SECCION ECONOMIA PAG. 24 CABEZA: PND. Hacia una vision de largo plazo CREDITO: CLEMENTE RUIZ DURAN* La presentacion del Plan Nacional de Desarrollo abre, sin duda, una nueva etapa en la actual administracion, puesto que rebasa las turbulencias de inicio de sexenio y da, por primera vez, una vision mas alla de la coyuntura. Esto, sin lugar dudas, es algo valioso, pues muestra los propositos gubernamentales de forma clara y explicita, y con ello sienta las reglas del juego sobre las cuales pretende transitar la administracion para brindar bienestar social a la poblacion. Los principios sobre los que se sust enta el Plan surgen de las demandas que el pais ha expresado en los ultimos meses y, por lo mismo, da legitimidad a los propositos generales del mismo ejercicio de planeacion democratica. Algunas primeras criticas expresan su sentir de que si bien el discurso del Plan es en principio aceptable, se requiere una definicion mas explicita de la forma como se han de alcanzar los propositos del mismo para que este no se convierta en letra muerta, como ha sucedido en otros sexenios. La critica en este sentido es v alida, por ello sera imprescindible que a partir de los lineamientos generales del Plan se disenen planes sectoriales y programas de accion multianuales que garanticen el cumplimiento de sus metas. No es una cuestion facil el implantar un plan de las dimensiones del anunciado la semana pasada, maxime si se considera la situacion que atraviesa el pais en esos momentos. No se sabe con exactitud cuando disminuira el crecimiento en 1995. Suponiendo un tres por ciento y posteriormente un crecimiento promedio de cinco por ciento, para el ano 2000 la sociedad mexicana habria podido superar el PIB por habitante de 1981 (en terminos reales). Para lograr esta meta se requieren dos requisitos: por una parte, aum entar la inversion como proporcion del Producto Interno Bruto; por otra, la eficiencia de la economia. La economia ha sido sumamente ineficiente en las ultimas decadas, obteniendo una relacion incremental producto a capital de 0.2, es decir, por cada peso adicional de inversion que realizamos, el producto solo se incrementa 0.2 pesos. Esta es una cuestion importante, puesto que no es solo necesario que la inversion aumente, sino que esta lo haga en sectores con una alta eficiencia, en otras palabras, en sec tores con alta proporcion de valor agregado. Este es el punto, puesto que, de lo contrario, entrariamos en lo que pudieramos denominar ilusion del crecimiento: realizamos un gran esfuerzo por incrementar la inversion, pero los resultados nunca son los esperados. Si suponemos que el pais hace un esfuerzo enorme a partir de 1996 elevando el coeficiente de inversion (proporcion del PIB que se destina a inversion) y alcanza niveles superiores a 30 por ciento, pero sin tener cuidado en la calidad de su inversion y, por lo mismo, manteniendose la relacion producto a capital marginal de 0.2, el resultado seria que el promedio de crecimiento del producto seria de solo 3.7 por ciento. Para alcanzar cinco por ciento se requeriria elevar la relacion producto capital de 0.2 a 0.35. Incluso si se eleva esta relacion en una mayor proporcion, los requerimientos de aumento de la inversion podrian ser menores, sin requerir que el coeficiente de inversion se tuviera que elevar por arriba de 30 por ciento y manteniendo un crecimiento en promedio de alrededor de 15 por ciento anual en terminos reales. Si lograramos elevar la relacion producto/capital de 0.2 a 0.4, tendriamos un crecimiento cada vez mayor del PIB. Estimando 3.7 por ciento en 1996, este se podria ir elevando lentamente, para al canzar un crecimiento de alrededor de 10 por ciento al iniciarse el proximo milenio. En este sentido, la clave esta en inducir un aumento de la inversion en sectores estrategicos, de forma que esto contribuya a modificar los parametros de eficiencia de la economia. Es decir, la tarea que impone esta nueva etapa del desarrollo no es solo aumentar el ahorro interno induciendo una mayor reinversion de las utilidades generadas, sino que se requiere que esta reinversion se realice en areas de alto valor agregado. Todo esto confiere sentido al enunciado del plan que senala que "el crecimiento eco nomico depende no solo del esfuerzo de inversion y ahorro, sino tambien de la eficiencia con que se utilicen los medios de produccion y la mano de obra. Consecuentemente, el aumento en la productividad y la eficiencia recibiran la mayor importancia en la estrategia para promover el crecimiento economico". Requiere el pais vigilar muy de cerca la forma como se implemente esta propuesta, puesto que es la parte central de la nueva estrategia de crecimiento del pais, pues existen ideas claras al respecto: "el impulso a la inversion habra de comprender tanto la inversion en capital fijo como la elevacion de la calidad de la fuerza de trabajo. Respecto a la inversion en capital fisico, en los proximos anos se emprenderan acciones con el proposito no solo de aumentar su volumen, sino de provocar la modernizacion te cnologica que nos haga mas competitivos y aprovechar mejor los flujos internacionales de comercio e inversion. Asimismo, para lograr mayor calidad de la mano de obra se realizara un esfuerzo importante en materia de educacion y capacitacion de los trabajadores, asi como en la procuracion de condiciones de salud, nutricion y vivienda digna". Queda claro que el esfuerzo para dotar de mayor bienestar a la sociedad mexicana depende de como llevemos a cabo los planes en el sector productivo, pues es ahi donde se definira nuestra insercion dinamica a la globalizacion, que es el compromiso que nos hemos trazado como nacion para entrar con la cara en alto en el siglo XXI. .