SECCION: CULTURA PAG. 32 CABEZA: EL PROBLEMA CON FUENTES CREDITO: RICARDO PHOLENZ El problema con Fuentes es que no se puede ser imparcial con el. Lo que es peor, nadie esta muy seguro de querer serlo. Con eso tiene las de ganar, el tipo es lo suficientemente carismatico como para todo ataque, defensa, elogio o vituperio se le lance apasionadamente, los vitores y rechiflas que se le dan son viscerales. Si hubiera, por ejemplo, el menor asomo de indiferencia, supongo que no estaria escribiendo esto, es mas, aun en estos momentos me pregunto por que lo estoy haciendo si mejor dejar lo pasar, como las imagenes sucesivas en un cinemascopio accionado a distancia cuando no hay nada en la television y en el noticiario Fuentes es el mas nuevo de los Premios Principe de Asturias y no solo eso, sino tambien ha ido a formar parte del recien instaurado panteon del Premio Internacional Grizane Cavour que comparte con Julien Green, Gnter Grass y Czeslaw Milosz. Ver a Fuentes, o ni eso, imaginarlo con ese gesto oblicuo, la sonrisa defensiva y esa distancia cordial de dandy colonial me recuerda a la primera vez que me tope con su Region mas transparente editada por Gallimard y no pude mas que preguntarme que podrian ver los franceses en ese destilado castizo de Dos Passos, que segun algunos, no puede ser entendido cabalmente mas que por capitalinos. Pero, špor cuales capitalinos? šLos de hace 30 anos? En esto de las versiones y aversiones, algun amigo austriaco se ha visto sorprendido de que se pueda leer a Thomas Berhardt en espanol, y bueno, a pesar del prestigio de Miguel Saenz, uno tiene todo el derecho de dudar de sus traducciones y de igual modo, estar seguro de que Fuentes solo se puede leer en espanol, y ya si se tiene algun afan bromista, en ingles. Pero me estoy desviando y mi tema no son los vericuetos, traiciones y carencias de la traduccion sino Fuentes, y en especifico, el problema de Fuentes, que acaba por ser, para uno que gusta de las paradojas, su mayor virtud. Y es que uno no puede dejar de pensar en su figura, para no decir su voz, cuando abre uno de sus libros y lee, se res iente el sonsonete y en libros tan decepcionantes como El naranjo, uno dice ya basta de proselitismos milenarios respecto a la raza y a lo mexicano, cuando uno lo disfruta mas como artifice de short stories tan anglosajonas, tan en su elemento, con sus prestamos, sus trastocaciones, su gracia para la burla y lo grotesco, con Goya y Velazquez ribeteando un fondo de piedras sedimentadas en el museo de antropologia. šNegar que Fuentes es un gran escritor? Nunca. Se da como presupuesto para poder hablar de el, atacarlo con o sin fundamento tiene ese apriori, por un lado para nuestra tan arraigada mania de rascarle el barro a los idolos, por otro y con la idea de ser objetivo (cosa tan dificil) encontrarle las imperfecciones que lo hacen resplandecer de ese modo, de mediar entre obra y figura (aunque parezcan indivisibles), labor tan ardua y ambiciosa como podria serlo cualquiera de los ladrillos monumentales que nos ha heredado Fuentes, ladrillos de tradicion y temporalidad que en su ansia por abarc arlo todo y volcarlo hacia lo mexicano, ha acabado por ser profetico. No le cabe mas que los grandes alientos, para la gesta y el destino colectivo, creador de arquetipos ixcacienfueginos mas que de personajes, el mismo se ha convertido en un arquetipo, listo para el sacrificio y la antropologia. .