SECCION ESPECTACULOS PAGINA 37 BALAZO: SONIDOS CABEZA: El retorno iracundo de Motley Cre vuelve iracundo CREDITO: OSCAR SARQUIZ F. Curioso que la historia de un sueno rockero (re)inicie una decada despues de que principio, al quinto album y tras un violento cisma; pero eso es precisamente el caso con la nueva grabacion de M”tley Cre, el grupo mas exitoso y durable salido del glam angelino: una excelente nueva, en visperas de su primera incursion en concierto aqui. Aparte las numerosas coincidencias (!) ideologicas descubiertas con el jefe del Cre, Nikki Sixx, conversando durante su reciente visita promocional del lanzamiento, quede claro de entrada que este es el mejor disco que ha grabado M”tley en su carrera; y que la ausencia nada casual de su anterior figura frontal Vince Neil (cuyo nada despreciable debut solista se desplomo raudo cual frisbee chueco) tiene todo que ver con la mejoria. Que penoso. No es solo que el debutante John Corabi sea mejor cantante, mas rockero, letal y bronco que el anterior galan californiano; al decir de Sixx, el guitarrista Mick Mars y seguramente el baterista Tommy Lee, la desaparicion de la friccion interna que generaba el dude Neil, con su protagonismo e interes por el glamour estelar, ha rendido una renovada eficacia que ha permitido al trio restante aproximarse mucho mas a su ideal sonoro que ninguno de sus crecientemente exitosos albumes previos. Mas vale que asi sea: M”tley regresa enfrentando dos obstaculos formidables: el megaexito de su antologia previa, Decade Of Decadence, y la prolongada ausencia en grabaciones y escenarios desde entonces. Eso suma expectativa hasta donde a veces no puede alcanzarseles; la buena noticia es que en elocuente autoafirmacion, la banda ha ampliado sus horizontes en el rumbo a su propia autenticidad. Continuan los testimonios antiNeilistas: Mick Mars, audiblemente crecido y mucho mas lucidor que nunca, confeso de plano que hasta ahora tocaba restringido por las limitaciones vocales y demarcaciones sonoras del ido gerejo; visiblemente complacido del trabajo que con Corabi vienen sosteniendo desde hace ya casi dos anos, Mars esta seguro de su reivindicacion instrumentista, ahora que segun afirma, tiene otro musico con quien trabajar, no solo un estelar reclamando siempre el centro del escenario. Desde los primeros pesadisimos compases que exigen "Poder A la Musica", a los inesperados arpegios Beatleanos que abren "Misunderstood" como hablandole a la Dulce Prudencia, fans y especialmente detractores previos del Cre encontraran motivos de revalidacion y credito: las raices del grupo (glam, punk, heavy, sicodelia y pop pesado) se abren paso con mas facilidad, y el tronco estilistico del album engrosa acordemente para mayor diversidad y disfrute del escucha. Siempre efectivos hardrockeros, el cuarteto acuna aqui temas que seran memorables, como su primer sencillo "Hoolingans Holiday" y "Poison Apples", que rebosa el mismo impacto candoroso de clasicos como "Ballroom Blitz". Es el destino manifiesto de un grupo que nacio de la admiracion por Kiss, Los New York Dolls y los Sex Pistols, lograr exito masivo al tamano de "Dr. Feelgood", por ejemplo; y su deber, alcanzarlo sin dejar de ser ofensivos y peligrosos. Pese a que es hoy hecho conocido su "crossover" de los preteritos subterraneos metaleros de una decada atras, de donde surgieron como Van Halen a resucitar la musica que los sedujo en su infancia a ser rocanroleros, M”tley Cre quiere volver a ser lo que pretendio el Seattlero trasplantado Nikki Sixx cuando lo fundo: un grupo de rock callejero, directo e impactante, cuyas canciones muevan al escucha con su impacto musical, pero tambien con la facil identificacion con su tematica de cualquier pelao que pudie se ir a presenciarlos. Con este primer album que abonan a su propio nombre, y una formacion estabilizada y musicalmente enriquecida, quienes algun dia tocaron entre candelabros, pentangulos y nubes de hielo secos se aproximan mas que nunca antes en sus incursiones fonograficas al nivel de la calle de donde salieron con rumbo a la fama. Eso, para cualquier, es mas accesible y, anado, divertido, pese al ocasional y descontextualizado lamento necro como "Hasta Que La Muerte Nos Separe". Mientras tanto, como reza un borroso estencil amarillo en la contraportadilla: escuchen. M”tley Cre, M”tley Cre (Elektra) * * * * .