GUIA: LEDOMEX SECCION: INFORMACION GENERAL PAGINA: 13 CINTILLO: DEBATE CREDITO: Agustin Jurado CABEZA: Edomex: elecciones en puerta El proximo 14 de noviembre se efectuaran nuevamente elecciones en la tierra de ilustres liberales del siglo XIX, del destacado jurista Isidro Fabela y de un gobernante que dejo huellas en la trayectoria del Mexico moderno, el licenciado Adolfo Lopez Mateos. Por supuesto que la sociedad mexiquense ha cambiado notablemente. En efecto, durante las ultimas cinco decadas emergio del Valle de Mexico, y del propio valle en donde se ubica la capital del estado, una formidable sociedad distinguida por la diferenciacion de sujetos y demandas, que como producto de la complejizacion, imprimen tendencias especificas en la agenda gubernamental e inciden, con nuevas actitudes ciudadanas, en la dinamica del sistema politico local. En la renovacion de las 121 alcaldias y las 40 diputaciones locales -6 mas que en 1990- participan candidatos postulados por partidos politicos nacionales; quiza por la misma transliteracion de la cultura politica ciudadana, los partidos locales no han florecido en la entidad, y como se recordara la ultima vez que participo un partido de caracter local, el Partido Zapatista de los Trabajadores, no logro los votos necesarios para obtener el registro. Importa tambien resaltar que no obstante el predominante perfil urbano de los mexiquenses, solo el Partido Revolucionario Institucional logro postular candidatos en todos los municipios y en los 40 distritos electorales, en tanto que las otras organizaciones politicas tuvieron que ponderar sus posibilidades en cuanto a logro de votos para lanzar sus abanderados. Es bien sabido que en los sistemas electorales contemporaneos se han buscado nuevas formulas para que los ciudadanos esten mejor representados en las diferentes instancias de gobierno. El Estado de Mexico no es la excepcion; recien se modifico su legislacion electoral para incrementar el numero de miembros en su legislatura, lo que aunado a modificaciones anteriores, dan cabida a las diferentes fuerzas politicas tanto en el Congreso como en los ayuntamientos. De manera que para la competencia electoral, la ley garantiza por igual a los partidos sus derechos a obtener el voto ciudadano, y al mismo tiempo garantiza el respeto al voto, lo mismo en las casillas que en la integracion del poder legislativo y en el ayuntamiento. La diferencia puede ser la capacidad partidista para atraer la preferencia ciudadana. Para tener una idea clara sobre las posibilidades de los partidos de oposicion conviene tomar en cuenta los indices de votos que obtuvieron en pasadas elecciones. Por principio de cuenta hay que resaltar el avance panista en la eleccion de diputados locales, de 7.12 por ciento del total de votos que obtuvo en 1981 paso al 16.31 por ciento en los comicios de 1990; en cuanto al Partido Popular Socialista (PPS) y el Partido Autentico de la Revolucion Mexicana (PARM) sus indices respectivos pasaron de 1.93 y 1.73 por ciento en 1981 y para 1990 lograron 2.54 y 1.58 por ciento, lo que denota un infimo crecimiento en cuatro elecciones. En cuanto a comicios municipales, el Partido de Accion Nacional (PAN) obtuvo un porcentaje de 6.41 en 1981; para las elecciones de 1990 llego a 15.09 por ciento; el PPS apenas paso de 1.44 a 2.29 puntos porcentuales en el mismo periodo; otros partidos como el PPS y el Partido Democrata Mexicano (PDM) a lo largo de estos anos lograron tales indices que si de ello hubiera dependido su registro, seguramente lo habrian perdido. El Partido de la Revolucion Democratica (PRD) tiene una historia aparte. Primero, su corta existencia no ofrece mayores antecedentes que 1990. No se puede asociar, de buenas a primeras con lo ocurrido en el estado en 1988 por la sencilla razon de que aquella fue una eleccion federal, y adicionalmente porque el partido no existia como tal, de manera que una hipotesis que sostuviera la trascendencia perredista desde 1988 no tendria ningun sustento valido para pensar las probabilidades actuales del PRD. Sin embargo, para 1993, los votos que obtuvo en las ultimas elecciones ofrecen una pista inicial: En ese ano logro el 14.42 por ciento del total de votos en la eleccion de diputados, y en cuanto a las alcaldias su indice fue menor (13.86 por ciento). Comparando con los votos logrados por el Partido Revolucionario Institucional, por todos considerado como el competido a vencer, si bien, el PAN logro disminuir la diferencia, que en 1984 fue de 5.8 a 1 y en 1990 en 3.9 por 1 sufragios, los comparativos denotan aun mucha diferencia. En cuanto al PRD, la diferencia es de 3.8 a 1 votos. Como puede observarse, los indicadores han variado poco en las ultimas cuatro elecciones locales, lo que demuestra que no obstante el esfuerzo por fortalecer al sistema de partidos en el Estado de Mexico, la oposicion no ha logrado atraer suficientemente la preferencia ciudadana; lo que dicho en otros terminos quiere decir que el PRI, con todo, sigue pareciendole a la ciudadania como la opcion, sino la mejor, si la que satisface la necesidad de expresion civica  todo, sigue pareciendole a la ciudadania como la opcion, sino la mejor, si la que satisface la necesidad de expre .