SECCION CULTURA PAGINA 34 CABEZA: CREDITO: Durante mucho tiempo se hablo de la estabilidad politica y social de nuestro pais como una cualidad extraordinaria, y esto puede parecer paradojico si consideramos que cada seis anos, con el cambio de presidente dela Republica, Mexico desaparecia y reaparecia trasnfigurado, convertido en otro totalmente nuevo. Cada presidente inventaba a la nacion y comenzaba a partir de cero. Sin emabrgo, la paradoja solo es aparente ya que el verdadero fundamento de la estabilidad politica y social de Mexico radicaba precisamente en esa renovacion, en el transito de un gobierno liberal o otro conservador, de uno populista o otro tecnocratico, y no es sino ahora, que queremos convertirnos en un verdadero pais de instituciones, democratico y serio, que toda la maquinaria cruje y se rebela. Entonces emerge no el Mexico bronco sino el Mexico arcaico. Jacques Soustel, en La vida cotidiana de los aztecas en visperas de la conquista, senala que los antiguos mexicanos tenian la intima conviccion de que muchos secesivos habian precedido al nuestro y que cada uno de ellos se habia hundido en cataclismos en el curso de los cuales la humanidad habia sido exterminada. Segun esta concepticon de la vida nacional, que la parecer no ha sido superada por completo, nuestro mundo sufriria la misma suerte y los cataclismos acabarian con nosotros. Ante esta aterradora perpectiva los mexicanos no podian tener confianza en el porvenir, sencillamente no creian en el. Su mundo era fragil, siempre estaba expuesto a la catastrofe. El terror se apoderaba de los pueblos del imperio cuando llegaba a su fin el ultimo dia del "siglo" y todos se preguntaban sinceramente si el sol reapareceria. Toso los fuegos se preguntaban sinceramente si el sol reaparecia. Toso los fuegos eran apagados en las ciudades y en el campo y las multitudes se apretujaban anhelantes a pie y en las laderas de la montana Huixachtectl, en tanto que en la parte mas alta los sacerdotes observaban la constelacion de las Pleyades, en espera de un indicio favorable de que el sol seguiria en curso. Que imagen, que descripcion tan elocuente de un cambio de gobierno en Mexico. Y es que cada seis anos, cuando se acerca el fin de una administracion federal y el inicio de otra, las multitudes se recogen en sus casas pues presienten, en lo mas intimo de su ser, que la catastrofe acecha. Durante este tiempo aciago todo se puede esperar, desde nacionalizaciones bancarias hasta crimenes politicos. Las mujeres realizan compras de panico, los hombres cambian pesos por dolares y hasta los ninos dejan de ir a la escuela por temor a lo desconocido; entonces se rumora insistentemente la inminencia de un golpe de Estado y la moneda nacional se tambalea. Pero ya basta. Ante todo lo que parece una herencia cultural de nuestros nobles antepasados, que en su tiempo era comprensible y se justificaba, cabe preguntarnos si los mexicanos de hoy somos capaces de concebir el desarrollo de Mexico como un proceso mas o menos lineal, sin rupturas, colisiones, vuelcos ni sobresaltos sexenales, si somos capaces de evolucionar a una forma de vida basada en la continuidad de las instituciones o seguiremos siendo presa del fatalismo y de esta maldicion apocaliptica que nos aflige. Mexico ha realizado un esfuerzo extraordinario de modernizacion en los anos recientes y no puede eludir la tarea de completar ese proceso. Tenemos que modernizarnos en lo economico, politico, social y cultural, y cuando esto ocurra podremos ver con un dejo de nostalgia el comportamiento tribal que ahora nos caracteriza y que nos impide ver mas alla de la inminencia del fin del mundo. *Literato y dramaturgo, autor de Tlaxcalcingo .