SECCION: ESPECTACULOS PAG. 39 CINTILLO: HOMENAJE NACIONAL CABEZA: El cine urbano de Alejandro Galindo CREDITO: ALEJANDRO CARDENAS En toda la historia del cine mexicano son contados los directores con una obra solida, capaces de ofrecer personajes creibles y reales, "uno de ellos es sin duda Alejandro Galindo", aseguro Mario Aguinaga. "Galindo hizo un verdadero analisis del mexicano en sus peliculas, fue mas alla del cine, con verdaderos estudios sociologicos de las multiples personalidades del ciudadano de los cincuenta", agrego. Mario Aguinaga, en representacion del Instituto Mexicano de Cinematografia (Imcine), hablo asi durante el ciclo homenaje a Alejandro Galindo que inicio ayer en la casa de la Cultura Jesus Reyes Heroles de Coyoacan con la ponencia El mexicano de los cincuenta en el cine de Alejandro Galindo. Galindo, al lado de Fernando de Fuentes, Emilio Indio Fernandez, Julio Bracho y Juan Bustillo Oro formaron parte de una camada de brillantes creadores, artifices de una fabrica de suenos de manufactura nacional. Con gran vivacidad y humor, a pesar de sus mas de ocho decadas de vida y de ser transportado en silla de ruedas, Alejandro Galindo escucho los comentarios que hicieron de su obra el dramaturgo Alejandro Licona, en representacion de la Sociedad General de Escritores de Mexico, y Mario Aguinaga, del Imcine. Aguinaga explico que don Alex, como lo llaman de carino, se reunio con un esplendido equipo de actores para crear una maravillosa galeria de personajes. "Fue un gran director de actores; un ejemplo es David Silva, quien no fue el mismo antes ni despues de trabajar con Galindo". Algunas de las cintas mas importantes con Silva que registra la memoria filmica son: Campeon sin corona, Esquina bajan, Hay un lugar para... dos y Espaldas mojadas..., cintas en las que se advierten personajes salidos del barrio, de los bajos fondos de una sociedad de los cincuenta con una moral constructiva. A traves de su vasta obra, dijo Aguinaga, Galindo demostro que ademas de ser un gran director fue un excelente argumentista; sus historias, mas que verosimiles, fueron un reflejo de la cotidianeidad de un pueblo que despertaba al cambio. Para senalar que con el cine de Alejandro Galindo la ciudad se volvio un personaje mas de sus peliculas. Con el los ambientes urbanos, sordidos y miserables se volvieron gratos a la vista no porque los haya transformado, sino porque escudrino en ellos y decodifico su esencia en un rollo de celuloide de 16 o 35 milimetros. Mario Aguinaga comento despues que "como pocos, Alejandro Galindo desmenuzo a la clase media y baja, a ellas se acerco y observo con una gran lente de aumento, para asi crear ambientes absolutamente verdaderos". Por su parte, el dramaturgo Alejandro Licona senalo que a lo largo de todos los fimes de este cineasta parece que existe un espejo "donde todos nos vemos reflejados y amplificados, nadie se escapa a su mirada". El cine es mejor que la vida, afirmo Licona, la fabrica de suenos es la evasion pura. "El cine, al igual que la vida, tiene muchos caminos, y Alejandro escogio el de retratar fiel y literalmente a un Mexico cambiante. Galindo trabajo en un cine de realidad, no en el cine de imagen como lo hiciera Emilio Indio Fernandez", asevero Licona. Para el dramaturgo, el mexicano de los cincuenta que retrato Galindo se parece en mucho al analizado por el filosofo Samuel Ramos y por Octavio Paz. "El gran perdedor, el que tiene complejos de inferioridad, al que le persigue la mala suerte como destino fausto e inevitable". A la generacion de Alejandro Galindo ya la juzgo el tiempo y salieron bien librados con el aplauso sincero del publico y no de un critico jilguerillo. Ellos, los grandes directores, construyeron una cinematografia. Los actuales, salvo algunas excepciones, no saben donde colocar el ladrillo para contribuir en algo a la deteriorada industria de los suenos, puntualizo Alejandro Licona. Para concluir este primer dia de homenaje se proyecto la cinta Campeon sin corona ante la mirada entusiasta de Alejandro Galindo, quien recordo al Kid Terranova interpretado por David Silva, en el primer personaje que abordo "al peladito" en forma ironica, como lo hiciera Cantinflas, a traves de un drama basado en la historia del gran boxeador Chango Casanova. Resulta evidente que existe una gran deuda del cine mexicano con Alejandro Galindo, y para saldar parte de ella anuncio Marcos Siqueiros, representante de don Alex, que por acuerdo de Imcine y el INBA se le rendira un homenaje a nivel nacional en el Palacio de Bellas Artes, en junio o julio proximo. .