GUIA: N2ALMAES SECCION: ESPECTACULOS PAG. 8 CINTILLO: Al maestro con carino CABEZA: En honor a Mr. Kiss-Kiss, Bang-Bang CREDITO: Xavier Velasco No hay hombre que no haya deseado al menos una vez en la vida ser Mr. Kiss-Kiss Bang Bang. No hay mujer que resista el anhelo de ser bien o aunque sea mal tratada por uno como el. En Japon, Mr. Kiss-Kiss Bang-Bang es el sobrenombre de James Bond: el agente 007. No se de un rockero al que Mr. Bond le sea indiferente. Qiuzas porque sus peliculas se hicieron famosas junto a los Beatles y porque, como los Beatles, alguna vez fueron los mas modernos del universo. O tal vez porque los mas vistosos conciertos de rock parecen haber sido disenados por Q, cientifico famoso por su chamba de surtir a Mr. Bond con armamento y parafernalia de alta tecnologia. O a lo mejor porque, como gente sensible a los mitos, los rockeros somos tambien permeables a la fantasia tecnologica y a los heroes plasticos. Hay, igualmente, quienes lo detestan. Condenados a vivir como minoria, no hacen sino confirmar la regla: con su desprecio, le confieren justamente la estatura que su leyenda merece (sus hijos bastardos, entre los que se cuentan El magnifico y El aguila descalza, hablan con elocuencia de la caudalosa herencia del espia padroton inventado por Ian Fleming). Ademas: de poco sirve detestarlo, no ver sus filmes y pretender que no existe, porque para contradecir tan cinica indiferencia esta la musica: una larga co leccion de canciones cuyos hechizos por si mismos podrian traer de regreso cualquiera de las epocas en las que fueron famosas, de 1962 para aca. Encontre hace unos dias la gema: The Best of James Bond, un doble compacto del cual escribire, para que las glandulas salivales comiencen a trabajar, que comienza con la pieza original que da inicio a las 16 peliculas del unico espia britanico que ha tenido a Ursula Andress encuerada -pieza escrita por el musico mas cercano al nombre y la leyenda, responsable ante el eterno productor Albert Broccoli de la calidad de cada pista sonora: John Barry. Bastan esos sonidos para enviarnos sin escalas hacia un mundo cuyo maximo hereo sabe como reconocer el bouquet del Dom Perignon /59, pide el martini "agitado, no batido" y bebe los elixires producidos por los cuerpos de las mujeres mas buenas y simultaneamente mas malas del mundo. ¨Alguien recuerda Goldfinger? Si es asi, estaran de acuerdo en que la voz de valquiria lubrica de Shirley Bassey tiene alli una potencia por lo menos equivalente a la del tercer gran villano con el que Mr. Bond hubo de echarse una sopa. ¨Y Thunderball, con el de por si jamesbondesco Tom Jones? ¨Y que tal You Only Live Twice, el hit a-go-go cantado por Nancy, que por entonces era la obra mas antojable de Frankie Boy? Eso por no hablar de Diamonds Are Forever, acariciadora pieza con la que Shirley Bassey, otr a vez a bordo, hacia derretir las libidos de quienes, recien graduados de la primera, saltabamos de susto y calentura en nuestra butaca del cine Manacar. Ciertamente, la musica de la era Roger Moore difiere seriamente de la que dio caracter y cache a la era Sean Connery. Como si el duro Bond, con el arribo de la decada del poliester, se hubiese vuelto un poco migajon: ­Ay, tu, muy Sheena Easton! Pero de nuevo, sucede lo inevitable: la pieza de Carly Simon (Nobody Does it Better), la de Lulu (The Man With the Golden Gun) o la de Paul McCartney (no se hagan, ya saben cual es) tienen el poder de ubicarnos con total precision en la epoca que caracterizaron, inde pendientemente de que se nos haya dado la gana o no ir al cine. Quienes comunmente desestiman a las pistas sonoras de las peliculas famosas pueden tener sus razones, pero eso si: de buenos reventones nada saben. ¨Imaginan ustedes el exito que podria tener una fiesta o un antro donde, ademas de Light My Fire, I Wanna Hold Your Hand y Satisfaction, se reventasen Diamonds Are Forever o Goldfinger? Su amigo y humilde narrador confiesa que no saldria de ahi. En vista de que The Best of James Bond es una edicion conmemorativa, la ocasion fue propicia para incluir, en un segundo compacto, buenas dosis de material inedito y la exageracion: tres comerciales de radio promoviendo las primeras cintas. Si bien las dos versiones de Mr. Kiss-Kiss Bang-Bang, cantadas por Dionne Warwick y Shirley Bassey, respectivamente, nada nos recuerdan porque nunca se editaron comercialmente, ambas son un agasajo que, despues de soplarnos tantos y tan maravillosos churrazos, tenemos el sagrado derecho de gozar. Solo un disco de James Bond puede contar entre sus extremos a Rita Coolidge y Louis Armstrong. Matt Monro y Duran Duran, Paul McCartney y A- ha. Y si entre estos nombres hallan ustedes a uno que odien, precisamente por migajon, hagan pujar al cerebro y recuerden aquella cancion que les encanta, pero ante nadie se han atrevido a confesarlo. Con algunas de estas, menos afortunadas que el promedio, sucede igual: uno las aprecia por malas y cursis y rucas, ¨y que? "Soy una romantica de closet", dijome una ciudadana que habia comenzado la conversacion hablando de los Pixies. Todavia no me atrevo, pero pienso invitarla a escuchar Goldfinger sola con Miguel The Best of James Bond: 30th. Anniversary Limited Edition. Album conmemorativo Emi de dos compactos (tambien disponible en edicion breve de un solo compacto), con los temas de las 16 peliculas y otros fetiches sonoros. .