SECCION INF. GRAL. PRIMERA DE PRIMERA BALAZO: VALLE DEL MEZQUITAL CABEZA: EN HIDALGO, DESFILO ANTE EZP LA DIMENSION HUMANA DE LAS CIFRAS CREDITO: HERMENEGILDO CASTRO, ENVIADO SANTIAGO DE ANAYA, Hgo., 18 de junio.- Manos que labran la tierra y recogen la cosecha, manos que encienden la lena y echan las tortillas al comal, manos que alimentan a los hijos que se mueren de enfermedades desterradas en otras partes, centenares de manos, buscan saludar a Ernesto Zedillo. Parece una multitud sin rostro que solo tuviera manos, manos que buscan tocar, apretar la del candidato. Manos esperanzadas detras de las vallas de metal, en la plaza principal donde el PRI hidalguense reunio a indigenas nanus del Valle del Mezquital, nahuatls de la Huasteca Hidalguense, tepehuas de la Sierra, y ladinos, la mayoria. -Son los hombres que dia a dia, con sus tareas, no mitigan su miseria -le dijo hace un rato Pablo Mendoza Perez al candidato que va por la valla, saludando, custodiado por un impune equipo de seguridad del general Roberto Miranda que lo mismo quitan, codean, empujan indigenas y periodistas, que ponchan llantas a magnates como Enrique Molina. Muchos cuerpos de esas manos que buscan la comunion con el candidato reciben algun jalon. Transcurren los ultimos cinco minutos del evento en el que los organizadores esperaban reunir 2,500 personas. Zedillo avanza lentamente, saludando, acariciendo cabezas de ninos, abrazando mujeres mayores. -Se que aqui en Hidalgo, quiza mas que en otras partes de Mexico, se esta sufriendo mucho por la pobreza que aqueja a nuestros hermanos indigenas -les habia dicho Zedillo al empezar su discurso pero a uno le queda la sensacion que, ademas de oirlo, quieren tocarlo, verlo de cerca, decirle que estan con el. Las manos se alzan, buscan al candidato, en un dia benigno, de cielos azulisimos y nubes siempre caprichosas. Cerca de la tarima donde se instalo el presidium Maria del Rosario Flores Bautista, quien llego de Huazalingo, platica con sus companeros. Habia sido la ultima en hablar durante la ceremonia que se llamo "Dialogo con la comunidad rural hidalguense, con grupos de la sierra". Los reporteros ya tenian en sus libretas las palabras de la mujer de Huazalingo, municipio ubicado en la Huasteca Hidalguense, rica region ganadera en la que, sin embargo, existen niveles de vida similares a los de Haiti, el pais mas pobre del continente. Zedillo aprieta manos. Los campesinos, las mujeres, le dicen cosas, le dan apoyo, el responde, escucha y tambien concede autografos en gorras previamente repartidas por el PRI y en sombreros. Esta feliz, terminando el dia, el dia de los dos golazos de tiro libre, uno de Suiza y otro de Estados Unidos. Flores Bautista habia dicho a Ernesto Zedillo, frente a todos, en un evento sin figuras de administraciones pasadas, sin representantes de la dinastia de poder que dejo Rojo Gomez para gobernar la entidad: -Hay muchas muertes prematuras en las comunidades alejadas... se nos mueren miles y miles de ninos y no hay doctor... no hay caminos, las comunidades estan incomunicadas por las crecientes de los rios... no hay puentes, no contamos con vehiculos... somos realmente pobres... Hombres y mujeres se acercan a la valla para saludar y, poco a poco, conforme avanza el candidato va quedando el sillerio vacio, el metal que rechaza el calor humano, banderolas en el piso, las gradas desocupadas, alguna copia del escrito original entregado al candidato. Voces que muestran el diagnostico de la pobreza Hombres y mujeres del tercer estado mas pobre del pais, segun le habia dicho a Zedillo, muy temprano y en Pachuca el periodista Ernesto Contreras, en una entrevista radiofonica. El candidato es un hombre que conoce las cifras. Las tiene a flor de labios y cita, en entrevista o en discurso, los resultados del censo de 1990 mientras frente a el, desfila o se levanta la dimension humana de las cifras, la boca de la necesidad, el tamano de la deuda social: -57 por ciento de las viviendas no tenia drenaje. -40 por ciento no tenia agua entubada. -20 por ciento no tenia luz electrica. -La tasa de analfabetismo es superior al 20 por ciento. -Una gran parte de la poblacion que trabaja recibe menos de un salario minimo. -No queremos que se sigan muriendo ninos mexicanos por enfermedades que ya no afectan a otros, no queremos que haya hombres y mujeres que mueran por enfermedades que ya estan curadas en otras partes. Contribuyen al diagnostico, solo como referencia para ubicar las manos que buscan el saludo del candidato, otras voces, en un dia dominado por el interes en el futbol, la vispera del encuentro de las selecciones de Mexico y Noruega: Maximino Perez Espinoza: -Hay mas de 35 mil otomies y miles de nahuatls emigrando a Estados Unidos. Priciliano Gutierrez Hernandez, candidato a diputado por el VI distrito: -Las aguas negras que provienen del Distrito Federal riegan tierras que corresponden a 22 municipios, donde habita uno de cada cuatro hidalguenses. La superficie afectada es de 74 mil 542 hectareas de riego repartidas entre 56 mil jefes de familia... dicho de otra manera, sus tierras son la fosa septica del Distrito Federal. -El campo vive una dura realidad y tiene en el futuro inmediato la disyuntiva de competir o perecer. Busqueda de nuevos senderos Alfonso Galindo Lugo, de la region de Actopan: -Ademas del problema de riego, la crisis esta motivada por la carestia de insumos, descapitalizacion de agricultores, maquinaria obsoleta, falta de tecnologia y de investigacion agropecuaria y fraccionamiento excesivo de las parcelas. -No podemos seguir pagando los costos del riego agricola pues resulta incosteable. Vemos con tristeza como aumentan los precios de los fertilizantes y semillas. Del Valle del Mezquital, con sus tierras danadas por las aguas negras y de la Huasteca y la Sierra, con sus veredas trozadas por la corriente, son las manos que buscan a Zedillo, que lo acompanan hasta su camioneta suburban. Jose Guadarrama Marquez, candidato al Senado, tiene una vision diferente del estado que aspira a representar: -En los umbrales del siglo XXI, los hidalguenses nos aprestasmos a encontrar nuevos senderos por los que habremos de transitar y que dejaremos de herencia a nuestros hijos. .