GUIRA: TE PAG. 14 SECCION: INFORMACIN GENERAL CINTILLO: Fotografiamos nonos, no los robamos, dice uno de los linchados CABEZA: Tepetlaxco: un malentendido que casi costo la vida a 4 personas SUMARIO: "... Estuve a punto de asficiarme, me jalaron y gritaron: les vamos a echar gasolina..." CREDITO: JESUS MEJIA, ENVIADO ESPECIAL PUEBLA, Pue., 12 de marzo (Notimex).-Con la cara hinchada a causa de los golpes recibidos y huellas de sangre seca, el fotografo Julio Garcia Leal, una de las cuatro victimas del linchamiento del pasado nueve de marzo, resumio con lagrimas los hechos, todo fue un malentendido". "Nosotros no nos dedicamos a robar ninos, sino a fotografiarlos en las escuelas y pueden preguntar en las que hemos estado", dijo este joven proveniente de Martinez de la Torre, Veracruz, quien nunca imagino ser uno de los protagonistas del suceso de Tepatlaxco, ubicado a menos de 35 kilometros de la capital poblana. Convaleciente en el Hospital Universitario de Puebla, con una gasa en la nariz y los ojos completamente hinchados como resultado de la golpiza, Garcia Leal mostro las huellas del estrangulamiento en su cuello y reitero, "nosotros no faltamos el respeto a los ninos". Internado aun en el area de urgencias del nosocomio, donde ingreso a las 00:40 horas del martes pasado, el fotografo de 24 anos de edad recordo que el dia de los hechos se encontraba en Amozoc, donde realizo un trabajo de impresiones en un plantel escolar. Despues se traslado al municipio de Tepatlaxco, exactamente en el colegio "Rafael Romero" -aunque tambien ostenta el nombre de Emiliano Zapata- entre las 15:30 y 16:00 horas, donde sus companeros Israel Ramos Mendez (con hundimiento de craneo y estallamiento del ojo derecho) y Eustaquio Herrera Cortes ya estaban encerrados en un salon. "Dicen que todo se debio a que un senor o una senora le dijo a una nina que los del coche, -un Mustang blanco placas YSW 026 de Veracruz, que despues fue quemado y destruido- eran robachicos, entonces la pequena corrio al tiempo que prevenia a la gente, al poco rato se hizo el mitote". Con voz tremula y entrecortada, Garcia Leal continuo con su relato, "cuando se dieron cuenta mis companeros, ya estaban rodeados y la gente los amenazo que los iban a colgar y no se que cosa". "Cuando llegue, pregunte ¨que pasa aqui?, es que agarraron dos robachicos, me dijeron; me pase mas adelante y volvi a cuestionar, ¨oye, que paso?, y me dijeron, los robachicos venian en ese coche blanco que era con el que trabajabamos". "Mi camara era una Zennit y la otra una Nikon, una de ellas de 28.80 milimetros", prosiguio Garcia Leal quien fue completamente rapado por el personal medico para hacer posible las curaciones en la parte superior de su cabeza. "Le dije a una senora: oiga, si nosotros venimos a trabajar de buena fe, no venimos ni a robar ni a nada", a lo cual respondio, ah, usted viene con ellos, pues mejor vayase, me dijo, "entonces fue cuando me sali y a una cuadra me alcanzaron y me regresaron". "Cuando me dijeron subete a la camioneta (para entonces, elementos de la policia municipal llegaron al plantel con una unidad, donde trasladaron posteriormente a los fotografos y al maestro Fidencio Romero, (senalado como complice), pues me tuve que subir". "Como ya la gente empezaba a amontonarse dije: no, pos, antes de que aqui me frieguen me subo por la buena, y por la buena llegamos al palacio municipal". "Luego que llegamos comenzaron a gritar: aqui tenemos otro de los robachicos, y en eso empezo la gente a decirme groserias. Se subieron dos policias arriba de la camioneta, pero de hecho los bajaron y a mi me empezaron a golpear". "Entonces, no se. Cuando me estaban pateando abajo, de hecho sono un disparo, no se quien lo hizo y fue cuando la gente se retiro un poco y tuve tiempo de meterme al palacio, donde nos encerraron a los cuatro en una celda, pero la gente gritaba: saquenlos, saquenlos". Los policias cerraron bien el porton, pero cuando vieron mucha gente lo abrieron, enseguida la gente se metio y llego hasta nuestra celda y empezaron a alumbrar con una lampara, (aproximadamente a las 22:00 horas) y a patear la puerta... despues le quitaron las llaves no se a quien y abrieron el candado. "Nosotros empezaron hacer presion para que no entraran, pero nada mas eramos cuatro adentro y con toda la gente afuera, pues no podiamos hacer nada. Hasta donde aguantamos, estuvimos, pero se metio toda la gente y entrando, entrando, que se nos vienen encima a palazos y piedras asi", anadio el fotografo, tambien vendado del torax, aunque sin fracturas. Julio, el unico posibilitado para hablar, ya que sus companeros aun se encuentran inconscientes, a 48 horas de la agresion, recordo, no sin antes bajar el tono de voz y al borde de las lagrimas. "Nos sacaron a la calle, y frente al palacio nos empezaron a patear y agredir hasta que mis companeros perdieron el conocimiento". Dijo "estuve a punto de la asfixia. Me jalaron y al mismo tiempo me empujaron con un pie, entonces me gritaron: te vamos a echar gasolina". "Despues del cinturon me pusieron una soga, un lazo, con el que me dieron tres jalones y entonces me amontonaron encima de los companeros y nos echaron una poca de gasolina... Los que nos estaban golpeando eran puros chamacos, tendran unos 20 a veintitantos anos, otros mayores". "Unas personas empezaron a dialogar, que quien se iba a hacer cargo de las muertes; y unos dijeron: pues todo el pueblo. Pero tambien otros dijeron que no. Habia que buscar a alguien que se hiciera cargo, porque si despues investigaban que nosotros no eramos rateros de ninos, pues ahi seria el problema. Poco a poco se fue calmando la gente". Los socorristas de la Cruz Roja llegaron cerca de las 23:00 horas y trasladaron a las cuatro victimas a la ciudad de Puebla, donde los tres fotografos serian internados con lesiones graves en el Hospital Universitario y el profesor en el nosocomio local del ISSSTE, ya en la madrugada del martes .