SECCION INF. GRAL PAGINA PRIMERA DE PRIMERA BALAZO: LEY DE TALION CABEZA: EN CHICHICAPAM "NADIE VIO, NADIE SUPO" COMO ASESINARON A 7 DE YAXE CREDITO: HERMENEGILDO CASTRO, ENVIADO (Segunda parte) SAN BALTAZAR CHICHICAPAM, Oax., 14 de marzo.Aun habia humo en el camino de la masacre seguian ardiendo los cinco cuerpos cuando el comandante judicial Margarito Lopez Aragon y sus hombres entraron al pueblo. Hacia calor y los policias llegaron sin olvidar las 40 ordenes de aprehension pendientes aqui, desde hace nueve anos, contra presuntos responsables de la muerte de 17 policias, emboscados en el mismo camino. Era una manana clara, el mismo 4 de marzo, un dia despues de que en opinion escrita del presidente municipal, Perfecto Carranza Garcia San Nicolas Yaxe rompio el acuerdo de paz con Chichicapam porque su gente mato a Emilio Rebollar Santiago. Tengan mucho cuidado, son muy peligrosos habian recomendado altas autoridades judiciales. Entre Yaxe y Chichicapam existe un conflicto agrario que arroja ya, en conjunto, mas de 50 muertos documentados y medio siglo de promesas de solucion por parte de la Secretaria de la Reforma Agraria. Lopez Aragon y sus hombres vieron a tres campesinos que, creyeron, trataban de huir. En realidad eran los policias municipales Ambrosio Santiago Chincoya, Juan Vazquez Perez y Ambrosio Santiago Mendoza, quienes fueron detenidos. A la misma hora, en el paraje Agua Blanca, mas de 30 campesinos de Yaxe se alejaban del lugar donde murieron siete de sus familiares y amigos. Una veintena de policias judiciales los seguia con la mirada. El comandante judicial y sus detenidos, mientras tanto, salian del pueblo y querian hacerlo rapido. Iban por un pueblo de zapotecos que han construido un oasis en el semidesierto, con su agua rodada y sus canales para regar hortalizas, sus construcciones de dos pisos y sus campos de citricos. El temor de los policias es compartido por otros sectores. Varios dias despues, cuando por fin entro la prensa oaxaquena, los reporteros llegaron en una camioneta con la palabra prensa por los cuatro costados en grandes letras blancas. Un amigo periodista me dijo: vamos a ir a Chichicapam, pero no nos vayan a matar; yo me enoje mucho y le dije que aqui no somos asesinos habia revelado antes del arribo la presidenta del Consejo para la Integracion de la Mujer. No tenemos armas, no sabemos quienes fueron, no fuimos nosotros dijo la mujer ante una veintena de campesinos que se reunieron en el palacio municipal. El angosto camino de terraceria que se divide en "y" para llegar a Yaxe y Chichicapam entra aqui en una explanada y se vuelve amplia calle principal, sin pavimento pero con casas solidas de tabique y concreto, escuelas de dos aguas y amplias ventanas, plaza y auditorio donde Los Alegres de Teran vinieron a tocar en el aniversario. Todo bien pintado. En esa calle se encuentran la presidencia municipal y una iglesia, donde un sacerdote oficia y bendice cada dos domingos. La iglesia esta cerrada los demas dias. La alcaldia hervia de hombres y mujeres que se protegen de los extranos con su lengua zapoteca, pero desde luego hablan de los muertos. Ya todo el mundo sabia que el gobierno senala como sospechosos de la matanza a los hijos de Emilio Rebollar Santiago. Algunos dicen que son seis, pero los testigos y sobrevivientes de la masacre mencionan que hubo "como 50" hombres armados disparando contra la camioneta de Yaxe. Frente a la plaza, mujeres con su rebozo al hombro esperaron hasta que termino la platica con el ultimo de los periodistas que llegaron. En un rincon el presidente municipal, Perfecto Carranza, respondio: Nosotros no sabemos, eso paso fuera de la comunidad, en el campo, nosotros nada vimos. De grueso bigote y sombrero, los pies fuera de las correas de los huaraches, Carranza fue todo cortesia, amable y pausado, atento a despejar cualquier duda sobre la tierra y el derecho que, dijo, les asiste. Tenia todo documentado, escrita en maquina la relacion de nombres y la fecha de sus ultimos muertos, entre ellos su propio hijo, Cenobio Carranza, abatido cuando aun no cumplia los 18 anos, cerca del rio que marca los limites con Yaxe. Fuera del edificio municipal, en la plaza, una mujer enrebozada le llevo una naranja a la fotografa Lucia Godinez "para que se refresque". Contra el lugar comun del silencio y el recelo indigena, los zapotecas de Chichicapam muestran deseos de agradar, platicadores, sin nada que comprometa a la comunidad. ¨Hijos? ¨Cuales hijos si el difunto solo tenia ninas, asi de chiquitas? respondieron sobre el paradero de seis hombres senalados por la policia como principales sospechosos. En la oficina del alcalde una fila de sillas recorria los cuatro muros y, sombrero en mano sobre las piernas, los campesinos escucharon y asintieron, interrumpieron y dijeron siempre lo mismo: Nosotros no sabemos quienes fueron. En la puerta un campesino de playera amarilla ha viajado mucho y lee mucho, explicaria uno mas tarde tenia una bolsa, de la que sacaba los papeles necesarios sobre el conflicto agrario. La resolucion presidencial de Manuel Avila Camacho que, el 19 de noviembre de 1941, los dota de 3 mil 73 hectareas. Ademas, el plano del ejido definitivo, los oficios entregados en la SRA, la historia de las reuniones de paz y los acuerdos con San Nicolas Yaxe. Orgullosos desplegaron sobre la mesa el plano definitivo del ejido, explicaron mojonera por mojonera los limites, linea a linea la zona de conflicto, unas 300 hectareas pedregosas. ¨Que van a sembrar ahi? No, pues sembrar, nada, son terrenos para el pastoreo contesto el alcalde. Desde la puerta de la presidencia municipal de Chichicapam, igual que en la de Yaxe, se puede observar la zona pedregosa del conflicto. Uno piensa entonces que ahi se secan hasta los huizaches y que ni el chamizo levanta altura. En la pared, un cartel de Colosio y un cuadro de Heladio Ramirez Lopez, el ex gobernador que mantuvo el pleito en calma relativa y ofrecio comprar 400 hectareas aparte para cualquiera de los dos pueblos. Ninguno acepto. Despues la platica volvio sobre el tema de los presuntos responsables de la emboscada en la que murieron, ese viernes fatidico, siete campesinos. Cuales hijos! Si el difunto solo tenia tres ninas insistio la presidenta del Consejo para la Integracion de la Mujer. En los expedientes de la Procuraduria de Justicia del Estado consta, sin embargo, que Rebollar Santiago tenia seis hijos: Rey, Gabino, Arturo, Irineo, Alfonso y Braulio. Dos de ellos, segun los documentos, son militares: Gabino, de 25 anos, e Irineo, de 20. Pero en el pueblo solo aceptan conocer a Alfonso, de 22. El, acompanado por unas 15 mujeres del CIM, levanto el cuerpo de su padre y lo traslado en su camioneta hasta el palacio municipal, el jueves 3 de marzo. No se si hay venganza, problemas siempre ha habido con los de Yaxe dijo el teniente de la policia municipal Juan Vazquez Perez. Ubicado por la policia, en principio, como uno de los presuntos responsables, la prueba de la parafina resulto negativa: no habia disparado. No se si alguno de los hijos participo anoto Juan Santiago Chincoya, tambien policia. En el antebrazo tiene tatuado un corazon con las letras BCS. La prueba de radizonato de sodio, ordenada por la Procuraduria, tambien resulto negativa. No puedo senalar a nadie porque nada vi respondio Ambrosio Santiago Mendoza, comandante de la policia municipal. La prueba de la parafina en sus manos resulto positiva. En cambio, documentan las agresiones atribuidas a los campesinos de Yaxe, en la ultima epoca: El 11 de septiembre de 1991 varios desconocidos dieron muerte a Cenobio Carranza Martinez, de 18 anos de edad, hijo del actual presidente municipal, cerca del rio que marca la colindancia entre ambos pueblos. Asi consta en la diligencia municipal de la misma fecha. El 4 de julio de 1992, en otro sitio ubicado en los limites del municipio, personas que no fueron identificadas por su nombre balacearon y mataron a Ignacio Velasco Vazquez. El 20 de marzo de 1993 fue balaceado Arcadio Hernandez Sangerman, en el paraje Larrastra. El 28 de junio del 93 fueron baleados cinco jovenes en La Diabacona, segun oficio 027 girado a Agustin Marquez, secretario de Gobierno. El 19 de septiembre del mismo ano, escondidos entre los matorrales, balacearon e hirieron a Marcos Hernandez Garcia, en el paraje La Toma, de acuerdo con oficio 152 girado a la Procuraduria de Justicia solicitando su intervencion. El 3 de marzo del 94 resulto muerto Emilio Rebollar en el paraje llamado Vivero. Fue, aparentemente, la gota que derramo el vaso, la accion que desencadeno la venganza en la que se deshicieron las firmas de paz del 20 de mayo de 1993. La manana del viernes 4, en un recodo del camino, nacio en la burocracia una fiscalia especial para investigar el caso y en San Nicolas Yaxe se espera el momento del desquite. (CONTINUARA). .