seccion inf. gral. guia: Perfil de LDCM cabeza: Perfil de Luis Donaldo Colosio La anecdota se presta para el relato del hombre predestinado, mas aun cuando el propio Carlos Salinas de Gortari lo recordo publicamente los ultimos dias de julio. Cuando Luis Donaldo Colosio estaba terminando la primaria fue recibido por Adolfo Lopez Mateos como el mejor alumno de su generacion. Fue, dijo Salinas de Gortari, "un alumno ejemplar". Casi al mismo tiempo, otro joven que compartia con Colosio el origen social: un hogar de la clase media provinciana y que, como el, hizo su carrera con base en becas y esfuerzo personal, era recibido tambien por el presidente de su pais, John Fitzgerald Kennedy, por razones similares. Pero quizas alli no se acaben los paralelismos entre Luis Donaldo Colosio y William Clinton. Colosio nacio el 10 de febrero de 1950 en Magdalena de Kino, en Sonora. Su padre, don Luis Colosio, es un agricultor sencillo, cabeza de una familia que vivia lejos de la pobreza pero tambien de una prosperidad sin altibajos; es, por sobre todas las cosas un trabajador, nieto de inmigrantes italianos, de Brescia, que durante decadas defendieron su tierra contra caciques, guerrillas e inclemencias del tiempo. El ahora candidato se enfrento de pequeno al reto de la comunidad, de un estilo de vida, en el mejor sentido de la palabra, provinciano, en el cual los valores de la tierra y la cercania entre los hombres se tornan imprescindibles. Como la tenacidad y la busqueda de nuevos horizontes, de nuevos desafios. Colosio termina la preparatoria con excelentes calificaciones y luego de un corto paso por la radio (donde trabaja unos meses como locutor de un programa de musica y poesia), decide estudiar economia y, como esa carrera no se impartia en la Universidad de Sonora, en lugar de continuar sus estudios en la UNAM, como la mayoria de los jovenes de su generacion, opta por el Tecnologico de Monterrey. Una inundacion que casi acaba con las tierras de su padre lo obliga a costearse los estudios por si mismo, gracias a una beca que obtiene combinando calificaciones altas con el trabajo de prefecto en uno de los dormitorios del internado del Tec. Es el mejor estudiante de su generacion, la de 1968-1972. En el 73, poco antes de partir hacia la Universidad de Pennsylvania para realizar su maestria, tiene su primer trabajo publico, encargado del distrito de riego 20 que une a Queretaro con Morelia. Despues de los estudios en Estados Unidos vendrian los anos como investigador en Viena, la especializacion en desarrollo regional y, concluidos estos, a traves de un antiguo companero del Tec, el ahora gobernador de Coahuila, Rogelio Montemayor, su llegada al equipo de Carlos Salinas de Gortari en la Direccion General de Politica Economica en la SPP. Primero es asesor de politica macroeconomica y social, poco despues subdirector de politica regional y urbana y mas adelante coordinador de la comision gasto financiamiento. Participa con Salinas de Gortari, entonces director del IEPES, de la campana de Miguel de la Madrid y, con este ya presidente de la Republica, se convierte en la SPP, en director general de Programacion y Presupuesto regional, concentrando en esa area los programas sociales y regionales del sexenio anterior como el PIDER y el Coplamar. Tres anos despues se convierte en diputado federal por Sonora y es designado presidente de la Comision de Programacion, Presupuesto y Cuenta Publica, convirtiendose en el principal operador politico de Salinas de Gortari en la Camara de Diputados, en una comision muy dificil, de una legislatura especialmente talentosa. Con los mas destacados hombres de la oposicion establecio, desde entonces, buenas, firmes relaciones. Siendo ya Salinas de Gortari candidato a la presidencia, en 1987, Colosio dejo la diputacion para convertirse en el coordinador general de la campana, oficial mayor del PRI y, ademas, candidato a senador por Sonora. Por eso no debio haber sido sorpresa que en diciembre de 1988 se convirtiera en el lider nacional del PRI. Y sin embargo lo fue. El operador del salinismo Resulto una sorpresa la llegada de Colosio al PRI porque se esperaba que ocupara una secretaria de Estado mientras que hombres con larga trayectoria en el partido (y menos futuro politico) tratarian de remediar los danos de las elecciones de 1988. El PRI venia del mayor descalabro electoral de su historia pese a haber obtenido el triunfo el 6 de julio y los pronosticos indicaban que quien llegara alli se convertiria, practicamente, en el liquidador del partido. Y la verdad es que las apuestas quedaron, todas, en contra de Colosio. Desde alli, desde la que fue una de las mas dificiles posiciones politicas de comienzo del sexenio, se gano el sonorense su candidatura. Colosio no liquido al PRI, tampoco lo convirtio en un partido de ciudadanos, pero con un trabajo tenaz logro romper las inercias, recomponer un partido que acababa de sufrir el reves electoral mas espectacular de su historia, logro avanzar en una reforma silenciosa que no se detuvo, siquiera, ante la derrota electoral en Baja California, la primera que aceptaba publicamente el PRI en su historia y que Colosio se adelanto a anunciar a la nacion, demostrando caracter y honestidad. Sin hacer ruido, con mucha prudencia pero sin detenerse, Colosio desplazo a los sectores sin liquidarlos y comenzo a desarrollar lo que seria el secreto de la recuperacion de 1991: el trabajo territorial, con dirigentes locales y regionales, y sobre todo, comenzo lo que seria el mayor de sus logros: la conformacion de un equipo solido, sin fisuras, de alto nivel. Y con ello a desarrollar una caracteristica que no es comun en nuestros politicos: la capacidad de trabajar en equipo. Colosio es un hombre que trabaja mucho y habla poco, que no gusta demasiado de las apariciones publicas pero sobre todo que delega trabajos para concentrarse en las decisiones. Su carrera ha sido de obstaculos pero tambien extraordinariamente afortunada. Parece haber sido, desde siempre, el hombre que se encontraba en el lugar indicado en el momento indicado para pegar el salto al escalon superior. Finalmente un hombre de suerte como lo califican algunos de sus colaboradores. Colosio logro sortear con beneficios politicos incluso momentos que para otros o en otras circunstancias, hubieran sido muy dificiles. Colosio fue el hombre que en noviembre de 1989 llamo a conferencia de prensa para anunciar el triunfo de Ernesto Ruffo en Baja California, el que convoco a una XIV Asamblea que resulto, hasta ahora, ser la experiencia catartica mas importante del priismo post88 y logro salir no solo indemne sino incluso fortalecido de ella. Pero sin duda su paso mas importante fue ganar las elecciones federales de 1991 con una extraordinaria recuperacion electoral y sin sobresaltos mayores (salvo en Guanajuato y San Luis Potosi donde la operatividad de esas elecciones quedo en buena medida fuera de sus manos). Comenzo a ser considerado como precandidato por los logros de la XIV Asamblea y por como preparo al PRI para las elecciones federales de 1991. Probablemente muchos pensaran que lo importante en ambos aspectos fueron los resultados finales, pero no fue asi: lo verdaderamente importante y que le dio otra dimension a esos hechos fue el impresionante trabajo de conciliacion de intereses que se realizo en ambos procesos. En la Asamblea, Colosio sento las bases para la territorializacion del partido y le dio voz y presencia a la militancia priista, dejo de ser el presidente del partido para convertirse en lider. En el proceso de preparacion de las elecciones logro que esa territorializacion se realizara sin afectar los intereses medulares de los sectores y de las trescientas candidaturas que presento entonces el PRI en ninguna de ellas se presentaron conflictos posteriores. El resultado fue un 62 por ciento de votos priistas, el triunfo en 290 de los 300 distritos electorales gracias al cual el presidente Salinas conto con una mayoria en el Congreso de la Union como para lanzar las principales reformas politicas y estructurales del sexenio.