SECCION ESPECTACULOS PAG. 36
BALAZO: VIDEO
CABEZA: Un retrato intimo de
los Rolling Stones
CREDITO: XAVIER QUIRARTE

Aun no se ha determinado la fecha en la que los Rolling Stones pisaran por primera vez un escenario mexicano, ni tampoco el sitio en el que sera su concierto. Sin embargo, la expectacion es grande y seguramente cuando los boletos sean puestos a la venta bastaran unas cuantas horas para que las localidades se agoten y los revendedores aseguren un jugoso agosto.
Por estos dias, cortesia de mi bucanero de cabecera, recibi -veinticinco nuevos y bien invertidos pesos de por medio- una copia decorosa de algo que en el costado del videocaset decia: Rolling Stones: Cocksucker Blues. Se trata de un documental de tono intimista en el que la camara es un miembro mas de la troupee que acompana a los Stones durante una gira por Estados Unidos. Aunque el video no tiene en los creditos el ano de produccion, el material debe ser de mediados de los setenta, cuando el guitarrista 
Mick Taylor todavia andaba con el grupo.
En los fragmentos de los conciertos registrados en esta gira, los Rolling ejecutan temas como Midnight Rambler (en el que Mick Jagger nos recuerda sus habilidades en la armonica), Happy, Brown Sugar y You Cant Always Get What You Want (en ensayo). De valor historico es su actuacion al lado de Stevie Wonder, a quien acompanan en Uptight, cancion que despues se liga con una candente version a Satisfaction.
El resto del tiempo la camara se dedica a deambular libre por los cuartos de hotel en los que se hospedan los Stones, como si fuera un personaje mas de la comitiva. Asi se sienta placidamente a observar como Keith Richards toca en el piano un blues y luego un boogie; acompana al grupo a beber y jugar una partida de billar y se estremece de risa cuando desde la ventana de un hotel Richards avienta a la calle un televisor que ya lo tiene harto.
Charlie Watts, Bill Wyman y Mick Taylor aparecen esporadicamente. Su presencia es silenciosa, como aquella imagen en la que Watts, inmovil, observa la television desde la cama. Mas notoria es la presencia del pianista Nicky Hopkins, el trompetista Jim Price y el saxofonista Bobby Keys, asi como de algunas de las inseparables groupies.
Una de las escenas mas divertidas es aquella en la que los Stones sostienen una orgia aerea en su avion particular. La camara recorre los pasillos para observar que Jagger es entrevistado por alguien, mientras unos asientos mas atras una pareja hace el amor. En una improvisada sesion de percusiones, los Stones animan al hombre que desnuda a dos de las groupies que viajan con ellos.
En resumen, Rolling Stones: Cocksucker Blues es un documento que nos permite acercarnos al grupo como si fueramos un miembro mas de la familia. Si la edicion es artesanal, esto le da un tono intimista, como si los Rolling Stones nunca se hubieran percatado de que la camara estaba alli.
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