SECCION ESPECTACULOS PAG. 41
BALAZO: ROCK, BLUES Y REGGAE
CABEZA: LAS TENTACIONES DE ALEX SYNTEK
CREDITO: HECTOR LEON

Despues de largo tiempo sin pisar los escenarios, Alex Syntek y la Gente Normal tomaron el no menos famoso e inmenso cine Opera para ofrecer un concierto solo para amigos, en lo que parece ser el regreso del musico despues de sus incursiones en la produccion, en particular con el esplendido trabajo que realizara con Tania Libertad en su mas reciente disco.
Momentos antes de la medianoche, cuando el grupo de fans de Syntek entro en calor gracias a la cortesia de Smirnoff, un grupo de ballet al estilo new romantic, con fuegos pirotecnicos, humo y sonoros cohetones, realizo una coreografia que enmarcaria la entrada de la banda. Un bien dispuesto escenario, un equipo de seguridad atento, un discreto pero efectivo trabajo en las luces y un sonido insuficiente para el inmenso cine, pero necesario para el centenar de gente reunida, fueron el sello de este concierto 
particular de un musico anhelante de exito que demuestra que se pueden hacer bien las cosas y con cierto toque internacional.
El sonido Syntek como su nombre lo indica se diferencia del panorama rockero nacional porque camina en otras direcciones: por un lado, no le apuesta a su lirica bastante pobre, "no existen imposibles ni barreras" sino a la musicalidad y el adorno, un pop casi disco y un rock que intenta ser progresivo pero que no se dispara. Y por otro lado, es un sonido donde la forma es contenido; el juego de escena y el show el musico que canta, toca los teclados al centro, se sienta en el filo del escenario y saluda a s
us fans se completan con el discurso musical.
Regresa Syntek al detritus feoderal con una mezcla de blues, rock y reggae, tocando algunas rolas como Desde ahi, Unos quieren subir y Cuando estoy contigo. Jorge Christian sobresalio con algunos de solos de sax y en general el tecladista dejo satisfecho al publico. El alcohol corrio en todo el cine Opera, y en sus innumerables filas vacias alguno que otro sediento adolescente hizo de las butacas un bano publico.
Mas escandaloso que armonico, Syntek demostro que su voz ha mejorado y que su sonido oculta muy bien las insufribles letras como la de la rola de Nuestras costumbres. Tal vez lo mejor de esta noche fue la organizacion y la apertura del bello cine Opera a conciertos de rock; este lugar, al igual que el cine Metropolitan, puede llegar a ser una verdadera catedral del rock.
Las viejas tentaciones de Alex Syntek de convertirse en mito y leyenda del rock nacional suenan un poco aventuradas, pero al fin en tentaciones se quedan y el chico emulo de Elthon John ya puede ser telonero de las mejores bandas de rock gabachas.
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