SECCION ESPECTACULOS PAG. 38 BALAZO: CAIFANES 1994 CABEZA: Los motivos del ritual CREDITO: XAVIER VELASCO ¨Has estado alguna vez entre mil, cinco mil, treinta mil cuerpos que cantan rezando? ¨Has llegado a olfatear la dulzura de la muerte bajo la transpiracion de un aullido prenado de voltaje? ¨Has vivido ya en la piel, o acaso mas adentro, el ritual caifan? Si es asi, seguramente sabes lo que es flotar en palabras que, de tan proferidas, parecen antiguas como los conjuros, pero aun asi frescas, como el inesperado beso nocturno que asciende por tu nuca sin que te atrevas a reunir las fuerzas para detenerlo. Cla ro que un millar, o un millon de personas podrian equivocarse juntas, pero incluso en el poco probable caso de que todo este frenesi no fuese sino un gigantesco error, has creido que mas vale carecer de razon dentro de la fe, que tenerla toda en el pobre pantano del escepticismo. Nadie hay mas equivocado que el pobre de espiritu. Apenas ayer, caida la noche, la banda ensayaba en un cuarto pequeno y caliente de entranas, cual si su destino fuese no un concierto antes tres mil cuerpos, sino una reunion intima. Pero tu sabes que esta noche, entre las columnas y las estatuas del casi fantasmal cine Metropolitan, lo que acontece es justamente una reunion intima. Como todos, desconoces muchas de las canciones, por primera vez detonadas en publico; cosa extrana para una banda cuyas audiencias acostumbran corearlo todo -y todo quiere decir todo, como esos rezos de los que creciste conociendo hasta las comas-. Es por eso que, mientras la banda estrena en publico sonidos y palabras, callas. Si alguien, seguramente ajeno tanto al ritual como al sentimiento que lo provoca, penso que te gustaba mas gritar que escuchar, tu respuesta es hoy ese mismo silencio que antes solo guardaste para encerrarte en los discos, masticarlos, tragarlos y guardarlos dentro, como solamente conservarias la memoria de un dolor terco, pegajoso, casi querido. ¨No eres, c omo muchos aqui dentro, victima de un enternecido amor por tus propios dolores? ¨No son ellos, tus dolores, aun mas tuyos que tus gozos? No es, en lo profundo, un dolor tan intenso como el de Quisiera ser alcohol puro gozo? Fue Kundera quien hablo de una mujer que, lastimada por la indiferencia y el horror cotidianos, suena con llevar frente a sus ojos una solitaria flor de nomeolvides y no mirar mas que a esa infima sobreviviente de la epidemia de fealdad que se apodera del mundo, aun sabiendo que tal vez el total de sus congeneres terminara por conocerla como La loca del nomeolvides. ¨Que pasaria si, contra lo pronosticado por los fuerenos de la pasion, poco a poco se multiplicaran los rebeldes que prefieren mirar a una pequ ena flor y llanamente derogar al resto de un paisaje a todas luces indeseable? Pasaria lo mismo que pasa esta noche, cuando la mas solida, contenta y amante version de la banda Caifanes -Saul, Alejandro y Alfonso, en compania de Yann Zaragoza, Federico Fong, Jose Manuel Aguilera y Cecilia Toussaint- comete frente a tus ojos, en torno a tus timpanos, hacia dentro de tu epidermis, una ferviente sucesion de aguijonazos que, ahora lo sabes, te hacian falta. Para quienes ocultan el miedo que les causa el palpito amoroso tras la fachada protectora de la razon, tus aullidos son pura catarsis. Pero ¨como explicar ante el pobre de espiritu los motivos de la gratitud? No hay nada que explicar. Como la mayoria, tu has llegado hasta aqui, enamorado por la quimera de cancelar al horror y a la nada, para sustituirlos con una ensonacion verdadera, solitaria, colectiva, repleta de cuerpo y plena de aliento. Que los hombres, en su delirio de poder y trascendencia, sigan haciendose las preguntas que creen fundamentales. Hoy, esta noche, te basta con saber que eres animal, y al igual que los demas animales has caido victima de la infeccion de la vida y sientes en la sola carrera de tu sangre una estampida electrica cuya mortifera premura es, para bien de todos, incomprensible. Y, como la mordida de la medianoche sobre el cuello del caifan, incurable. .