PAG. 2 SECCION: Inf. Gral. CINTILLO: Ecologia CABEZA: Hoy no circula, en el ojo del huracan CREDITO: Gabriel Quadri de la Torre. Durante esta semana asistimos a una aceleracion en los procesos politicos que apuntan a las elecciones del 21 de agosto. En esta voragine, por primera vez, hubo un pronunciamiento claro y directo de un candidato a la presidencia sobre uno de los temas ambientales mas significativos para los habitantes de la ciudad de Mexico. Esta actitud, definida y clara, no deja de ser alentadora: marca una novedosa linea de campana, franca y honesta, que ojala sea seguida por otros candidatos y partidos. Nos referimos al pronunciamiento realizado por Luis Donaldo Colosio (LDC) sobre la medida "Hoy No Circula" aplicada en la Ciudad de Mexico desde noviembre de 1990, Mas alla de la retorica ampulosa y hueca que solo apela a un ineficiente marketing electoral, opiniones como esta, contribuyen a sanear el mercado politico de la nacion esclareciendo la oferta partidaria, la cual con frecuencia naufraga en evocaciones retoricas que eluden el compromiso; algo que sin duda ha alejado a los votantes de las urnas y ha debilitado nuestro sistema democratico. Independientemente de que esa toma de posicion por parte de LDC alienta una cotienda electoral mucho mas rica y cercana a las inquietudes reales de los ciudadanos, la opinion del candidato del PRI a la presidencia de la Republica viene a poner el dedo en una sensible llaga de la politica ambiental urbana. El Hoy no Circula, como todo el mundo sabe, fue una idea retomada de fines de los anos 80s, cuando un grupo de ciudadanos organizados para combatir la contaminacion atmosferica propuso al gobierno de la ciudad, encabezado entonces por Ramon Aguirre, el conocido programa de un dia sin auto, el cual se instrumento con alcances muy limitados debido a su caracter voluntario. El Hoy no Circula es pues una rehabilitacion normativizada de esa iniciativa ciudadana, y se constituyo a principios de los 90s en uno de los argumentos centrales de la politica ambiental urbana. Tengamos en cuenta que hasta la fecha, esta se basa, ademas de en el Hoy No Circula, en la aplicacion de regulaciones tail pipe (que aplica solo al escape de los vehiculos y a las chimeneas de las industrias), en la reformulacion de combustibles por parte de PEMEX y en la incorporacion de dispositivos de control d e contaminantes en vehiculos nuevos (convertidores cataliticos); esto, ademas de la sustitucion de motores en R-100, un controvertido programa de utilizacion de gas LP en minibuses y en flotillas (controvertido, porque el uso de gas LP incrementa las emisiones de oxido de nitrogeno), y, del programa de verificacion vehicular. Pueden incluirse aqui otras acciones como la ampliacion del metro, la construccion de pasos a desnivel y la multiplicacion de taxis y minibuses "ecologicos", etc. Aunque debe reconocerse la experiencia de politica ambiental urbana que se ha vivido durante los ultimos anos, debemos cuidarnos mucho de echar campanas a volar. Estemos conscientes que el ozono es y seguira siendo un problema abrumador a pesar de las medidas adoptadas, y de que no podemos adjudicarnos triunfos de manera prematura al respecto de los otros contaminantes que se miden diariamente, ya que, o bien, estos persisten (como es el caso del bioxido de nitrogeno), o bien, manifiestan tendencias erratic as hasta ahra dificilmente explicables (como es el caso del monoxido de carbono), o, nunca han sido en realidad un problema significativo de calidad del aire en la ciudad de Mexico (como es el caso del bioxido de azufre). Dejando para otra ocasion un comentario detallado al respecto, y ante la oportunidad que se nos brinda esta semana de reflexionar sobre el Hoy No Circula, nos permitiremos extendernos un poco en nuestra apreciacion de esta polemica medida. Entendemos que el proposito del Hoy No Circula es reducir el numero de vehiculos de circulacion cotidianamente con el objeto de abatir el consumo de combustible, y por tanto, las emisiones contaminantes de la atmosfera. Aunque es algo intuitivo y elemental desde la logica, pocas veces se acepta que el deterioro de la calidad del aire es un problema energetico, consecuencia de la quema excesiva de combustibles fosiles dentro de una cuenta atmosferica que tiene, evidentemente, una capacidad de carga limitada, mas alla de la cual se tiende a violar sistematicamente las normas de la calidad del aire. Dado este razonamiento, puede ser muy sencillo evaluar el desempeno del Hoy No Circula como instrumento de politica con solo hojear los datos de consumo de gasolina en la ciudad de Mexico durante los ultimos anos. El veredicto sobre el Hoy No Circula seria entonces inapelable: si se modificaron a la baja las tendencias en el consumo de combustibles con esta medida podriamos concluir que ha sido exitosa; de lo contrario, el juicio tendria que ser opuesto. Antes de emitir alguna conclusion, conviene tener pre sente que la demanda de gasolina es una funcion muy compleja que depende de precios relativos, ingresos, nivel de actividad economica, numero de vehiculos en circulacion, etc., por lo que seria muy aventurado adelantar una opinion categorica sin un estudio econometrico solido y consistente. No obstante, la simple evidencia visual que nos ofrece la grafica que acompana este texto, nos inclina a pensar que el programa Hoy No Circula ha tenido un impacto insignificante, si no es que negativo (por el incremento en el parque vehicular) en las inercias vigentes de demanda de gasolinas en la ciudad de Mexico. El Hoy No Circula no ha abatido las tendencias de consumo de gasolina, presumiblemente, por varias razones que conviene traer a colacion: 1. Para las familias que han adquirido vehiculos adicionales con objeto de eludir la restriccion a la circulacion, el numero de dias-auto en circulacion se ha incrementado. Por ejemplo, en una familia propietaria de un vehiculo se generaban siete dias auto a la semana; al adquirir otro adicional por el Hoy No Circula (como todos sabemos que sucedio en buena medida), se genran doce. 2. Las familias que no hayan adquirido autos adicionales le dan un uso mas intenso al vehiculo durante los dias en que si circula. Esto es, los kilometros totales recorridos a la semana por el auto familiar no habrian variado de manera importante, ya que las actividades que se dejan de llevar a cabo el dia en que opera la restriccion se trasladan a otros dias. Esto, que podria haber sido facilmente previsto a traves de un analisis racional de politicas publicas, ha provocado el desperdicio de un importante capital politico y de energia social que podrian haber sido utilizados para apoyar la instrumentacion de medidas realmente efectivas. Paradojicamente, parece ser que la "popularidad" del Hoy No Circula (debido a que nos hacia expiar culpas ciudadanas) ha significado su propia esterilidad, ya que, en apariencia, se le mantuvo como medida permanente con el afan d e no perturbar el talante participativo de los automovilistas. En estos momentos el Hoy No Circula se ha convertido en un verdadero Frankenstein, ya que, eliminado sin adoptar una politica que atienda a las verdaderas causas del problema de la contaminacion atmosferica, equivaldria simplemente a anadir a la circulacion alrededor de 600 mil vehiculos diariamente. Esto no debe paralizarnos. Es preciso un reconocimiento responsable del dilema como premisa para una nueva politica ambiental urbana, donde se esgrima ante la opinion publica informacion adecuada para un proces o intenso de persuacion y pedagogia colectivas, como factores que amplien los espacios de consenso social y los margenes de maniobra de la autoridad. Esperamos que el aliento de objetivos, transparencia y compromiso que le ha dado a la oferta politica partidaria en materia ambiental del PRI a la presidencia de la Republica, alcance al resto de los contendientes en la justa electoral. Ya nos merecemos, como ciudadanos, un tratamiento de adultos. .