PAG. 24 SECCION: INTERNACIONAL CINTILLO: COORDENADAS CABEZA: EU: el neorracismo y neoconservadurismo CREDITO: EDIT ANTAL ¨De que temen los estadounidenses que prefieren restaurar los tiempos pasados? El discurso xenofobico de Pete Wilson en aras de ahorrar dinero para los nativos, la idea primitiva de Ross Perot de encerrar a Estados Unidos del mundo para no contagiarse de la pobreza, y la propuesta de los capitanes ultras de la causa republicana, como Newt Gingrich, el representante por Georgia, que desean prohibir el estado para poder regresar al reino del individualismo y a la vieja democracia a traves de defender la famil ia tradicional, de condenar el aborto y de reivindicar los valores morales del pasado, -son las distintas manifestaciones de un mismo fenomeno. El conservadurismo a ultranza, que esta conquistando terreno entre los ciudadanos norteamericanos, siempre y en todas partes del mundo se ha nutrido de una angustia existencial, de la negacion o de la incapacidad de aceptar el presente. California, quizas a pesar de la voluntad de sus pobladores, y gracias a los inmigrantes, se ha convertido en un lugar de encuentro unico en el mundo, entre Asia, America Latina y la America blanca y la negra. Su prosperidad economica y cultural ha sido la maxima expresion de este proceso extraordinario que durante toda su historia ha ido enriqueciendo esta region. Sin embargo, hoy emerge en este lugar una nueva version del racismo, que ha pasado de un discurso biologico y jerarquico a otro culturalista y diferencialista. Existe un lazo evidente y determinante entre dicho neoracismo y el fenomeno de la inmigracion. No son los inmigrantes que representan el objetivo indiferenciado de una xenofobia endemica, sino al reves, son precisamente el odio, el miedo y la violencia contra ellos, los que explican la esencia del neoracismo actual. Lo que define el estatus del traba jador emigrado es su intercambiabilidad, su impersonalidad, pues es introducido a la sociedad norteamericana como una pura y simple fuerza laboral y nada mas. El extranjero, -vietnamita, tailandes, mexicano o dominicano-, desempena los trabajos mas duros, mas sucios, mas peligrosos y menos calificados en Estados Unidos. El dia de hoy, solo aquellos votaran a favor de la 187 que nunca se han dado cuenta de que el sueno californiano, y la legendaria calidad de vida de California, descansa principalmente en el trabajo duro de los recien llegados, motivados por una ambicion salvaje, casi bestial, para trabajar e ir adelante. La conjetura de Pete Wilson de que los indocumentados, presumiblemente mexicanos, solo van a California para cobijarse con los servicios del bienestar, y su conclusion de que si estos se derogaran aquellos regresaran a su pais, es prueba o de una ingenuidad increible o de una ceguera inconcebible. Segun la logica de los neoracistas, el problema empieza cuando el trabajador inmigrante "visible" por su diferencia racial, abandona su calidad de objeto y trata de encontrar vivienda, instalar su familia, ir a la escuela, en resumen, trata de ser un hombre y hacerse visible como ciudadano. La reaccion racista frente dicho desafio es establecer barreras interiores frente a este "peligro". Es lo que se le ha denominado como la colonizacion interna, el limite de transformacion de los derechos civiles y social es en politicos. Para Wilson y sus lamentables electores, los mexicanos simplemente son una carga porque son pobres, en cambio los asiaticos son hasta una amenaza porque se estan volviendo duenos de todas las ciudades. En San Francisco se oye todos los dias que los asiaticos dominan la ciudad. Ademas se comenta que son descorteses, e ingratos, pues se dice que "tienen mal humor porque trabajan demasidado". El buen ciudadano se queja de que la hija de una fulanita, americana nativa de cuarta generacion en California, no ha p odido entrar a Berkeley ya que esta lleno de asiaticos que no hacen mas que estudiar. El mito de California, exitosamente difundido en el mundo, consiste en que es el lugar del ocio, de las playas asoleadas y de las palmeras. El mismo cuento sostiene que California ha sido poblado por una inmigracion interna, nacida en Estados Unidos, proveniente de Iowa, Oklahoma o Broklyn, que llego buscando un invierno mas suave y una America mas facil. El maximo simbolo de ello, es que la empresa de Hollywood, la mas exitosa de Los Angeles, es precisamente de entretenimiento, llena de diversion, ocio y l igereza. Como lo apunta Richard Rodriguez, un conocido periodista y escritor californiano, es molesto para el ciudadano de California ver los mexicanos trabajando en Los Angeles porque los hace recordar que tan dura es la vida, y que en muchos lugares del mundo uno no tiene otra alternativa que trabajar asi o morirse. No es una impresion muy grata para quien esta huyendo en busqueda de la vida facil. En el nucleo de distincion entre trabajador y ciudadano esta el intento de instituir una ciudadania limitada que deja la poblacion inmigrada sometida a criterios de orden publico, de coyuntura economica y de tacticas politicas baratas. Para este sector de la poblacion sus derechos, en vez de ser un asunto de la jurisdiccion, se convierten en un problema de administracion o de la policia, precisamente porque son ciudadanos de segunda. A ellos no les alcanza el grado de plena garantia constitucional, porque f orman un sector de la poblacion que todavia aparece mas proximo a la condicion del subdito que a la del ciudadano. Su situacion es parecida a la de los proletarios en los tiempos iniciales del sistema capitalista, que durante mucho tiempo fueron considerados como un peligro para los verdaderos ciudadanos, pues los inmigrantes tambien son vistos como fuente de inseguridad y de criminalidad, y por tanto blancos de constante sospecha. Las elecciones legislativas de hoy revelaran la proporcion entre los ciudadanos realistas y lo quijotescos que proyectan el futuro americano a partir de un mito de la gloria de los tiempos pasados. .