SECCION: INTERNACIONAL PAGINA: 28 BALAZO: COORDENADAS CABEZA: Rusia y Occidente CREDITO: EDIT ANTAL "Occidente, al que Rusia fascina en la misma medida en que le da miedo, siempre se mostrara dispuesto a echarle una mano, aunque solo sea por su propia tranquilidad. Occidente dara la espalda a otros, pero nunca dejara de ayudar a Rusia" -resume de una manera concisa Kapuscinski en su libro El imperio, lo que puede ser el punto de partida para entender la extrana relacion entre un ex imperio rival, todavia viciado, y otro con complejos y problemas acerca de su lugar en el mundo. En la cumbre entre los presidentes Yeltsin y Clinton, en un ambiente de divergencias sin dramatismos, no ha pasado gran cosa en terminos historicos. Solo se han resuelto un par de asuntos que tan solo tienen importancia en el contexto politico interno y a corto plazo, casi electoral, para ambos paises. Asi, para Rusia, el hecho de que Clinton, y en general Occidente, cierre los ojos ante su penosa actuacion imperial en Chechenia, equivale a un favor a cambio de aceptar la reconsideracion de la venta de material para enriquecimiento de uranio a Iran. Ambos logros son utiles para los respectivos presidentes, en el marco de su disputa con la elite politica de su pais, en cierto sentido para satisfacer su oposicion conservadora interna: por un lado a los sectores militares rusos mas duros y por el otro a los congresistas republicanos conservadores. La implementacion del desarme a gran escala, tan anunciado hace un par de anos, trae consigo serios problemas en el interior de ambas superpotencias del pasado. Asi como al complejo industrial-militar ruso no le conviene la conversion de la industria militar en civil, y ello ademas requiere una justificacion palpable, tampoco es facil para Estados Unidos la disminucion de su industria militar. Las consecuencias de ello ya se han visto, por ejemplo en California, estado afectado por la crisis economica, el d esempleo, los problemas sociales, la violencia y el racismo. En Rusia tampoco es sencillo el desmantelamiento o la conversion del sector militar, puesto que ello se encuentra relacionado y tiene influencia en el 80 por ciento de la economia. Todavia diez anos despues de la perestroika, elementos esenciales de la estructura de una potencia militarizada no han podido ser cambiados. Segun Kapuscinski, quien hace un recuento de lo que queda todavia de la antigua URSS, es harto dificil, complejo y tardado cambiar las estructuras y las mentalidades cuando se trata de un imperio. Entre otros, menciona los siguientes datos para ilustrar la falta de cambios: la vieja nomenclatura que continua en el poder, se trata de una burocracia que domina la administracion del Estado, la economia, el ejercito y la policia. En total unos 18 millones de personas. Quedan dos ejercitos inmensos: el ruso, que antes llevaba el nombre de Rojo, y la policia militar; tambien estan los ejercitos de las fronteras y de los ferrocarriles. La aviacion y la marina de guerra. En todos estos cuerpos, en total, se encuentran unos cuantos millones de hombres. Quedan el poderoso KGB y la policia. Continua en manos del Estado la industria pesada y la mediana, incluido en ella el imponente complejo militar-industrial. La fabricacion de armas emplea a unos 16 millones de personas entre fabricas e institutos de investigacion. Apa rte del volumen de estos cuerpos, es importante senalar que los directivos de este sector desempenan un papel muy activo e importante en la vida politica del pais: basicamente constituyen el sector politico de los militares, cuya influencia en la politica nacional esta adquiriendo un peso cada vez mayor. Rusia, en la actual cumbre, ha manifestado, sin dejar dudas, que no va a respetar el Acuerdo de Reduccion de Armas Convencionales. Ello, por las razones arriba explicadas. En Estados Unidos, a la hora de discutir, y finalmente rechazar, la ley sobre la criminalidad propuesta por Clinton, los congresistas, bajo la influencia de las grandes corporaciones productoras de armamentos, en realidad han apelado a argumentos parecidos a los de los militares duros en Rusia. En los discursos pronunciados en la celebracion del 50 aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, los militares rusos dejaron muy en claro que es importante seguir armandose, porque los conflictos en su area de influencia lo justifican. De manera parecida, los sectores conservadores del congreso norteamericano, apelando a la Constitucion de su pais, que garantiza el derecho a portar armas a todos los ciudadanos, se manifiestan opuestos a limitar la circulacion libre de armas dentro del pais. El otro asunto central, el de la OTAN, tampoco ha registrado mayor avance en la cumbre. Los intereses de seguridad, y en particular la diferente interpretacion de estos en Rusia y en Estados Unidos, todavia no permiten un mayor acercamiento, e incluso en ocasiones llegan a tocar un tono que recuerda a los tiempos de la guerra fria. .