SECCION ESPECTACULOS PAG. 37 BALAZO: AUDITORIO NACIONAL CABEZA: Lucero: la noche de una quinceanera feliz ¨Como la prefiere usted: ingenua, dulce, bravia, picara, romantica, con minifalda o con el mexicanisimo traje de charro? Lucero fue de esa y muchas otras maneras, y a fin de cuentas resulto una excelente estrategia para enfrentar a los casi diez mil fans que la corearon, y los mas audaces de mamacita y mi reina no la bajaron. El show del viernes comenzo antes de entrar al monumental foro capitalino. El ambiente de fiesta tambien se vivio en la calle donde, al amparo de las sombras, los vendedores ambulantes ofrecian a las parejas y a los solitarios tazas, camisetas, chalecos, fotos con y sin marco, plumas y demas articulos con el nombre o la figura en color y en blanco y negro de la estrella en turno. Esta vez, la imagen de Lucero nos acompano desde la salida del Metro Auditorio hasta nuestra butaca. La sonrisa, el cuerpo y belleza de la interprete se multiplico tantas veces como fotografias habia en los puestos ambulantes. Faltando 15 minutos para las nueve de la noche el publico se desespero por el retraso el show estaba programado a las 20:30 horas, y para apresurar la salida de Lucero al escenario comenzo a silbar y a aplaudir. Entonces las luces se apagaron y el grito de miles de asistentes se convirtio en un solo alarido que retumbo en los muros. El enorme telon se recorrio para dejar al descubierto la sorpresa que se tenia preparada para los asistentes. Aquello tambien fue una suerte de fiesta de quince anos con todo y chambelanes (sus bailarines), porque la tambien heroina de las telenovelas grito a los cuatro vientos que esta celebrando sus 15 anos de incansable labor artistica. Acompanada por cinco bailarines, un grupo integrado por ocho musicos y un coro, la cantante y actriz puso en marcha su espectaculo que se prolongo dos horas interpretando mas de 20 canciones de su nuevo y viejo repertorio. El show de Lucero fue como una obra en tres actos: en el primero canto algunos de los temas de su reciente album. El segundo acto fue, sin duda, el mas alegre de la noche pues, tras un breve receso, la quinceanera feliz irrumpio en el escenario vestida con traje de charro blanco y acompanada por el Mariachi 2000 de Cutberto Perez. Esta fue la otra cara de la moneda, la del folclor, la del grito bravio y pendenciero de la cancion ranchera. Para terminar, la Novia de America ofrecio un popurri, y para esa parte del show salio a escena envuelta en un entallado vestido negro que contrastaba con la blancura de su rostro. Lucero logro su cometido: ganarse al publico. (RGC) .