PAG. 20 SECCION: CIUDAD CINTILLO: CHILANGUERIAS CREDITO: Javier Gonzalez Batta* CABEZA: Ay, calor, ya me volviste a asar Ay, calor, ya me volviste a asar, se iba diciendo Derretido Perez. Y reflexionaba: si, ya se que a los tapachultecos, choapenos y mexicalenses el calor de 30 grados de la ciudad de Mexico les viene holgado, y que los calienta mas una mentada. Pero lo que es a mi, me derrite. Derretido, que en su nombre lleva la fama, se hace como charamusca al transcurso del dia y la noche, ante los calores que lo tienen al punto del desvario. Anda este como si oyera vocecitas en sus adentros, introspectivo, sintiendo los hilitos de sudor sobre las partes planas de su cuerpo y como se le van formando unas esponjas en las axilas y mojandosele la ropa interior. Para su mujer, tambien de tierra caliente, Derretido es un exagerado. Y por no dar su brazo a torcer, le dice que sus calores son bochornos menopausicos, no del mismo tipo que los de el. Y para medio controlarlos recurre ella a un te curativo y a los banos de asiento con agua templada, para los cuales su marido no tiene tiempo. Tampoco en su trabajo lo favorece la situacion en ese sentido. Y aunque nadie le diga nada, siente el reproche, solo con la vista, que le hacen sus jefes cuando decide vestir de guayabera mas por frescura que por echeverrista o con camisa de manga corta y sin corbata. Asi, presionado que resulta, debe de someterse a la tortura que le impone la sociedad, no por modernizada exenta de convencionalismos. Derretido sufre tambien calores dentro de su automovil sin aire acondicionado, en las micros o autobuses y, lo peor, en el Metro, que bastante hace con llevarlo y traerlo de un extremo a otro de la ciudad por solo 40 centavos. Los taxis, por ahora, son prohibitivos. Su boca es tenaz en la busqueda de las bebidas heladas. Toma agua sola al son de la diabetes, aguas frescas de todos los sabores, refrescos envasados ni los cuenta y cervezas, cubas y jaiboles son de requetepasion para el. Cafe concentrado es lo unico liquido que toma caliente. Las sopas ni las voltea a ver y ni a su mujer le hace caso cuando lo recibe con frases insinuantes como la de: "Viejo, ¨cenas frio o te caliento?" Por cierto que para evitar escenas que rompan con el encanto de los dulces suenos de la enemiga, por aquello de que luego se corre la sabana y la pudibundez junto con ella, Derretido recien se compro un pijama, manga corta y pantaloncitos a la rodilla, "algodon 100%" dice la etiqueta y, siente que en lo que va del ano, no ha tenido mejor adquisicion por lo feliz y oreado que duerme. Mas que observador al pie de la letra, Derretido Perez es un vicioso de: "te vas por la sombrita". Asi, si tiene que ir de Palacio Nacional a Madero, prefiere caminar tres cuadras por abajo de los portales en lugar de una atravesando el Zocalo, maxime si la canicula cae a plomo. Lo raro en el es que siendo alergico al calor haya dado autorizacion para que el dia que muera, lo incineren, sin temor a catalepsias o a los tan comunes equivocos medicos. Y quiza, creyente catolico que resulta, desea irse aclimatando al Mas Alla, supuestamente que la region a la que a el le corresponda sera la mas caliente. Entonces, sin duda, Derretido se derretira. * Periodista .