SECCION ESPECTACULOS PAG. 46
BALAZO: LA TIENDITA DE LOS HORRORES

Animales benditos, al matadero
En Dover, Inglaterra, los animales ya cuentan para su defensa no solo con las sociedades protectoras, sino tambien con la Iglesia, como lo demuestra el caso del obispo local Richard Lewllin. Encabezando una manifestacion de 150 personas que protestaban contra la exportacion de terneros y ovejas vivos enviados al matadero en Francia, el obispo invoco la proteccion de Dios sobre los animales "condenados a inutiles sufrimientos durante el viaje hacia la muerte". Desde hace meses en Inglaterra tienen lugar m
anifestaciones contra este comercio considerado inhumano; miles de personas sitian los puertos del Canal de la Mancha y el aeropuerto de Coventry, desde donde parten los convoyes llenos de animales. Los protestantes no logran frenar el sacrificio de los animales, pero al menos los religiosos se aseguran que se vayan al otro mundo con una flamante bendicion. Lo que no pudieron evitar fue la muerte de un joven que infructuosamente intento detener uno de los camiones en el que los animales eran transportados a
l cadalso.

Suicida asesinado
La policia de San Francisco logro evitar que un hombre se suicidara en el puente Golden Gate, pero a la vez se encargo de ahorrarle el esfuerzo al acribillarlo. El episodio provoco el cierre del famoso puente durante unas horas, meta preferida de quienes buscan poner fin a sus vidas. Resulta que el suicida fue visto por algunos automovilistas cuando estaba sobre un parapeto del puente. Los policias que llegaron al lugar requirieron la presencia de psicologos especializados, pero nada pudieron hacer para 
que bajara del parapeto. "En determinado momento explico un portavoz de la policia el hombre hizo un movimiento rapido con la mano y extrajo un objeto que tenia el aspecto de una pistola". La reaccion de los policias fue inmediata y el hombre cayo alcanzado por varios proyectiles. A pesar de que fue conducido al hospital general de San Francisco, el fallido suicida moria tiempo despues. Lo que la policia no informo fue si el objeto que extrajo el hombre era efectivamente una pistola, o su walkman, o su ag
enda electronica, o su rasuradora, o su radio...

Muerte a ritmo de musica country
Despues de 20 anos de haber aplazado su cita con la muerte, finalmente a Duncan McKenzie no le quedo otra que irse al otro mundo. Como ultima voluntad, el sentenciado pidio ir acompanado en el viaje por su musica favorita. Asi, mientras una inyeccion letal se iba llevando su vida, escuchaba en el cantante de country Marty Robins en sus auriculares. McKenzie dijo al gobernador de Montana que sentia mucho lo que le habia ocurrido hace mas de 20 anos a la maestra Lana Harding, pero que no podia pedir perdon
 por un crimen que no habia cometido. En esos anos la muchacha habia sido secuestrada en su miniescuela una sola habitacion con solo cinco alumnos en las montanas de Montana, y su cuerpo fue encontrado un dia despues en un campo nevado con el craneo destrozado. La policia establecio entonces que habia sido violada, golpeada y sofocada hasta la muerte con una cuerda que estaba todavia colocada alrededor del cuello. McKenzie fue arrestado al dia siguiente del hallazgo del cuerpo, sus guantes ensangrentados 
habian sido hallados cerca del cadaver y en el vehiculo del hombre se encontraron trazas de sangre y fragmentos del cerebro de la mujer, asi como fibras identicas a las de una camiseta que llevaba la victima. Con ese cumulo de indicios y no obstante sus protestas de inocencia, McKenzie fue condenado a muerte. El condenado podia elegir entre ser ejecutado en la horca o por medio de una inyeccion, y opto por este ultimo medio. Una vez fracasado su ultimo recurso de revocacion de la sentencia, McKenzie pidio m
orir mientras escuchaba su musica favorita, solicitud que le fue cumplida. Ahora quien seguramente no puede dormir es el pobre cantante de country, pensando en que una persona se moria mientras escuchaba su musica.
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