SECCION ESPECTACULOS PAG. 39 BALAZO: LA MUESTRA CABEZA: Amor y restos humanos CREDITO: JUAN ZAPATA Autor de una filmografia critica y singular con titulos como La decadencia del imperio americano (83) y Jesus de Montreal (88), el quebequense Denys Arcand consigue un intenso retrato del amor, la muerte y la sexualidad en la era del sida a traves de una serie de anecdotas cruzadas que unen a diversos personajes: un ex actor y mesero gay, su companera de cuarto indecisa de su sexualidad, una vidente experta en sadomasoquismo, una profesora lesbiana, un adolescente enamorado del primero y un asesino serial q ue desfoga su homosexualismo mutilando mujeres en Montreal. En Amor y restos humanos Arcand continua explorando varias de sus obsesiones como el sexo, la busqueda desesperada del amor verdadero y el terrible poder de la television, como lo demuestra este melancolico relato emocional de horror y crisis generacional, cuyo titulo ademas de ser explicito juega de manera alegorica con la sobrevivencia personal cotidiana de los personajes: la amistad, el riesgo de una nueva compania sexual, la incertidumbre o la violencia urbana. Caos, perversidad, ambigedad sexual, frustracion, soledad, crimen y vacio afectivo, segun una historia que recuerda el hiperrealismo visceral al estilo de Las noches salvajes e intenta intelectualizar en torno a la nueva cultura del crimen y sus iconos, los serial killers, de ahi las citas textuales a criminales sadicos como John Wayne Gacy, quien violo y descuartizo a varios jovencitos en Chicago; o los debates televisivos sobre los rituales criminales de estos, por ejemplo (sus metodos, souvenirs en este caso, orejas de sus victimas y desviaciones sexuales). Como una suerte de reelaboracion postexistencialista noir godardniana, algunos de los personajes extraidos de la obra teatral del militante gay Brad Fraser, quienes no estan muy lejos de ser los "hijos de la decadencia del imperio americano", intentan vivir peligrosamente hasta el fin, sobreviviendo a su propia decadencia y a su problematica generacional, en esta suerte de reflexion sobre los postulados nihilistas de la generacion X por supuesto, vista en el extremo opuesto de la complaciente La dura realid ad. Con escenas inquietantes como el encuentro entre David (Gibson), el protagonista, y Kane (Fergusson), el chavito que se obsesiona con este, o el acto de western sadomasoquista que roza la caricatura patetica, Arcand y su Amor y restos humanos coincide con Exotica, de su colega Egoyan, no solo por la fantasia erotica que presupone el personaje de Mia Kirshner, sino por su entramado perturbador de escapismo y frustracion en una urbe fria y desolada como Montreal. El filme se completa con el esplendido corto d e Juan Carlos de Llaca, Me voy a escapar, insuperable ejercicio de onirismo visual realizado con un estilo narrativo que rompe con los moldes y esquemas del cortometraje nacional. Amor y restos humanos (Love and Human Remains, Canada, 1993). Director: Denys Arcand/ Guion: Brad Fraser, basado en su propia obra teatral/ Fotografia: Paul Sarossy/ Musica: John McCarthy/ Editor: Alain Barll/ Con Thomas Gibson, Ruth Marshall, Cameron Bancroft, Joanne Vannicola, Matthew Fergusson, Rick Roberts/ Distribuida por Latina. .