SECCION ESPECTACULOS PAGINA 38 BALAZO: ¨ADIOS A LA CULTURA POP? CABEZA: La nostalgia asesina I La supercarretera hacia la nada. A la orilla el cementerio de automoviles.. Jose Emilio Pacheco: "Posmodernidad" CREDITO: JESUS QUINTERO Uno de los lugares mas sobados para referirse a la musica de caracter juvenil (valga el termino poco afortunado) es declarar al rock como una entidad ya muerta o moribunda desde hace por lo menos dos decadas. Afirmacion temeraria que se sustenta evidentemente en el consabido "todo tiempo pasado fue mejor" y en que la rebeldia y el nulo temor al anacronismo eran entonces los estandartes de los ahora suscriptores de esquelas funerarias. Sin embargo, una de las virtudes que ha ostentado el rock en su breve exi stencia (poco mas de cuatro decadas) es la de ser cinicamente proteico. Partiendo de un perimetro instrumental que va de las meras voces como instrumento privilegiado a los sintetizadores y los sistemas MIDI, y que contiene una vasta exploracion a la guitarra electrica o lo mismo incorpora orquestas sinfonicas o meras percusiones, el rock sigue siendo un genero vivo, aunque para ello adopte material que parezca muy ajeno a su iconografia oficial; Carole King, The Orb, Gang of Four y Sonic Youth nada tiene e n comun, pero conviven en esa misma esfera sin mayor dificultad. Mas los melomanos con vocacion de sepultureros estan cerca de algo mas evidente e irrefutable: la muerte de la cultura pop. Para muchos treintaneros y cuarentaneros la cultura pop a veces hasta de manera inconsciente definio muchos elementos de su existencia. Aglutinado de hedonismo e idealizacion que estaba presente en varios aspectos de la vida, fue tan relevante, o mas, que la religion, la identidad nacional o la clase social; era la piedra de toque, la significacion de lo que era ser joven en el mundo occidental despues de la Segunda Guerra Mundial. De la mano con cada generacion, la cultura pop orientaba el modo de pensar, de vestir, lo que habia que leer, como habia que seducir, con cuales prototipos habia que intentarlo, que hacer en la cama. Adversa a los dictados familiares, abogaba por el "yo", que en las prohibiciones se tornaba "nosotros". Las premisas de moralidad y buenas maneras no habian tenido mayor rival, se descubria que podia accederse a varios placeres sin necesidad de firmar contratos sociales. Los enemigos a vencer eran la intoleranc ia, la injusticia y las instituciones marciales. Sin embargo, lo que ahora se ofrece parece refrendar el fin de todo eso. Y si en algunos renglones no esta muriendo, esta mutando en algo mas viejo y domesticado; irreconocible como cultura pop: La nostalgia inmediata Se puede atribuir a nuestra naturaleza finisecular esa obsesion por revisar lo apenas abandonado y rememorar, a traves del reciclamiento, no el nucleo sino su cascara. Sin perspectiva al futuro, el nuevo dictado de la moda es calificar al pasado mediato como una entidad mas amable y habitable con tal que se pueda vender a un buen precio. Durante la decada de los ochenta abundaron los vistazos "retro" a los cincuenta, a la era dorada. El rockabilly se volvio a imponer, pudiendose encontrar desde puristas (The Stray Cats, The ShakinPyramides y Matchbox), arribistas con poco talento y mas preocupados por sus cortes de pelo y su vestimenta (The Polecats), hasta obsesivos de Elvis Presley que rayaban en lo patetico (Shakin Stevens). Si ya algunos habian visto en James Dean un precedente bien discutible de las actitudes punk, no se tardaron e n canalizar ese prototipo y sumarlo con la galanura bohemia de Chet Baker para crear dos productos pasteurizados inscritos en la balada rock (Chris Isaak) y en el jazz para la camada yuppie (Harry Connick Jr.). La publicidad no pudo sustraerse al llamado. En Inglaterra y Estados Unidos, durante los ochenta, eran comunes los anuncios de jeans con clasicos de soul o de rock and roll. En la presente, se ha echado mano no solo de los sesenta sino de los setenta y, ya en el colmo de paraisos efimeros, hasta de los ochenta. Desde siempre, las tendencias musicales han encontrado su mejor espejo en los anuncios comerciales. A principios de esta decada, una cancion pacifista de John Lennon, "Instant Karma", fue utilizada e n Inglaterra para vender tenis Nike; otra mas de el, "Beautiful Boy", se empleo en Japon como fondo musical para ofrecer un champu. Levis, siempre presente, empleo durante una campana canciones de Bad Company, T. Rex y The Clash. En Estados Unidos, The Go-Gos se reunieron en 1992 solo para anunciar, al compas de "We Got the Beat Oh musa inepta, animame! Dentro de esa nostalgia por decadas pasadas, se han abierto los huecos para los imitadores, disfrazados de tributarios. Si en Mexico, imitar a Luis Miguel puede significar una demanda por parte de el, en Inglaterra es un lucrativo negocio que incluso resulta benefico para las casas disqueras, que se ven alentadas a recircular viejas grabaciones con la certeza de que seran, en breve, material codiciable. Bj”rn Again es un cuarteto que parodia a ABBA, cuidando hasta el menor detalle. El ano pasado aparecio una caja retrospectiva del grupo sueco, con cuatro discos compactos, y sus ventas han sido mas que decentes. Nadie los ha olvidado. Lo mismo ocurre con The Doors, que en ventas de grabaciones siguen siendo una presencia permanente en Mexico (fiesta de veinteaneros donde falte "Roadhouse Blues" es mal vista); en el Reino Unido esta The Australian Doors y en Estados Unidos existe Soft Parade, con un cantante muy parecido fisicamente al por muchos llorado Rey Lagarto, mas a falta de alguien semejante a Robbie Krieger, tienen que echar mano de un guitarrista que toca oculto tras los amplificadores. Todo sea por hacer sonar a la audiencia. Un quinteto ingles, Denim, con botas de enorme plataforma y ropa banada en lentejuelas, interpreta versiones de los Osmonds Brothers y de la Glitter Band. Con nostalgia por el maquillaje y la parafernalia escenica que los situo en un primer plano, Strutter, banda origina ria de Cleveland, rinde tributo a Kiss usando tambores Pearl y guitarras Gibson, "porque ellos quieren lo mejor". Tampoco podia faltar un homenaje a The Jam a cargo de un trio bautizado English Rose, y uno mas a Elton John, bautizado Fantastic, quien tiene un grupo de soporte bastante competente y cuenta, ademas, con un piano hidraulico que despide humo y luces estroboscopicas. En Mexico es ya una presencia casi constitucional el Liverpool Ensemble Orchestra, o algo parecido, que rinde tributo ¨a quien cree el lector y lectora? Curiosamente, ni el punk se ha salvado de la resurreccion; aunque en este genero no se dan tanto los imitadores sino los viejos protagonistas que regresan a buscar un reconocimiento que no pocas ocasiones tiene caracteristicas de ultratumba. Asi, en anos recientes volvieron, en espacios como el festival denominado F**k Reading, PunkaBilly all Dayer, grupos como The Exploited, Chelsea, UK Subs y 999. Dee Dee Ramone, ex bajista de Ramones, opta por la sinceridad y bautiza a su gira com o "Tribute to Nothing". Entre los que volvieron, y son legion, hay que mencionar a Ian Dury & The Blockheads, Stiff Little Fingers con Bruce Foxton, ex bajista de The Jam, y Television, seminal cuarteto del punk neoyorquino, que luego de 14 anos entrego un excelso disco homonimo que paso inadvertido a un publico que estaba demasiado ocupado viendo hacia atras. Las listas de popularidad son tambien reflejo de esa muerte por nostalgia. No resulta extrano que muchas figuras de la musica disco, sepultadas por la primera oleada punk, siguieran vivas en el recuerdo de quienes ascendieron a la antesala del altar, sabiendo que "fiebre" era un termino mas amplio de lo que habia maullado Peggy Lee en 1958. A punto de cerrar el siglo, vuelven al Top-50 nombres como Bee Gees, Barry White, Tom Jones, Frank Sinatra, Tony Bennett, Robert Plant y Jimmy Page, Queen, Abba, Duran Duran, Cliff Richard, Elvis Presley, The Carpenters, Brenda Lee, y Meat Loaf, que con su serie Bat Out of Hell consiguio quitar las telaranas al grabado en 1977, para colocar a ese en el treceavo sitio, en tanto que el segundo, de 1994, se hallaba en el tercer puesto de mayores ventas en Inglaterra. Lejanos al mainstream, retornaron tambien Emerson, Lake & Palmer y Faust. (El cine, como depositario de una pista sonora que podra ser tan memorable, o mas que el mismo argumento, es otra herramienta para reactivar la reminiscencia. A vuelapluma se pueden mencionar: Good Fellas [Buenos muchachos], The Doors, Mermaids [Mi mama es una sirena], Dazed and Confused, Forrest Gump, Reservoir Dogs [Perros de reserva], Pulp Fiction [Tiempos violentos] y Backbeat [El inicio de los Beatles], pero semejante terreno exigiria un ensayo aparte.) En algo semejante a una miscelanea no se pueden desdenar: la reedicion de ocho discos de los Rolling Stones, con sus portadas iniciales en cuanto lo permite el tamano de los discos compactos; Nirvana interpreto una pieza del mismisimo David Bowie ("The Man Who Sold the World") en Unplugged in New York; Erasure homenajeo a Abba; Michael Bolton quedo convencido de que su version de "When a Man Loves a Woman" es superior a la de Percy Sledge; GunsnRoses se animo a reciclar, sin mucha fortuna, viejas c anciones punk en The Spaghetti Incident; Lenny Kravitz saldo su deuda con Jimi Hendrix, y no falto quien lo considerara original; la moda acustica de Unplugged ha reanimado material y figuras desconocidas para los recien llegados (Eric Clapton, Neil Young, Page & Plant y Rod Stewart); Jeff Buckley revive la leyenda de su padre, Tim, quien murio a los 28 anos sin haber tenido jamas algun disco entre los primeros 40 lugares; las cajas antologicas evitan la dispersion discografica y abogan por la comodidad sentimental que revive en un solo paquete a The Beach Boys, The Who, Presley, Dave Clark Five, el festival de Monterey y a Janis Joplin. Las grabaciones de The Beatles en la BBC significaron una de las mayores ventas de 1994. Otro aspecto insoslayable de ese revival es el de los discos de tributo, que muestran cuan ausentes estan las ideas nuevas y cuan "abiertos" son algunos grupos para citar como influencias a otros de los que pareceria natural su abominacion. Sin animo de marear a quien esto lea, va una pequena relacion de tan comoda prueba de anemia creativa. Se menciona al homenajeado, el titulo y a uno o dos de los deudores: Jimi Hendrix, Stone Free (Eric Clapton, Body Count). The Carpenters, If I Were a Carpenter (Sonic Youth, Shonen Knife). Kiss, Hard to Believe (The Melvins, Nirvana) y Kiss My Ass (Garth Brooks). Buddy Holly, The Buddy Holly Songbook (Blondie, Leo Sayer [!]). Victoria Williams, Sweet Relief (Lou Reed, Soul Asylum). Leonard Cohen, I Am Your Man (R.E.M., John Cale). Johny Thunders, I Only Wrote This Song For You (Chrissie Hynde, Ramones). Paul Simon, The Paul Simon Songbook (The Bangles, Peaches & Herb). The Plimsouls, Its Just a Mat ter of Time! (The Sick Rose, Chopper). Peliculas de Walt Disney, Stay Awake (Tom Waits, NRBQ). Richard Thompson, Beat the Retreat (Dinosaur Jr., Los Lobos). George Gershwin, The Glory of Gershwin (Kate Bush, Peter Gabriel). The Beatles, Downtown Does The Beatles (Alex Chilton, Defunkt). Van Morrison, No Prima Donna (Elvis Costello, Marianne Faithfull). The Buzzcocks, Somethings Gone Wrong Again (Lunachicks, Alice Donut). Dead Kennedys, Virus 100 (Faith No More, Sepultura). Donovan, Donovan Compilation (Young Flesh Fellows, The Posies). The Monkees, Here no Evil (Mitch Easter, Peter Holsaple, ambos cercanisimos a R.E.M.). Semejante relacion comprende casi todos los generos (aunque el rock progresivo parece el que menos tributarios reclama), y otros homenajeados han sido: Alice Cooper, Gram Parsons, Ramones, Curtis Mayfield, Yellow Magic Orchestra, Nick Drake, Lynyrd Skynyrd, Merle Haggard, Black Sabbath, Neil Young y Shonen Knife, por solo mencionar algunos. En anos recientes, los festivales como Lollapalooza, en Estados Unidos, y Glastonbury, en Inglaterra, han venido a ser las salvaciones frente a conciertos poco atendidos, constituyendose como zonas de tolerancia que los baby-boomers solo conocian de oidas y que por la naturaleza individualista con la que se asiste sin animo de crear una nacion hippie, excluye todo peligro de adquirir el calificativo de horda. Sin poder sustraerse a ello, la nostalgia teledirigida jugo su carta mayor el ano p asado. Woodstock II como pago por evento, video, disco laser, libro y disco compacto dejo ver que la reminiscencia pertenece meramente al reino de lo efimero y su consecuencia no es mas que una cruda de la que urgira aliviarse, acaso instalandose en un presente que musicalmente ofrece el punk desintoxicado de Green Day. El jugar al pasado es una moda que exige tecnologia contemporanea y la conviccion de que se tiene que asisitir a traves de Ticket Master a la creacion de la historia, pues el cach e por el preterito no es valido si esta exento de realidad virtual, si no hay fotografos de prensa atentos a los primeros torsos femeninos desnudos. Asi no se vale. Por eso, un pretendido festival que se iba a celebrar en Bethel, con la presencia de varios de los que participaron en la primera edicion de Woodstock (Richie Havens, John Sebastian y Melanie) tuvo que ser cancelado, pues no vendio ni el boletaje suficiente para pagar el alquiler del terreno. Todo ese mirar al pasado no hace del pop sino una vida suplementaria, circunscrita meramente a un dictado sentimental. La nostalgia, en este caso, es ejemplo de lo limitadas que estan las ideas en materia de composicion y temas. Quiza se deba a lo fragmentario del mercado a la multiplicidad de etiquetas que cada semana se ve engrosada por aquellos ociosos que se dedican a convertir una especie en genero que no existe en la actualidad ningun heroe sonoro-ideologico. No hay un Presley, un Lennon, un Dylan, un Johny Rotten. Kurt Cobain murio demasiado pronto, y mucha de la tinta que se derramo era para referirse a el, no tanto para darle voz a lo que decia. La cultura pop se forma, o deberia integrarse, no en las juntas de ejecutivos sino en las masas adolescentes. Pero estas y no es su culpa muy lejos estan ya de abrazar el hedonismo y el idealismo, han olvidado como ser jovenes. ¨Sexo, drogas y rock and roll? Mmhh... Muy peligroso, muy caras y muy viejo. Lo que ayer fue cultura pop, es hoy un simple entretenimiento con un insoportable olor a naftalina. .