SEC. CIUDAD PAG. 20 CINTILLO: DECIMO ANIVERSARIO CABEZA: San Juanico: despertar con el horror en el rosto CREDITO: ALEJANDRO ALMAZAN Y PERDO DIAZ G. SEGUNDA Y ULTIMA PARTE "Cuando salimos a las calles esto era la locura generalizada. Todos abandonaban sus casas; vi a varios con las ropas quemadas, pegadas al cuerpo, con espaldas sangrantes. A uno de ellos le pedi que se detuviera porque necesitaba ayuda de inmediato. No hizo caso. Estaba como un autonoma; estaba ido. Estaba en un trance tal que lo unico que queria era mover las piernas para escapar del alcance de las llamas, pero las quemaduras eran tan graves que primero perdio una pierna y luego la otra. Y es que, senor, aunque usted no lo crea, aqui, al salir de mi casa, el calor era tan fuerte que parecia como si las llamas estuvieran apenas a unos metros. Y no. Un kilometro y medio nos sseparaban de donde el incendio se llevaba consigo a tantas y tantas familias". Gritos, cadaveres por doquier. Casas en las que nada, a no ser por tabiques manchados de negro, quedo a salvo. Todo lo derrumbo el vendaval caliente en un pueblo que hoy amanecio mudo. 5:45 horas. Y han pasado cinco minutos... Repiquetea el telefono en la estacion de bomberos de Fray Servando Teresa de Mier. Es la primera llamada, anonima, en demanda de auxilio. Algo muy grave esta pasando en San Juan Ixhuatepec... es el mensaje, vayan pronto... Segundos despues sonarian los telefonos de las estaciones de bomberos de por lo menos 15 poblaciones mas, incluyendo Cuernavaca, Toluca y Pachuca. Los primeros bomberos en llegar a la zona de desastre son los de la estacion localizada en Xalostoc, pero no podran entrar al area incendiada. Todavia no. La Policia de Caminos disena de inmediato la En San Juan Ixhuatepec ya hay fotografos, reporteros, rescatistas. Ellos seran testigos de una nueva explosion. La segunda. Mas fuerte que la anterior: el hongo de fuego se expande primero abajo y alcanza varias manzanas del pueblo. Luego, la columna naranja sube hasta 500 metros de altura. En las viviendas todo se calcina: seres humanos, animales, muebles... Tambien un reportero de En la huida hacia el metro Indios Verdes en busca de ayuda una mujer cae encima de su bebe en brazos. Se levanta precipitadamente. Al bebe se le han desprendido los dos pies. La senora trata de pegarselos, pero todo es inutil, ni sus gritos hacen que la gente se detenga en su auxilio. Domingo Torres esta en la punta del cerro de El Copal. Ha dicho a sus familiares que se vayan que busquen ayuda y acomodo en casa de unos tios, alla en Lindavista. Que el, aunque parezca inoportuno, se regresara a cuidar la casa. Es que la dejamos abierta... les dice y los convence. Cuando otea el horizonte y sus ojos se posan sobre las gaseras, observa como varios cilindros han sido expulsados al cielo y sigue, fija la mirada, a una de estas Don Domingo camina ahora despacio. Quiere cerciorarse de que no, de que no pudo haber sido en su casa donde cayo la salchicha. Pero cuando dobla en la esquina su vivienda no esta mas. Ha desaparecido. Se acerca a los escombros y busca en el suelo el tanque de gas que ocasiono esto. "Se debe haber enterrado por aqui, en el patio piensa, por aqui debe de andar..." Pero no. Cuando mira hacia la ladera del cerro se da cuenta de que la suya no ha sido la unica casa afectada. Tambien las de cuatro vecinos mas estan en ruinas. Y la "Imaginese cuanto volo si yo la via pequenita. Supuse que seria como un tanque de gas estacionario de tamano normal, pero que lejos estaba yo en mis cavilaciones: media cinco metros de alto y 25 de largo. Y mi casa fue la primera que destruyo, en dos o tres rebotes acabo con las de mis vecinos. "Yo miraba hacia abajo, hacia las esferas que seguian ardiendo en la planta de Pemex y en Unigas, hacia esa enorme llama de medio kilometro de altura; hacia la gente que seguia frenetica, huyendo. Y hacia mi casa, que con tantos esfuerzos habia construido. No lo soporte, senor, y se lo digo sinceramente, creo que nadie lo hubiera hecho. Me sente en una piedra y solte a llorar". Vendra otra explosion minutos mas tarde. Y otra, y otra. Seran 16, no solo en la planta sino en los ductos que distribuyen el combustible a Pemex. Son las 7:01 horas. Han pasado 81 minutos... El telefono de la familia Del Mazo suena una y otra vez. Alfredo del Mazo, gobernador del estado de Mexico, es despertado con una mala noticia: exploto San Juanico. Le hablare a Mario Ramon (Beteta, director de Pemex), a ver que sabe el. Y todos ya lo sabian. Las lineas piratas de gas que Pemex tenia en conexion con las demas gaseras eran las principales causantes de la explosion. se recordo a la bomba atomica de EU Mientras tanto, el programa televisivo o Mientras, en San Juanico una explosion mas leve anuncia a los bomberos que podran entrar a la zona en accion. Son las 8:00 horas. Han pasado ya 140 minutos... Doblan las campanas de las iglesias cercanas a San Juan Ixhuatepec. En la zona devastada dos kilometros a la redonda los bomberos luchan para que el fuego no se expanda. Todavia hay depositos de gas que no han estallado y, cerca de alli, esta la planta de recepcion. La zona esta casi evacuada. Los rescatistas viven un panorama desolador: viviendas en las que sus 15 miembros yacen semicalcinados sobre las camas. La muerte les tomo por sorpresa. Imagenes que se meten en la conciencia tan de repente: gente deambulando sin sentido y que han perdido los brazos; gente que, a estas alturas, ya no sabe bien a bien el significado de la palabra dolor. Los intestinos de dos hombres se confunden con los resortes de sus camas. Un perro solitario olfatea en busca de su amo. A estas alturas en todo Mexico hay consternacion. Las 9:05 horas. Han pasado 205 minutos... Las llamas aun se elevan a casi cien metros de altura y el calor que despiden se siente a un kilometro de distancia. Los hospitales de Tlanepantla acogen a 122 heridos, los de Ecatepec a 150 y los de Cuautitlan a 125. Las ambulancias siguen rescantando victimas. Se inicia un extrano peregrinar a la Basilica de Guadalupe, que esta vez servira de refugio para rios de casi tres mil personas que llegaron a pie, en coche, en caminones; se instalan en la nave principal de la iglesia y piden a la Virgen del Tepeyac que todo sea un sueno. Y no, no lo es. Otro tanto busca lugar en el Lienzo Charro de la Villa. Tambien sirven de refugios el Instituto Politecnico, la preparatoria Nueve, la escuela primaria Carlos Gonzalez Pena, el colegio para Damas Marie Curie, las iglesias del Perpetuo Socorro, del Arbolillo, del Refugio; centros deportivos como Los Galeana, Francisco Zarco, Miguel Aleman y el 18 de Marzo. Ahi, dramaticos relatos de la tragedia: El viejo Lucio Caldera Aguilar preguntaba por su hija Maria del Rosario Caldera Garcia y por sus nietos: Elias, Laura, Maria del Rosario y Juan Carlos Montserrat Caldera "a quienes no veo desde la explosion... Si, viviamos en San Juanico, en la calle de Lopez Mateos... Si, ellos dormian en un cuartito de laminas negras que habiamos construido hace un mes. Un vecino dijo que los vio envueltos en las llamas. Dios no lo quiera... Que alguien me diga donde estan...". pero se tornan en llanto sinfin Sonia Morena Corona, de la calle 20 de Noviembre: "mis padres Fidel y Margarita fueron a rescatar a mis seis hermanitos como a eso de las seis de la manana, cuando todo ya era un infierno. Mis hermanos se habian quedado con unos tios a dormir. Ninguno de ellos regreso. Creo haber reconocido el cuerpo de mi hermano mayor todo deforme y con la piel levantada, porque tenia una placa de identificacion que traia desde hace un par de meses que regreso de Estados Unidos". Relatos que hacen llorar. Historias que nunca terminan. Palabras que estremecen. Las 11:50 horas. Han pasado 370 minutos... Ramon Mota Sanchez, secretario de Proteccion y Vialidad, telefonea al jefe del Departamento del Distrito Federal, Ramon Aguirre: Jefe, el cuerpo de bomberos trabaja coordinadamente. Tienen controlada la situacion en San Juanico. ¨De veras? Pero la version entra en contradiccion casi simultaneamente con otras de Pemex, que advierten de la posibilidad de que haya mas explosiones. No las habra. Las autoridades daran su informe horas despues: 313 muertos, un poco mas de dos mil heridos y desaparecidos, 10 mil damnificados, 250 mil trasladados, 139 casas destruidas, dano parcial a 230 mas y 24 vehiculos calcinados. Pero los habitantes de San Juanico hablan demas. Un medico del Hospital General del Centro Medico La Raza, en la calzada de Vallejo y Jacarandas decia: "Aqui solo ya han fallecido mas de 200". Y mientras, en los otros nosocomios los medicos anotan en sus libretas: "No identificado... no identificado...". la Revolucion, ...la piel, "chinita" Las 11 de la manana del 20 de noviembre. Han pasado 29 horas y 40 minutos.... En la capital del pais se festeja un ano mas de la Revolucion Mexicana. Y ahi, el Zocalo se convierte en un minuto de silencio. Un minuto que Sergio Guzman del diario Unomasuno describio asi: Quien sabe donde diablos nacio ese aullido. Venia como del fondo y de todos lados. Era como un quejido. Como un grito. O como llanto. Quien sabe donde diablos se originaba. Pero en un instante correteo y se metio entre el aire, para llegar a la gran plaza. Y el uuuu...! de una sirena lejana le pego en el rostro a todos, se introdujo en los oidos, y se convirtio despues en un terrible vomito silencioso. ¨Cuanto? 1 minuto... 1 minuto exacto, con la Revolucion convertida en silencio. Con el desfile congel ado... Y los deportistas, y los hombres, y los soldados, y los ninos, y las mujeres, y los funcionarios, y el Presidente, sintiendo la piel chinita. Sintiendo todos el corazon en la boca misma. Por el duelo. Por el luto. Por la propuesta del presidente De la Madrid, para hacer, de 60 segundos, un presente-recuerd-doloroso de la explosion y la muerte de San Juanico Ixhuatepec. Ese minuto exacto que congelo el desfile deportivo cuando apenas arrancaba. Cuando nadie supo con exactitud de donde diablos nacio aquel aullido... Aquel que se oyo cuando en la Latino el tiempo registraba que eran las 11 y 36 minutos de la manana. Uuuuuu...!, lejano. Y luego alli cerquita, yendo y viniendo. Desdoblandose entre el aire delgado y los ojos plomizos que se pegaban al suelo, en un tiemmpo de encanto maldito, que se fue luego de a poco solamente para que la tradicion y el rito revolucionario entregaran sus pasos y sus rutinas a la mirada de un Presidente y un pueblo contagiado de dolor. Un minuto. Pero luego muchos mas. Ya no de silencio absoluto, pero si de algo semejante a una ronquera. por que no, claveles rojos Las seis de la tarde del 20 de noviembre. Han pasado 39 horas... Hace mas de cuatro horas que el presidente de la Republica, Miguel de la Madrid Hurtado, volo sobre la zona afectada. Y pregunto a uno de sus cercanos colaboradores: ¨Quien, quien origino esto? No hubo respuesta. Y entonces, a enterrar la tragedia. El viento sopla fuerte y choca contra los 20 mil demudados rostros que miran una enorme zanja de tres metros de profundidad y 60 de largo: es la fosa comun que abrio desde minutos atras un buldozer motoconformadora y cuyo operador de la maquina que abria la tierra la manejaba con coraje y desesperacion. 272 feretros esperan ser cubiertos de tierra negra en el panteon de Los Caracoles, en la colonia Jimenez Cantu, perteneciente al municipio de Tlanepantla. 272 ataudes de color blanco "para los angelitos", dice una senora refiriendose a los ninos, grises para las mujeres y negros para los hombres grandes, muy grandes, que hasta podrian guardar a un gigante. 272 victimas sin identificar y la mayoria de ellas con el cuerpo incompleto. Los parientes de los muertos estan heridos o muertos. 272 cajas de laton donadas por la Asociacion Nacional de Funerarias. 272 claveles rojos. Tambien muchas bolsas de polietileno con brazos, piernas, dedos, cabezas... El cementerio esta situado en la cima del cerro Los Caracoles. La gente ha tenido que caminar mas de 600 metros de callejuelas escarpadas y pedregosas para despedir a sus muertos. Y mientras a la voz del padre Manuel Robledo Gutierrez, ciego a consecuencia de las llamaradas, responde el eco de 20 mil gargantas: "Padre nuestro que estas en el cielo..."; en la tenue luz del atardecer, desde el cerro otea un horizonte grisaceo, un pobrerio inmenso: un centenar de casas de tabiques de adobe y de laminas de carton que lograron permanecer de pie, aunque sus moradores no. Al ciego parroco se le resquebraja la voz. Calla por segundos. Besa el rosario ambar que cuelga de su cuello y la blanca sotana recibe un par de lagrimas. Con la inseguridad de su mano derecha, quemada tambien, mete un racimo de flores sobre un balde para dejar caer las primeras gotas de esa agua que el creador bendijo. Militares, policias y medicos de la Secretaria de Salubridad y Asistencia que hacen un recuento de los cadaveres, observan los inciertos pasos del cura, guiado por un nino que trae el rostro desfigurado y sus labios apenas dicen algo, entre tanto muerto. Entre el gentio que pregunta aun por sus familiares, se encuentran el subprocurador general de la Republica, Fernando Baeza Melendez; el procurador de Justicia del Estado de Mexico, Humberto Lira Mora; el director de seguridad publica del estado, Jesus Buentello; y los presidentes municipales de Tlanepantla y Ecatepec, Alfonso Alvarez Reyes y Josue Valdes Mondragon. Ojala termine pronto este desmadre, comenta Alfonso Alvarez Reyes. Pero tendra que esperar mas. Alguien pide un minuto de silencio. Un soldado toma el clarin y entona el toque de silencio. Los tambores y cornetas de una banda de guerra secundan el funebre canto. Abajo, a las faldas del cerro, las patrullas sueltan el aullido de sus bocinas, al tiempo que las luces rojas y azules colocadas sobre los toldos de los vehiculos rompen con aquella oscuridad que ya mancha el atardecer. Un minuto exacto. Un minuto que quisiesen regresar en el tiempo. Un minuto. El silencio lo apaga un comandante de policia al gritarle a un medico: Arreguin, que paso, que el buldozer eche encima la tierra. El presidente municipal (de Tlanepantla) ya dio la orden y no puede esperar! Como, no, Legorreta, nomas que todavia no acabamos con el recuento de los muertos!, le grita el medico. Furico, y entre el sollozo de los colonos de San Juanico, el comandante ordena enardecido: Mira, pinche doctorcito, te digo que el presidente ya dio la orden de que echen la tierra encima, ni que se hubiera robado a los muertos. las primeras paladas de tierra El cura ciego, entonces, repite las palabras con las que comenzo la ceremonia funebre: "aquellos que murieron ya estan en el cielo". Y las primeras paladas de tierra y cal caen sobre los ataudes. Nadie llora. La multitud comienza a lanzar claveles blancos y rojos, manojos de hierba fresca y marchito cempasuchil a cada una de de las cajas de frio fierro sin mayor identificacion que un numero y a su lado un signo negativo en senal de que no habia sido identificado marcado con plumin verde. Primero son arrojados a la fosa lo que queda de "los angelitos", luego los restos de las mujeres y despues los hombres. Ai vienen otros. Haganse a un lado... Y un autobus de la ruta 100 que sirve como carroza llega con 24 feretros mas. La gente reacomoda a los primeros para aprovechar todo el espacio disponible dentro de las grandes bocas de la tierra que pronto cerraran y nunca se abriran. El entierro de la tragedia termina a las 19:30 horas. Y abajo, el destrozado valle de San Juan Ixhuatepec, salpicando de luces tenebrosas, parece no querer dormir. 21 de noviembre. Ya han pasado dos dias... San Juanico es un pueblo fantasma. Hasta que, en fila, de diez en diez comienzan a regresar sus moradores. Lo hacen entre las expectacion de nuevas explosiones y la ansiedad por ver que ha quedado de sus viviendas. Vuelve la vida a este pueblo devastado. Pero el destino se ha ensanado con ellos. Y cuando el regreso esta apenas iniciandose, una nueva fuga de gases hace volver a muchos. Huyen despavoridos nuevamente. Solo el anuncio en altavoz desde un helicoptero informando que fue una falsa alarma, les devuelve la confianza para internarse en las deserticas calles de su localidad. las manos ...y mintio Petroleos Mexicanos se lavo las manos en un principio. Pero las investigaciones de la Procuraduria General de la Republica ordenadas por el primer mandatario deslindarian responsabilidades. El pueblo llego despues de las gaseras, mintio Pemex. Fueron dias interminables para los habitantes de San Juan Ixhuatepec, de presiones, de tramites y hasta de asesinatos, como el que ocurrio al obrero Telesfoero Rivera, quien su unico delito fue prestar su sonido para organizar un mitin en contra de Pemex y el 11 de diciembre amanecio muerto. Otros fueron secuestrados. Algunos mas golpeados en los constantes mitines y plantones en demanda de indemnizaciones y vivienda. Mario Ramon Beteta no hacia caso. Pero todo cambiaria a base de denuncias por parte de los colonos. Alfredo del Mazo entrego dias despues 125 viviendas a las que le faltaba todo, en la Unidad Anahuac. El 3 de diciembre la PGR determina la culpa de Pemex. Y Miguel de la Madrid Hurtado decreta que las gaseras tienen que salir de San Juanico cuanto antes. El Instituto Mexicano de Desarrollo reporta, conservadoramente, el monto de los danos en 32 mil millones de pesos. Y los desglosa asi: 10 mil 152 millones de pesos por danos en el poblado de San Juan Ixhuatepec (9,692 millones por concepto de indemnizaciones y gastos funerarios y hospitalarios, de 452 muertos y cuatro mil 248 heridos oficialmente, mas de 460 millones de pesos por concepto de materiales); seis mil 864 millones de pesos por danos en la planta de Pemex (do mil 880 millones por indemnizaciones de muertos y heridos, mas de tres mil 984 por danos materiales); mil 600 millones por danos en las empresas gaseras (mil 444 millones por indemnizaciones de muertos y heridos, mas 200 millones por danos materiales); 11,250 millones por concepto de danos a la planta industrial del estado de Mexico, y dos mil millones por concepto de danos al sistema ecologico de la zona. Existen 431 querellas en contra de Petroleos Mexicanos. La paraestatal tendra que pagar un total de 457,442,791 pesos a los habitantes de San Juanico. La zona en donde se origino la explosion sera convertida en un parque. Y llevara el nombre de Gabilondo Soler, el grillito cantor. ...pero la zozobra aun subyace Ano con ano, cada 19 de noviembre se organiza una misa en el parque de San Juan Ixhuatepec. Y se hace un recuento. Este: 1985.El fallo de los peritos no senalo culpables, a no ser la responsabilidad civil atribuida a Pemex y que se ha diluido en el pago de raquiticas e incompletas indemnizaciones. Investigaciones sobre el siniestro detectaron como causa posible del estallido una red paralela de tuberia por las cuales se surtia fraudulentamente el gas a las empresas distribuidoras. El parroco Agustin Abel de la Cruz Lopez fue trasladado a otra iglesia, pues era "nocivo para la poblacion"; uno de los lideres de vecinos, Marcelo Moreno Avila estuvo desaparecido y despues se informo que habia sido detenido. Otro lider de colonos, Jose de Jesus Molina, calcula que los muertos "fueron, minimos, unos mil 200". (Amalia Morales responde a la pregunta: ¨Podra su hijo tener una vida normal? Ahorita tiene siete anos. Era hora de que hubiera entrado a la escuela. Pero como se quemo todo el cuerpo no puede caminar bien. Sus dedos de la mano izquierda se le hicieron chiquitos; en la derecha solo tiene uno malo. Asi que podra aprender a escribir...) 1986.Se notifica en el (Bulmaro Flores Hernandez dice: ¨Perdi a algun familiar? Si, a 19. A mis padres, nueve hermanos, siete sobrinos y mi hija. Mi esposa, que estaba embarazada, mi hijo de dos anos y yo nos salvamos porque fuimos a poner nuestro puesto en el mercado). 1987.Mas de 30 mil moradores del Valle de San Juanico viven en la zozobra cotidiana. Pese a las ordenes de las autoridades de alto rango, ni las demandas de organismos politicos, ni manifetaciones de los colonos, han logrado que se reubiquen las gaseras. Por las noches los habitantes de las calles de Narciso Mendoza, Mariano Matamoros y Vicente Guerrero temen que esyalle alguna de las seis gaseras que siguen aqui; incluso tapan las coladeras de sus casas para que no penetre por ellas el olor a eter que despide una fabrica quimica que tambien se establecio en San Juanico. (Espiridion Bernal Celedonia, responde: ¨Por que no nos fuimos? Porque perdimos un hijo de 18 anos. Nunca encontramos su cuerpo. Mi esposa cree que si regresa algun dia y ya no estamos aqui, no nos va a encontrar). 1988.Aqui, un viento helado que recorre los callejones y se mete en los sentidos ha eternizado aquel instante. Como ocurre desde 1984, cada ano, hoy los ninos, mujeres y viejos de San Juan depositaran en algun lugar que a ellos no se les olvida una flor, un mono negro, una oracion y una lagrima en recuerdo de sus muertos. Mientras tanto, los habitantes aun esperan la reubicacion de las gaseras que debio hacerse desde 1986, segun el dictamen de la Comision Intersecretarial, creada a raiz de la tragedia. En San Juanico sus pobladores aun tienen en mente la promesa que hizo el 4 de diciembre de 1986 el entonces secretario de Energia, Francisco Labastida Ochoa, de retirar las plantas de gas y trasladarlas a Puebla e Hidalgo. Pero Labastida se fue de gobernador a Sinaloa y las gaseras se quedaron en San Juanico. (Juan Hernandez Loza, alias El Chapitas: Pero no son chapas, son quemaduras y se toca con descuido sus cicatrices, rie pero su piel sin elasticidad contrae los musculos de su cara y lo que quiere parecer una sonrisa apenas es una mueca. Yo estaba bien chavo. Vivia en la ciudad perdida a la orilla de la via, a un lado de donde esta el Parque de los Muertos. Sali al bano y la explosion me hizo chocar contra la pared. Mis primos Luis y Daniel tuvieron peor suerte: fueron arrojados por las ventanas de la casa y murieron en un momento). 1989..Siguen ahi las gaseras. Gracias a los constantes reclamos, la vida en San Juan se ha desarrollado con mas rapidez que antes de la tragedia. Ya esta el Parque Miguel Hidalgo, una plaza civica, un centro de salud y una biblioteca. Les han prometido la construccion de escuelas. Se comienzan a pavimentar muchas calles, incluso, de los cerros aledanos. La salida de las distribuidoras, dice Jesus Molina Sanchez, representante de los habitantes de esta zona, podria incluso afectar las fuentes de empleo y la distribucion de gas. "Subiria mucho de precio", afirma. (Matilde Lopez: ¨Que si nos retribuyeron algo de lo que perdimos? A mi me amenazo un licenciado quesque de Pemex por reclamar los derechos de mi hermana y aunque sea mujer, yo si le parto el hocico si algo me pasa. Pero, ¨que iba a ser de mis hijos? Asi que me quede callada). 1990.A seis anos y cuatro dias de la tragedia, San Juanico se viste de peligro: tres explosiones en un ducto de gasolina de Pemex estallan a las 8:50 horas. El gobierno no notifica el numero de muertos. Nunca se sabra, pero Armando Diaz Meneses, trabajador de la planta, dice haber visto seis companeros muertos y dos lesionados. Siguen demandando los pobladores la salida de las gaseras. Pero ahora tambien reclaman que otras empresas peligrosas que han instalado aqui. Continuan trabajando las gaseras Unigas, Gasomatico, Gas Metropolitano, Bellogas y la compania Infra. Algunas de ellas han levantado bardas de cinco metros para que los vecinos no vean su funcionamiento. Muchos colonos se han ido. Pero llegan infinidad mas. San Juanico sigue creciendo. (Ramona Rueda Jara: ¨Que cuanto dinero nos dieron? Pues mire, a mi me dieron un millon 600 mil pesos, pero de que sirven si tengo siete hijos y no lo s puedo atender como se debe. Mis quemaduras en las manos y en los pies me dejaron toda inutil). 1991.Los habitantes de Ixhuatepec se han acostumbrado a vivir en peligro. Las gaseras aun no salen. Y Abel Lucero Bermejo, coordinador general de la Unidad Municipal de Proteccion Civil de Naucalpan, asegura que la zona ofrece las suficientes garantias para sus moradores. Hay otros peligros: Euzkadi, Maderas Conglomeradas y Quimicos Troidal, han asentado ahi sus bases. El pasado agosto como en otras ocasiones estas empresas lanzaron una gran cantidad de desperdicios al rio de Los Remedios, el cual se pr endio y se formaron llamas de 15 a 25 metros de altura en una extension de 200 metros. Contaminacion es el otro problema, dice Lucero Bermejo: "cotidianamente purgan los ductos del gas asi como de las pipas, lo que produce molestias en garganta y ojos". (Lidia Flores: .¨Que si nos ayudaron como se debia? Nombre, si ora estamos mas amolados, y si uno se pone a hablar, pior tantito. Por ahi anda gente de Pemex golpenado a todo el pueblo. ¨Como se que uste no es uno de ellos?) 1992.Pareciera una broma macabra del destino, pero cuando los habitantes de San Juan se despiertan recordando que ya han pasado ocho anos de la tragedia, una voz de alarma les hace correr nuevamente. El descuido del conductor de una pipa que transporta acido sulfurico provoca que se escape la sustancia al momento de darle mantenimiento, generando panico entre la poblacion. Y las gaseras siguen ahi. (Petra Arvizu: ¨Que, si puedo trabajar sin manos? Pus si. En el hospital me ensenaron a usar los munones para lavar la ropa). 1993.Ya son 10 mil las personas que habitan tan solo el centro de lo que fuera el pueblo de San Juan Ixhuatepec. Victor Gonzalez, asesor de la Union Popular Ixhuatepec, comenta: Los anos siguen pasando y aun no han sido reubicadas Gas Metropolitano, Gasomatico, Gas y Servicio, Ecogas, Bellogas y Pemex. Y nosotros seguimos muriendonos de miedo. Javier Robles Salinas, representante de las gaseras dice que "estas son fuentes de trabajo para mas de cinco mil obreros de los alrededores y si las gaseras se van tendrian que irse tambien muchas industrias que han llegado en los ultimos anos". (Avelina Garcia: -Yo perdi a mi primo Esteban y Pemex me indeminizo con 500 mil pesos. Nunca lo supe administrar y es por eso que aun vivo en la miseria. Estudie para secretaria, pero con estas cicatrices donde me van a contratar). se iran, ¨...cuando? 19 de noviembre de 1994. Han pasado 10 anos... Desde las alturas del cerro del Copal, se observan los arboles de los que ahora es el parque Gabilondo Soler. A un lado se construira proximamente asi se lo han prometido a los colonos un hospital periferico. Ya hay escuelas secundarias y hasta una preparatoria con tres profesores y dos aulas. Por las calles, ya pavimentadas, deambulan los habitantes de San Juan. Cada uno con una historia a cuestas, cada uno con relatos que hacen estremecer. Pareciera una colonia nueva. Casas en construccion con apenas unos cuartos levantados. Y tambien mansiones, de aquellos que tras la tragedia supieron administrar sus indemnizaciones; nuevas avenidas, mas y mas vegetacion. Pero caminar por estas calles de largas pendientes no deja de ser un peligro: Las gaseras aun estan ahi. ¨Cuando se iran? ¨Cuando? .