SECCION CULTURA PAG. 40 CABEZA: Cineastas contemporaneas: Eliseo Subiela CREDITO: JUAN PABLO VILLASEĽOR* Contra lo que pudiera pensarse, los ultimos anos no han sido del todo malos para el cine argentino, a pesar de su escasa produccion. Muchos cineastas de ese pais han encontrado apoyo financiero en otras partes del mundo, incluso algunos de ellos han podido hacer carrera afuera. Asi, Martin Donovan (Apartment zero) logro filmar en Inglaterra, Gaspard Noe (Carne) lo hizo en Francia, el escritor Edgardo Cozarinsky (La guerra de un solo hombre) en Francia y Alemania, Alejandro Agresti (Buba) en Holanda, y el bo rgiano Hugo Santiago (Las veredas de Saturno) tambien en Francia. Otros fueron a Europa y regresaron, aunque no con muy buenos resultados, tal es el caso de Alejandro Birri, quien entusiamo con Org en Italia, pero despues realizo una pelicula lamentable, Un hombre muy viejo con unas alas enormes, o Fernando Solanas y su muy francesa Tangos, el exilio de Gardel, quien ofrecio mas tarde la insoportable Sur. Eliseo Subiela es en cierta forma mas argentino y mas universal que los ya citados, tal vez no demasiado coherente, pero si autentico; preocupado por observar la realidad desde un punto de vista poetico-metafisico. Nace en Buenos Aires en 1944. Estudia en la Escuela de Cine de la Plata, y una vez egresado asiste en la direccion a Leonardo Favio y a Armando Bo. Estos dos extremos: Favio, la sensibilidad artistica, y Bo, la torpeza intelectual y cinematografica, habran de marcarlo en el futuro. Luego de un inicio promisorio con dos cortometrajes premiados, Un largo silencio (1963) y Sobre todas las estrellas (1965), llega al primer largometraje: La Conquista del paraiso (1981). Nada importante ocurre con el; nada que no sea la necesidad de realizar una pelicula importante. Hombre mirando al sudeste (1986) es la respuesta a esa necesidad. Esa pelicula, que en mi opinion es una de las mas bellas del cine latinoamericano, propone una historia fascinante. Rantes aparece cierto dia en el manicomio. Dice ser un habitante de otro planeta. Se establece entonces un duelo de inteligencias entre este y su psiquiatra, quien trata de demostrar lo contrario. Pero la siquiatria no es el principal tema a tratar sino el mundo de los afectos, manejado con una fuerza dramatica pocas veces vista. . Los trucos no deben notarse, pero la trampa esta en la esencia del cine, y yo estoy dispuesto a hacer todas las trampas necesarias para convencer, conmover Tanto magia como verdad y emocion, son elementos indudablemente presentes en Hombre mirando al sudeste, una de las poquisimas peliculas habladas en castellano que circulan desde hace tiempo por las salas de arte de Europa y Estados Unidos. El director busco un objetivo y lo logro ampliamente, a pesar de las pequenas grietas, que delatan el truco. Esas grietas serian el mal empleo de la Novena sinfonia, por la obviedad de su mensaje, y las citas de La invencion de Morel, por la pobreza literaria de esta nove la, que se ven superadas por el rigor de los textos del propio Subiela. Si bien Hombre mirando al sudeste muestra lo mejor del cine argentino, El lado oscuro del corazon (1992) es un compendio de lo peor. Basta con escuchar a Mario Benedetti recitar sus versos en aleman o ver a Nacha Guevara Cuando se ha llegado a lo sublime y se intenta rebasar este nivel, a menudo se cae en la cursileria. Antes de caer en ella, Subiela filmo Ultimas imagenes del naufragio (1989), con la cual se veia reclamado al mismo tiempo por el ingenio y la tonteria. Nuevamente la premisa es impactante: una prostituta consigue a sus clientes fingiendo suicidios en el Metro. Cuando es rescatada por un escritor, le pide que escriba sobre ella y su familia, porque son tan desgraciados que espera que al menos en el libro les vaya mejor. Balanceandose entre la genialidad y el ridiculo, Eliseo Subiela ha llegado a perfeccionar ambos caminos, al parecer ya inseparables de su trayectoria. Tal vez no estemos ante un gran cineasta, sino frente a un excelente escritor, pues tanto el guion de Hombre... como el de Ultimas imagenes... son magnifica literatura. *Profesor del Colegio de Literatura Dramatica y Teatro de la FFyL. .