades de genero. 2. Genero y desarrollo. Una perspectiva de igualdad. A partir de estas criticas emanadas a la orientaciones de "mujer y desarrollo", surgio, a mediados de los anos ochenta, la perspectiva de "genero y desarrollo" como una puesta al dia en los organismos internacionales de las orientaciones teoricas del feminismo. La perspectiva de genero plantea como objetivo de desarrollo la igualdad de los generos. Para ello hace hincapie tanto en los aspectos economicos, politicos asi como en los personales; tanto aquellos que se refieren a las condiciones materiales como a las situaciones subjetivas de los individuos, tanto aquellos que tienen que ver con la participacion en el mundo publico pero tambien con las relaciones de poder y autoridad en el mundo familiar. Supone que los proyectos de desarrollo tienen que tener en cuenta al sistema de genero en cada sociedad para asegurar la participacion igualitaria de hombres y mujeres y que las estrategias deben tender a asegurar la igualdad entre los generos en todos los planos de la vida social. Para ello, ademas del control de recursos productivos, hace hincapie en la participacion colectiva, en el entrenamiento de las mujeres para el liderazgo y la cogestion en los proyectos, en el desarrollo de nuevas formas de gestion que permitan la participacion mas igualitaria de los miembros y en el entrenamiento de mujeres y hombres en los proyectos para comprender las limitaciones y barreras que existen en ambos para la participacion igualitaria. 3. La perspectiva de genero y la democratizacion social Quiza lo que menos se ha entendido de la perspectiva de genero en las agencias internacionales y en los gobiernos es que la igualdad de los generos no es un proceso que se alcanza aislado de la democratizacion social. Esto supone no solo democracia politica sino tambien impulsar desde las politicas de desarrollo la ciudadania femenina, la intervencion del hombre en la reproduccion social y la liberalizacion institucional, lo cual supone nuevos acuerdos sociales que reduzcan el autoritarismo y favorezcan igualdad social en los aspectos etnicos, de clase y de genero. Uno de los temas esenciales de la democratizacion social es la democratizacion familiar, que supone que todos los miembros, inclusive aquellos que han estado relegados o subordinados anteriormente puedan participar mas igualitariamente en las nuevas responsabilidades y decisiones familiares, y puedan gozar del mismo modo de los beneficios del desarrollo, ninos y adultos y hombres y mujeres. La democratizacion familiar supone la produccion de cambios en cinco ordenes: 1. Participacion igualitaria de ambos generos en las responsabilidades domesticas y las tareas de reproduccion cotidiana, alimento, cuidado de los ninos, cuidado de los ancianos. 2. Participacion conjunta de hombres y mujeres en las decisiones sexuales y reproductivas y en las practicas cotidianas que lleven a cabo esas decisiones. 3. Distribucion igualitaria y justa de los recursos familiares para todos sus miembros, sin distincion de sexo o edad. 4. Quiebre del autoritarismo y la violencia en las relaciones conyugales y entre padres e hijos. La igualdad de genero concierne cambios en los hombres y las mujeres, por lo cual es necesario incluir en las politicas un componente de revision de la masculinidad y una linea de negociacion de genero que permita ofrecer salidas concretas a los conflictos relacionados con un proceso de redistribucion de beneficios y responsabilidades. *Investigadora del Instituto Mora. **Este ensayo es parte de una ponencia presentada en el Seminario de Politicas Sociales en Mexico en los Noventa, organizado por Alicia Ziccardi y auspiciado por el Instituto Mora, el Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM y FLACSO, sede Mexico. Realizado en Mexico, en septiembre de 1994. .