SECCION: INFORMACION GENERAL PAGINA: 6 BALAZO: LOS HECHOS Y LOS MITOS CABEZA: Caso Colosio y caso Ruiz Massieu, una comparacion CREDITO: Gustavo Hirales* Tiene razon Proceso cuando senala, en su numero 957, que en el caso Colosio ya van dos presidentes, tres procuradores, tres subprocuradores especiales, "y las dudas persisten". Miguel Montes no pudo convencer a la opinion publica con su hipotesis del asesino solitario. Olga Islas dejo la impresion de que le falto tiempo para culminar su tarea, y a Pablo Chapa Bezanilla se le esta haciendo bolas el engrudo, con su teoria de "el complot de Othon". Es cierto que descubrir los hilos de un complot no es cosa facil, pues por definicion parte esencial del complot mismo es, precisamente, borrar las huellas que conduzcan a quienes conspiran; pero de que se puede, se puede. El ejemplo mas claro que tenemos a nuestro alcance es precisamente el caso Ruiz Massieu. Alli tambien hubo un complot (¨o debo decir: alli si hubo complot?), y la detencion, fortuita si se quiere, del asesino material, Daniel Aguilar Trevino, condujo al eslabon siguiente, y este al otro, de modo que se llego a una situacion en la que estaba claro lo que pudieramos llamar el organigrama del complot criminal y el cerebro del mismo: Manuel Munoz Rocha. Ahora sabemos que no se pudo llegar mas alla en este caso, debido a que, por razones que aun no estan suficientemente claras, pero que de seguro lo estaran en un futuro proximo, la autoridad responsable de la investigacion (que por anomalias de nuestra vida politica resulto ser hermano de la victima) decidio desviar deliberadamente su curso, y encubrir las menciones y rastros del presunto verdadero autor intelectual: Raul Salinas de Gortari. En el caso Ruiz Massieu todos los indiciados aceptaron, en terminos de tiempo absolutamente perentorios, su responsabilidad en el delito; precisaron el papel que cada uno de ellos jugo en el complot criminal, y hasta esbozaron las probables causas y moviles del mismo. Es cierto que el trato policiaco y judicial que se les dio no fue muy ortodoxo, que digamos, pero aun asi en la opinion publica quedo firme la conviccion de que esos indiciados y detenidos estaban realmente vinculados al delito, luego se veria que tanto, en que grado. No tenian los sospechosos (ni siquiera intentaron hacerse de) coartadas viables; despues de cometido el delito se habian dado a la fuga, sus vinculos con el principal sospechoso, Munoz Rocha, eran publicos y notorios. ¨Y en el caso Colosio? Aqui todo fue al reves: si exceptuamos a Mario Aburto, nadie mas estuvo dispuesto, en ningun momento, a aceptar su participacion en el crimen, menos en el complot para ejecutar el atentado. Y no porque haya habido ausencia de presion extralegal para propiciar las confesiones. Como decia ayer, tanto Aburto como Tranquilino Sanchez fueron torturados en la primera etapa de la investigacion, y nada salio. Ahora se sabe que a Othon Cortes tambien le aplicaron su buena dosis de coercion ile gal, y tampoco obtuvieron una confesion. Y si bien es cierto que la confesion ya no es, como lo era antes, "la reina de las pruebas", nadie podra negar que sigue siendo muy importante, maxime en un caso de las dimensiones de este. No solo como elemento de prueba para la sentencia, sino incluso para mantener un curso de investigacion. Hay otros datos por lo menos curiosos: todos los sospechosos e indiciados en el caso Colosio estaban ahi, en el momento y en la escena del crimen (con la excepcion de Rodolfo Rivapalacio Tinajero, quien se encontraba cerca de Lomas Taurinas, pero fuera de la escena). En el caso Ruiz Massieu, es todo lo contrario. Ninguno de los involucrados estaba presente cuando ocurrio el atentado, excepto Carlos Angel Cantu, quien cumplia funciones de "senalizacion" del objetivo, por decirlo asi. Todos los demas estaban a buen recaudo, si acaso piezas menores jugaban el papel de "muro" para proteger o propiciar la huida del maton directo. Tanto es asi que los hoy senalados judicialmente como autores intelectuales estuvieron, contritos y acongojados, tanto en el hospital donde fue llevado Jose Francisco para su atencion medica, como en los servicios funerarios que se le hicieron a la victima. Como senala con justeza Carlos Marin, en el caso Colosio la investigacion no ha podido salir de la escena del crimen, dando vueltas sobre si misma sin lograr salir del circulo vicioso del "creo, me parece, dicen". Mientra que en el otro caso celebre ( y doloroso) de complot, la investigacion toco las faldas de la Presidencial de la Republica, en la persona de un hermano del expresidente. Lo que falla garrafalmente en la nueva version del complot que maneja la Procuraduria, es la cuestion decisiva de las confesiones y los vinculos. Es decir, no hay confesiones de los supuestos nuevos culpables, pero tampoco han aflorado los vinculos entre ellos, ni de ellos con los antiguos sospechosos o indiciados. Hasta ahora la Procu dice que Othon Cortes realizo un segundo disparo, pero no nos dice en que momento se puso de acuerdo con Aburto para disparar casi al unisono, pues la supuesta sena que, en e l video Cortes le hace a Aburto, no es sino una charada, un cuento para ninos anormales. No se nos ha dicho cuales son los vinculos entre los nuevos y los viejos involucrados, ni si se trata de un solo complot, de dos complots paralelos, o de la extrana e increible coincidencia de un complot mas un asesino solitario. En espera de los avances de la Procuraduria, yo sigo pensando que lo que hay es una gran confusion, mucho protagonismo, y muy poca prudencia entre los actuales investigadores, al menos en este caso. Y no solo: vease el oportunismo rampante de un Ruffo Appel, que un dia dice que si hizo una investigacion paralela, al otro dia dice que siempre no, y al tercero declara que "la narcopolitica bloquea esclarecer el caso Colosio". ¨Y que pruebas aporta el flamante gobernador bajacaliforniano de sus dichos? Ninguna , solo la audacia de la lengua y la garantia de foro que supone hablar desde su posicion, en un caso que sigue conmoviendo al pais. Dice Felix Fuentes: "Borrada la hipotesis del asesino solitario, quedo en evidencia la del complot". Pero ello no es exacto: la hipotesis del asesino solitario solo ha sido borrada de pico, en declaraciones. En los hechos, en las investigaciones judiciales y en las declaraciones ministeriales, la hipotesis del asesino solitario sigue siendo aun la mas firme. Esta hipotesis ya resistio un complot, el de Miguel Montes, y puede muy probablemente resistir otro, el de Chapa y Lozano Gracia. En cualquier caso, invito a mis tres lectores a discutir este tema hoy jueves 23 de marzo, a las siete de la noche, en la presentacion de mi libro El complot de Aburto, en la casa de la cultura Jesus Reyes Heroles. Me acompanaran Alejandro Encinas, Jorge Fernandez Menendez y Adolfo Sanchez Rebolledo. * Politologo .