GUIA: 1503604 SEC. INF. GRAL. PAG. 3 CABEZA: Los partidos politicos ausentes del debate nacional CREDITO: Maria Emilia Farias La pasada fue una semana llena de sorpresas en la que hubo un poco de todo. Desde las intenciones del candidato a la presidencia del PRI de alejar al partido del gobierno, hasta la clasificacion de que el encargado de pacificar Chiapas, seguiria participando en politica. Entre estas dos declaraciones que acapararon las primeras planas de los periodicos y grandes espacios en los noticieros de radio y television; otra noticia, tambien importante, reflejo el deterioro del ambiente politico chiapaneco. El abanderado a la presidencia por el Revolucinario Institucional se comprometio, entre otras cosas, a llevar a cabo las acciones necesarias para realizar la tan anunciada separacion entre partido y gobierno y una reforma del poder. Por su parte, el encargado de restablecer la paz y lograr la reconciliacion en Chiapas aclaro que seguiria adelante con su compromiso pacificador y anuncio, en la misma ocasion, que trabajaria en favor de la transicion democratica del pais. El discurso del candidato del PRI causo mas escepticismo que entusiasmo. No es la primera vez que un candidato del tricolor se compromete a restablecer el equilibrio entre los poderes de la Union y reformar las instituciones. En tanto que la declaracion del Comisionado para la Paz de que seguira participando en politica y que pondra su mejor empeno en el proceso de transicion democratica, no logro despejar las incognitas sobre la modalidad de su participacion ni el momento en que la emprendera. En un contexto altamente mediatico, las exigencias de los grupos de interes chiapanecos que han contribuido a la polarizacion social y politica que se vive en la entidad, ocuparon un lugar secundario. Y estos hechos de intolerancia son los que en realidad deben preocuparnos, pues indican que las instituciones politicas de Chiapas no han podido administrar el conflicto y que puede volver a estallar en cualquier momento. El panorama electoral puede complicarse aun mas si en los meses que faltan para los comicios, seguimos con la misma tonica. No solo porque la intolerancia nos llevara mas pronto a la polarizacion, sino porque cada dia que pasa los ciudadanos vemos que las discusiones politicas y los enfrentamientos violentos nos alejan de las opciones para modificar nuestra realidad cotidiana. En este sentido, las ofertas de los partidos a la ciudadania han sido confusas, ya que mezclan condiciones de limpieza electoral con temas y contenidos de campana, dejando de lado el objetivo de una campana politica: un periodo para ofertar los distintos proyectos de los partidos para la sociedad mexicana. En efecto, hasta la fecha no ha habido un debate propiamente politico. La presentacion de proyectos y programas de los partidos no han sido clara. Tal vez, porque a estos les es mas urgente mejorar las condiciones de transparencia de un proceso electoral que por haber sido manoseado durante anos, ha perdido toda credibilidad. A pesar de ello, los ciudadanos estamos deseosos de comparar las distintas ofertas que las fuerzas politicas organizadas proponen para el futuro del pais. Entre mas pronto lleguen los partidos a un acuerdo en el que todos coincidan plenamente para garantizar la limpieza y credibilidad de los comicios del 21 de agosto, mas pronto podran ofertar sus propuestas a la sociedad mexicana. El debate electoral, al menos entre los candidatos a la presidencia, no puede reducirse al debate televisivo. Los que aspiran a la primera magistratura deben iniciar una discusion amplia que supere los lugares comunes y que aporte elementos para enriquecer el debate nacional. Los temas estan a la vista, lo que no lo esta son las propuestas como tales. En un pais como el nuestro en el que no existe la practica de debates televisivos se corre el riesgo de sustituir el verdadero debate por un evento mediatico. Los riesgos de desmotivar a una ciudadania que ha demostrado una nueva energia e imaginacion en la articulacion de sus demandas, pueden ser muy altos y aparentemente la mayor parte de los partidos no se han percatado de ello. Por otra parte, la transmision de nuevas ideas a traves de la practica discursiva no ha sido lo suficientemente clara: el discurso priista se antoja desfasado y las intenciones de cambio tardias, el perredista se ha centrado principalmente en la transparencia y legalidad de los comicios y, el de Accion Nacional se esfuerza en desligarse de las coincidencias que tiene con el discurso oficial. El resto de las voces partidistas tampoco ha logrado, a excepcion de la candidata del Partido del Trabajo, que tiene la cualidad de centrar el debate, entregar una propuesta clara que motive a los ciudadanos. En el contexto politico actual en que los acuerdos de paz con el EZLN aun no se han firmado y que los grupos a los que no les conviene la construccion de la democracia ejercen todo tipo de presiones, la incertidumbre invade a la poblacion. Los ciudadanos somos lo suficientemente intuitivos como para saber que la fragilidad politica del momento es muy grande y por lo mismo nos gustaria recibir de los partidos mayor claridad en las respuestas a nuestros problemas. Es urgente un acuerdo para que los comicios no se conviertan en pretexto para la violencia, pero tambien es urgente que los partidos reconozcan su responsabilidad politica con la sociedad. Las campanas y los discursos no pueden servir para el envio de recados entre los politicos cercanos al poder, como tampoco pueden ser utilizados para proponer revanchas. Los ciudadanos merecemos algo mas, queremos saber que pasara con el desempleo y que es lo que se proponen en las fuerzas politicas nacionales para enfrentarlo, necesitamos prepararnos mejor para la competencia internacional y por eso deseamos conocer que piensan los partidos en materia de educacion superior y de capacitacion para el trabajo y podria continuar con una extensa lista de interrogantes. Los cuadros partidistas me podran responder que en unos cuadernitos, mejor conocidos con el nombre de plataformas electorales, esta contenida toda la sabiduria que apaciguara mi inquietud. Sin embargo, no todos los ciudadanos tienen las mismas condiciones de acceso a la informacion, por una parte, y, por la otra, los partidos no siempre utilizan el lenguaje mas llano y directo para comunicarse con la sociedad. Los partidos deberian ser mas ciudadosos con los mensajes que entregan a la ciudadania, de lo cont rario no estaran a la altura de las circunstancias. .