SECCION: INFORMACION GENERAL PAGINA: 14 CABEZA: La investigacion clinica y el vulnerable progreso CREDITO: BENJAMIN DOMINGUEZ TREJO Primera de dos partes Leer la revista de la UNAM (abril, 1995), dedicada al tema del cerebro humano, tener la fortuna de escuchar directamente a investigadores como el doctor Augusto Fernandez Guardiola, en un pais donde los presupuestos destinados a la investigacion cientifica son en el mejor de los casos 10 veces menos que en los paises desarrollados, es realmente en estas epocas una fortuna o un privilegio. Para quienes nos ubicamos profesionalmente en el campo del estudio del comportamiento humano, el tipo de conocimiento es pecializado que producen en sus laboratorios estos investigadores posee un incuestionable valor: sabemos que el conocimiento intimo del funcionamiento electrico y quimico del cerebro tarde o temprano se traduce en una elevacion en nuestra capacidad para solucionar problemas de la convivencia. Esta certeza, por desgracia no ocupa el mismo nivel de importancia para los industriales, para los politicos y quiza incluso para algunos universitarios. Para algunos de estos grupos productivos, responsables de import antes decisiones financieras, la sola idea de producir conocimientos especializados es considerada como trivial. Muchos esfuerzos deben iniciarse para superar este estado de cosas. Entre otras cosas, porque para hacer investigacion en neurociencias se requieren amplios recursos economicos. En este sentido la posibilidad real de que algunos de los cientos de talentosos y entusiastas estudiantes universitarios que se han entusiasmado con algun dia realizar sus propias investigaciones de laboratorio estan prac ticamente reducidas a su minima expresion. Seguir alentando el entusiasmo de las generaciones actuales en la investigacion basica de laboratorio (ignorando los elevados costos) es tanto como prepararse para piloto y no tener avion. En consecuencia la crisis economica que nos aqueja, ha modificado tambien las expectativas sobre nuestros planes de desarrollo cientifico a largo plazo en el campo de la produccion de conocimientos sobre el comportamiento humano. Por ejemplo, si en otras epocas para algunos especialistas en este campo era viable pensar en la posibilidad de instalar un laboratorio para el estudio de procesos psicologicos basicos, hoy dia, este tipo de planes tiene que ser reubicado quiza en el ultimo lugar de las posibilidad es accesibles en esta especialidad. Por ejemplo, el costo actual para la instalacion de un equipo para un laboratorio de investigacion en neurociencias se ubica desde los 40 mil dolares (Comunicacion Personal, Jacobo Grinberg, 1994). Bajo estas condiciones es necesario reorientar los planes de desarrollo cientifico de estos campos hacia la riqueza de la tradicion en la investigacion clinica. De acuerdo con Michael Foucault, este campo existia desde mucho antes de terminar el siglo XVIII, "los conocimientos que ahi se generaban se repartian entre grupos privilegiados y fue en los hospitales militares donde la ensenanza clinica se organizo por primera vez". A nivel internacional la ubicacion historica y contemporanea de la investigacion c linica no solo se ha legitimado en el campo de la produccion de conocimientos especializados sobre el comportamiento humano, sino que ha jugado un papel promotor en la renovacion e innovacion de los conocimientos en nuestro pais. De acuerdo con Martinez-Palomo (La Jornada, 13 de febrero de 1995) "El cambio que permitio producir ciencia y no vivir solo de la ciencia importada (en lo que respecta a la medicina mexicana) partio de los hospitales y de ahi se reflejo a la ensenaza", es decir, e l paso de una etapa de divulgacion artesanal del conocimiento a la produccion de nuevos conocimientos gravito para la medicina mexicana en: el conocimiento y observacion directa de los padecimientos, dentro de una modalidad particular de relacion terapeutica, entre un especialista y un usuario, motivado todo ello por la busqueda de modalidades de alivio del sufrimiento; indicadores todos que corresponden al modelo de la investigacion clinica tanto en las disciplinas medicas como en las psicologicas. Muchos especialistas medicos talentosos aportaron en ese contexto sus esfuerzos. La promocion del metodo cientifico que atrajo a esos escenarios hospitalarios clinicos a brillantes profesionales (en el caso de nuestro pais) genero a partir de eso las bases para la creacion de los institutos de investigacion que han contribuido al prestigio internacional de nuestro pais en el campo de la investigacion clinica. * Del Centro de Servicios Psicologicos, Facultad de Psicologia, UNAM y Centro Nacional para el Estudio y Tratamiento del Dolor, SSA. .