SECCION ESPECTACULOS PAGINA 41 BALAZO: PANNONICA CABEZA: Jam session para los grandes maestros CREDITO: XAVIER QUIRARTE Es el 2 de julio de 1944. En el Philarmonic Hall de Los Angeles el pianista Nat King Cole acaricia el teclado con las notas suaves de "Sweet Lorraine" y luego entona la letra con voz casi susurrante. La temperatura en el escenario sube cuando el sax tenor de Illinois Jacquet (ese que enloquece a los hispters) se enfrasca en un duelo ardiente con el hombre que propiamente invento el trombon contemporaneo, J. J. Johnson. Abajo del escenario la gente grita, brinca, baila, se deja ir con las cascadas enloquecidas de bebop. Esa noche, bajo la mirada vigilante de Norman Granz nace la serie Jazz at the Philarmonic Concerts, mejor conocida en adelante por sus siglas JATP, concepto ideado para reunir a figuras clave de la historia del jazz y llevarlos de gira en una jam session eterna alrededor del mundo. En torno a Granz y lo que mas tarde seria su sello discografico Verve (antes poseeria varias companias) conviven en armonia representantes de diversas epocas del jazz. No cualquiera puede jactarse de haber tenido en sus manos contratos de figuras como Charlie Parker y Billie Holiday, Lester Young y Stan Getz, Jimmy Smith y Dizzy Gillespie, Ella Fitzgerald y Art Tatum. A traves de sus conciertos e innumerables grabaciones, Norman Granz contribuyo a crear y registrar buena parte de la historia de esta musica. Medio siglo despues del inicio de las giras JATP, en el Carnegie Hall de Nueva York, Verve celebro sus primer medio siglo de vida con la reunion de varias generaciones de jazzistas que rindieron tributo no solo a una compania de discos, sino sobre todo a los artistas que la han hecho grande. El concierto ha sido registrado para la historia en el disco Carnegie Hall Salutes de Jazz Masters. Verve 50th. Anniversary (Verve, 1994), un encuentro calido en esa noche en la que no hubo una sola estrella, unicamente musicos de primerisimo nivel dispuestos a pasarla bien. Escuchese, por ejemplo, el jugueteo del trombon de J.J. Johnson detras de la voz jubilosa de Dee Dee Bridgewater que interpreta "Shiny Stockings" o el exquisito solo de piano de Hank Jones en homenaje a Art Tatum en "Willow Weep for Me". Abbey Lincoln, una de las grandes divas del jazz, comparte con J.J. Johnson su homenaje a Billie Holiday en "I Must Have that Man". Antonio Carlos Jobim nos seduce con la introduccion de "Desafinado" (para abrirle paso a Joe Henderson al sax tenor) y luego muestra gran empatia con la guitarra de Pat Metheny en "How Insensitive". Los jovenes Roy Hargrove y Yosuke Yamashita saludan a sus grandes maestros, Dizzy Gillespie y Bud Powell en las piezas "Manteca" y "Parisian Thoroughfare". Como antano, Jimmy Smith sigue arracando alaridos con su candentas notas en el organo Hammond B3 en un sabroso duelo con el guitarrista Kenny Burrell. Miles Davis es revisitado por algunos de sus alumnos Gary Thomas, John McLaughlin, Herbie Hancock, Omar Hakim y Don Alias. La jam session desemboca en un homenaje a Charlie Parker en su clasica "Nows the Time". Despues de una candente introduccion por parte de los contrabajistas Ray Brown y Christian McBride, cantantes e instrumentistas se alternan al viejo estilo JATP, en el que cada solista retoma, completa, varia la frase de quien le antecede. Si acaso dos inconvenientes tiene el disco Carnegie Hall Salutes de Jazz Masters. El primero, ser demasiado breve (dos o tres piezas de cada musico hubiera sido lo ideal, aunque segun creo asi se desarrollo el concierto) y el otro, la presencia del jazz ultraligero de Jeff Lorber que, al lado de las muestras de artilleria pesada, francamente palidece por su obviedad. El resto, dinamita en su mas pura escencia .