SECCION CULTURA PAGINA 36 CABEZA: SEMBLANZA DEL HEROE MITICO CREDITO: El verdadero estudio de los heroes mitologicos en el siglo XIX, periodo luminoso para la ciencia y para la fantasia cientifica. Durante esta epoca y lo que llevamos del siglo XX, los heroes de la antigedad fueron considerados, entre otras cosas, hombres ascendidos a un status privilegiado despues de su muerte, o bien espiritus de hombres difuntos, que moran en el interior de la tierra y ahi viven eternamente al igual que los dioses, semejantes a estos en sus poderes. Originariamente los heroes serian unos espiritus especializados en alguna funcion determinada o antiguas divinidades venidas a menos, aunque se ha insistido en la diversidad de heroes que no caben en la clasificacion de difuntos ilustres ni dioses caidos, sino que mas bien son seres sui generis ubicados en un plano intermedio entre el hombre y el dios. Al margen de estas diferencias, empero, los historiadores modernos coinciden en definir al heroe como el hombre del tiempo mitico, aquel que pertenece al teimpo sagrado, fundamentalmente distinto del historico y profano. ¨Que distingue a un heroe mitico de un simple mortal? En primer lugar, el heroe posee una fuerza y una potencia excepcionales. En segundo lugar, la vida del heroe escapa a las normas humanas, nacimiento irregular y maravilloso, infancia transcurrida en compania de dioses o de monstruos, existencia ocupada en peregrinaciones lejanas y en hazanas deportivas o guerreras, bodas divinas, muerte violenta o sobrenatural o incluso rapto al pais de los Bienaventurados. Por ultimo, por pertenecer al tiempo del mito, es decir, al tiempo en el que se consumaron todos los actos primordiales, los heroes adquieren un caracter de pioneros y de cradores, tanto en el culto como en la leyenda: son los ancestros de familias o de pueblos; fundan ciudades, oraculos, misterios y juegos; son los inventores y propagadores de la civilizacion. Hablando especificamente del teatro griego, entendemos por heroe tragico un personaje que por un defecto de su caracter, que es un defecto tragico, comete una trasgresion etica que desordena el cosmos, es decir, provoca una alteracion en el orden del universo y este desordenamiento se le revierte de manera directa y proporcional. El cosmos, que es capaz de restituirse a si mismo el orden que le fue alterado, en el acto mismo de reordenarse le devuelve al heroe tragico las consecuencias del desorden que provoco. Este pagar las consecuencias por parte del heroe tragico es substancialmente una forma de destruccion tal que en la mayor parte de los casos excluye la muerte del transgresor, por cuanto su muerte corresponde mas bien a la destruccion del cosmos y no a su desordenamiento, un desordenamiento que por fuerza solo es circunstancial. Por otra parte, en la mayoria de los casos la destruccion del heroe tragico es mas terrible de lo que seria su muerte, que por este motivo no le es permitida: la muerte del heroe traagico seria un lenitivo para su desgracia, una reduccion misericordiosa de la deuda que ha contraido con el cosmos. Consideramos que el cosmos y la divinidad en el contexto de la tragedia griega, y particularmente en el teatro de Euripides, son diferenciables pero consustanciales. El cosmos es el todo organizado, activo y perfecto, que constituye el universo en su conjunto. Es equilibrado, de ahi que la trasgrecion tiene que ser catastrofica y de ahi tambien que heroe no pueda eludir las consecuencias de su error tragico. La divinidad, en cambio, es la personificacion de las diferentes fuerzas que actuan dentro de ese cosmos y determinan su equilibrio, su rigor y su dinamismo; al mismo tiempo, la divinidad es lo que le da intencion al cosmos, define sus propositos particulares y determina sus mecanismos especificos de autorregulacion y conservacion. En contra de una idea muy extendida entre los no iniciados en los misterios de la tragedia, los dioses griegos sos perfectos en su virtud e inflexibles en su justicia. * Literato y dramaturgo, autor de Tlaxcalcingo. .