SECCION ECONOMIA PAG. 6 BALAZO: LOS HECHOS Y LOS MITOS CABEZA: Crisis de los partidos: el PRD CREDITO: Gustavo Hirales (Primera de dos partes) Retomo el asunto de la situacion de los principales partidos politicos nacionales. Toca el turno al Partido de la Revolucion Democratica. ¨Que pasa con el PRD? Al parecer todo el mundo esta de acuerdo en caracterizar la situacion de este partido como critica, incluso muy critica. La diferencia radica en que mientras unos califican esa crisis como de is del PRD como PRD junta sin fundir a la izquierda nacionalista del PRI encabezada por Cardenas y Munoz Ledo, a la izquierda socialista con afanes modernizantes del PSUM-PMS, y a un abigarrado espectro de sectas, corrientes y tendencias de la antes llamada el multitudinario voto cardenista de 1988 y la conviccion de una victoria moral y politica que habia estremecido hasta sus cimientos al sistema politico imperante. Han pasado seis anos de esos hechos, y el saldo es descorazonador; el partido hoy aparece mas desunido y (lo peor) mas derrotado que nunca. ¨Como se llego a esta situacion? ¨Fue un gran error o una cadena de ellos? Mi impresion es que en el origen de la crisis perredista hubo un gran error politico y luego una cadena de pequenos y medianos error es tacticos. El error macro fue haberle apostado todas las canicas a la politica de la ilegitimidad del gobierno de Salinas y a la posibilidad de su derrocamiento. Los errores tacticos son de algun modo la secuencia del fallo original, pero el hecho es que, de conjunto, uno y otros han impedido una puesta al dia del reloj perredista. Analicemos con mas detalle este problema, el del error original y sus consecuencias. ¨Cual fue la gran virtud de la politica de la ilegitimidad? Que permitio la union de todas las tendencias radicales del PRD, desde el cuauhtemismo teorico de los Gillys y los extrotskistas, hasta el revolucionarismo come-lumbre de lo que despues se conformo como la Trisecta (ACNR, PPM, MRP), pasando por Punto Critico, Asamblea de Barrios y todo lo que quedo enmedio. Los grandes excluidos del festin radical fueron los expesumistas, que durante todo un periodo historico se vieron marginados y apestados debido a que no mostraban la misma fe hacia el caudillo, ni rezaban con la suficiente uncion las nuevas oraciones de la verdad revelada. ¨Cual seria la gran debilidad de esta politica? Que, paradojicamente, le impidio al partido hacer politica. Al hacer descansar todas las alternativas partidarias en la expectativa mistica del les afines al PRI, con las consecuencias previsibles: muertos, encarcelados, iracundia y desmesura. Digamoslo asi: si el gobierno de Salinas estaba interesado en golpear y disminuir al PRD a su minima expresion, el partido del sol azteca le pavimento el camino. La catastrofica derrota electoral del verano de 1991 debio haber puesto al partido en alerta maxima, pero no fue asi. Declaro muy ufano que el resultado que mostraban las cifras electorales no era real, que era producto del , en el 91 Cardenas no fue candidato. Ah, pero ya veran en el 94, entonces si que les ajustaremos cuentas. Vino el 94, Cardenas fue de nuevo candidato a la presidencia, y el discurso no cambio en lo esencial. Los asesores como lo ha evidenciado Adolfo Aguilar Zinser se esforzaban en que el discurso de Cuauhtemoc se ladeara hacia el centro del espectro politico, el mismo Cardenas hacia esfuerzos en ese sentido, pero algo sencillamente no cuajaba. La percepcion de la gente comun y de parte de la opinion pub lica fue que el discurso cardenista, cuando se movia hacia el centro, era falso, impostado. Y teniendo como telon de fondo el mas accidentado, tragico, confuso y peligroso curso de una campana priista a la Presidencia, el PRD y Cuauhtemoc fueron relegados a un poco honroso tercer lugar por un electorado que, en apariencia, no les perdono ni sus abiertos coqueteos con el milenarismo de los encapuchados, ni su falta de solidaridad humana ante el asesinato de Colosio, entre otras cosas. El gobierno de Zedillo, plenamente legitimo desde el punto de vista de las condiciones y los resultados electorales, le ofrece al PRD un nuevo trato, a partir de una vision que reconoce los excesos del poder en su relacion con ese partido (ni los veo ni los oigo), reconoce abiertamente la trascendencia de la actividad y la presencia del PRD en la escena politica nacional y, sobre todo, se propone incluirlo en la discusion y en la decision de lo que debe cambiar en el pais; en la perspectiva de una amplia, omniabarcante reforma de l Estado. Titubeante, como si estuviera cometiendo una falta de leso revolucionarismo, el PRD se acerca a la negociacion. Pero lo hace con tantos condicionamientos internos, tan tensionado, que cualquier cosa puede ser pretexto para romper el acuerdo. El pretexto lo da la imposibilidad gubernamental de cumplir una concertacesion por la cual Roberto Madrazo dejaria el gobierno de Tabasco l .