SECCION CULTURA PAG. 37 CREDITO: CABEZA: traves de los valores occidentales. Es tiempo de tratar de entender al otro, y lo que puede ofrecernos. El famoso relato hindu nos narra que una caravana de elefantes iba a atravesar un pueblo de ciegos, donde ninguno de ellos habia oido hablar de ese animal. Al enterarse, le pidieron al guia que les permitiera tocar a un elefante, para poder entender como era. Asi fue. Un grupo de invidentes toco cada uno una parte diferente del animal. Alguno toco un colmillo, otro la trompa, uno mas una pata, el de alla, la oreja, otro mas el cuerpo. Al alejarse la caravana, quisieron conjugar sus experiencias para definir al elefante y les resulto imposible. Dice el relato: "Tenian razon en lo que afirmaban, pero estaban equivocados en lo que negaban". Esta frase final, aplicada a la soberbia intelectual de Occidente, me parece muy reveladora. Los descubrimientos cientificos que hemos hecho son mensurables y comprobables, pero no podemos a traves de ellos negar la existencia de fenomenos que no se adaptan a los moldes de la razon. En terminos de la filosofia occidental, el conflicto parte de la distancia entre Heraclito y Parmenides, entre el Pienso, luego existo de Descartes y la dialectica hegeliana. Para Oriente no se trata de alcanzar la verdad como un concepto, sino de fluir conforme a la dinamica del Universo. Para ayudarnos a tender un puente hacia las filosofias orientales, Oriente y Occidente, de Luis Racionero, nos describe al hinduismo, al taoismo y al zen, como las tres principales ramas del pensamiento oriental. El hinduismo, como sabemos, parte del concepto de la reencarnacion y cree en el yoga como via de perfeccionamiento espiritual; el taoismo reconoce la importancia de la integracion y la armonia con la naturaleza; y el zen, a traves de una estricta disciplina se propone alejar al individuo de la ilus ion y centrarlo en el aqui y ahora, el instante presente. Para Occidente es dificil entender sistemas filosoficos que no pretenden alcanzar la verdad, ni les interesa la logica, y donde el progreso individual esta subordinado al crecimiento espiritual. Tambien le cuesta entender la falta de individualismo oriental, que inhibe las posibilidades de desarrollo de las personas, y que hace mas dificil el progreso tanto a nivel particular como social, nocion esta ultima tambien incomprensible para los orientales, por el caracter ciclico de su concepcion del mundo. Para Oriente es dificil entender el profundo individualismo egolatra de los occidentales y su lucha por conquistar el mundo. Asi, por ejemplo, Racionero nos cuenta que la afirmacion de Edmund Hillary de haber conquistado el Everest resulta incomprensible para la mentalidad oriental, que sabe que solo se puede alcanzar la cumbre con la ayuda de la montana. De hecho el yoga en la India, el wu-wei en China y el zen en Japon, son disciplinas destinadas a luchar contra el ego, que segun ellos altera la percepcio n de la realidad. Para Oriente es asimismo dificil entender el dualismo occidental todo lo que divide en bueno y lo malo, carne y espiritu, deseo y realidad, cuando para ellos el ying y el yang forman parte de un proceso que no es posible dividir en sus componentes. Quiza el punto de union entre Oriente y Occidente tenga que ver con el humanismo occidental en sus maximas expresiones: la serenidad griega y el humanismo renacentista. Occidente tiene que constrenir su individualismo exacerbado por medio de un humanismo etico que le permita percibir las innumerables resonancias entre todas las cosas y con los demas hombres. Oriente tiene que aprender a integrar la modernidad a sus tradiciones, sin perder su origen y su vision del mundo. No se necesita ser profeta para dars e cuenta que el proximo siglo estara marcado por un fertil encuentro entre Oriente y Occidente. Luis Racionero.- Oriente y Occidente.- Anagrama, coleccion Argumentos, Barcelona, 1993. .