PAG. 30 SECCION: DEPORTES CABEZA: FERNANDO MARCOS COMENTA Espero que esta vez la oveja, que para el caso no es otra cosa que la buena marcha de nuestro futbol, no resulte "muerta" ante las deliberaciones de los Rabadanes del balompie. Se discute si deben ser 19 o 20 equipos. Y esta discusion prueba lo absurdo de los planteamientos federativos que se hacen a un lado de los verdaderos intereses del deporte que dirigen. No hicieron el menor caso cuando se les dijo que "no deberian ser nones los equipos en contienda, sino pares". Menos mal que casi un ano mas tarde parece que ya lo entendieron, pero ser pares no significa, necesariamente, que sean 20. Pueden ser 18... o 16... o incluso 14. No es la cantidad la que determina la fluidez de un torneo. Son las posibilidades de manejo, de difusion, de masa de aficionados, de numero de autenticos jugadores de primera linea, etcetera. Este renglon, por supuesto, tiene muy poco que ver con el desarrollo tecnico del futbol, pero si mucho que tomar de los conceptos mas probados de la mercadotecnia. No se puede, y perdon por el ejemplo, tratar a la presentacion y venta al publico de ese espectaculo, que es el futbol, de la misma manera en que se vende la publicidad en la television. En esta, incluso, se exige no pocas veces el pago por adelantado y en la totalidad, cosa que en el futbol no es posible. Por ejemplo, para construir el estadio Azteca se pidio el adelanto del precio de palcos y plateas. Por cierto, los que adelantaron el dinero para ello tuvieron que pagar intereses: primera vez que el financiador paga intereses en lugar de cobrarlos. Pero eso no se puede tomar como regla, y menos cuando una vez adquiridas las plateas -los palcos se cierran con doble llave- el poseedor no tiene garantizado el acceso a la que le pertenece y que se encuentra ocupada por un tercero que alega que a el le pertenece y le ensena a usted el talon del boleto respectivo. ¨Quien vende boletos de plateas que ya estan fuera del mercado? Nunca lo he podido averiguar. En todo caso, la reunion de representantes de los equipos, y aun de los pocos clubes que todavia funcionan, es saludable. Pero lo es siempre y cuando se reserven el derecho de opinion y voto y no queden sometidos a la linea que les traza el director de la orquesta. Hay muchas cosas que hacer... Entre otras, y de manera vital, cambiar de raiz la forma en que se disputa el campeonato. La forma en que se adjudican los puntos es, aunque parezca necio decirlo, irrelevante. Lo que si importa es que durante el campeonato se este diciendo quien debe ser el campeon. Y para eso la formula es sencilla: quien mayor numero de puntos logre, ese sera el monarca, sin mas ni mas. Asi se termina de tajo la tendencia de los equipos visitantes de salir al empate, jugando simplemente "a no jugar" sino a especular en perjuicio del espectaculo y del futbol. Por cierto, si solamente se le dan puntos al que gane el partido y se le niegan a los dos equipos que, enfrentados en el momento dado, no sean capaces, uno o el otro, de ganar el juego. La base del razonamiento es sencilla: "¨Si no ganas el partido como quieres ganar puntos?" ¨Y que pasaria con la liguilla? Pues muy sencillo: seria sustituida por la Copa Mexico, con la participacion de todos, a doble visita, y con el lema de "gana o vete". Es tan facil hacerlo y tan clara su validez, que estoy seguro que no se hara. Pero, ni modo: se propone y alla ellos. Pero que recuerden los directivos que un aficionado al que no le gustan las cosas como se las presentan, simplemente abandona la idea al futbol y se dedica a un domingo en otra diversion. .