SECCION CULTURA PAGINA 34 BALAZO: CABEZA: Tan cerca de mis ojos, tan lejos de mi guardarropa CREDITO: Jesus Quintero Cualquier desfile de modas, trasladado a tinta, es una inevitable y cinica invitacion a los lugares mas comunes de la seccion de Sociales, pues la belleza y la extravagancia no suelen ser los residentes exclusivos de la pasarela, sino que tambien se localizan entre el publico asistente, mas atento al "quien esta" que al "que me interesa". Afortunadamente, el desfile Modas melancolicas del Romanticismo, que tuvo lugar el pasado miercoles en la catedral del posmo, XTeresa, Arte Alternativo, tuv o un halito mas heterogeneo en cuanto a publico y desenfadado en cuanto a disenos, con lo que se logro instalar con mayor comodidad en un territorio donde la crisis ha destronado los comentarios escandalosos sobre el arte de vestir (y tambien de desvestir). El Romanticismo, en su cascara segun se deduce por algunos de los espectaculos presentados en la sexta edicion del Festival del Centro Historico de la Ciudad de Mexico, tiene que ver no tanto con la filosofia posmoderna pero si con una de sus muchas envolturas, el tan traido y llevado dark, al que siempre sera mas facil llegar: palidez espectral, ojos sombrios, angulos faciales producto de la tisis aparente y un repertorio iconografico en que la muerte y la imposibilidad del amor estan prese ntes (una de las obras se titula "Me quiero, no me quiero"). En poco menos de 40 minutos, casi tres decenas de vestidos mostraron que la poesia del ropaje finisecular se alimenta de varias tendencias; pero si bien las escuelas y los origenes de sus autores son muy distintos, su intencion parece ser solo una: el reciclamiento sin previa transformacion. Asi, ademas de tela, tambien intervienen el plastico, hojas para tamales, carton, herreria , los tejidos invisibles (caso de "El traje nuevo de la emperadora", que lamentablemente no uso ropa interior del mismo material) y fotografia, entre otros elementos. En suma, nada nuevo. Las fiestas de Noche de brujas con vestidos de papel y los festivales escolares del diez de mayo con faldas hawaianas de rafia se antojan como antecedentes directos y con igual merito artesanal. Entonces, ¨donde puede radicar su trascendencia? Quizas en su don de sintesis. Este desfile de modas, que poco o casi nada tuvo que ver con el Romanticismo esplendido de 1830 a 1860, demostro que al amparo de cualquier "ismo" toda obsesion est etica tiene cabida, pues ¨que hacian alli dos modelos a la usanza francesa de Luis XVI, flanqueados por un cyborg y por una femina sacada de un relato de Horacio Quiroga? La esencia onirica de los disenadores concilia la estetica de los comics de aventuras galacticas (tipo Rocketer) con los inevitables tributos a Frida Kahlo y al corazon herido. Esa noche, en XTeresa, gracias a tanta melancolia y a un kitsch dosificado, no hubo espacio para la violencia gratuita de tantos performancer os que pululan por estas tierras del neutle y hamburguesas al minuto. Ellas, las modelos, muy en su papel: a veces candorosas (¨Se verian asi especula un ingenuo las hermanas Bront?), y otras, altivas e intocables. Ellos: los muy viriles, con un "aplomo" que mas bien parecia fastidio, mientras que los no muy viriles habrian hecho verse a Juanga como el Charles Bronson de la pasarela. ¨Y los autores? Romanticos de ocasion y posmodernos de ambicion, mirando hacia atras y hacia adelante, ufanamente podri an haber declarado: Yo soy mi "ismo". Con precios que oscilan entre los 450 y los 7 mil 500 neopesos, los vestidos que desde ayer y hasta el 27 de este mes estaran expuestos en XTeresa (Licenciado Verdad 8, Centro Historico) dan fe de una pasion melancolica que, en su desfile, no alcanzo a instalarse en el delirio, sino apenas en el recuerdo tenue. El carnaval de lo efimero se esfuma cuando la luz amarillenta y siempre extrana del Zocalo indica donde esta la boca del Metro. .