SECCION: INFORMACION GENERAL PAGINA: 6 BALAZO: LOS HECHOS Y LOS MITOS CABEZA: Los Mayorales CREDITO: Gustavo Hirales * Para el juez Alejandro Sosa Ortiz. El viernes 7 de julio el juez primero de distrito, Alejandro Sosa Ortiz, con sede en Toluca, dicto auto de libertad en favor de Vicente Mayoral Valenzuela y de Rodolfo Mayoral Esquer, padre e hijo, respectivamente. Como se recuerda, estas personas fueron detenidas en relacion con el asesinato de Luis Donaldo Colosio durante los primeros dias de abril de 1994. De hecho, Vicente Mayoral fue detenido el mismo dia y en el lugar de los hechos, el 23 de marzo, junto con el asesino confeso, Mario Aburto, porque es te gritaba "yo no fui, fue el ruco", acusando a Mayoral y, en la duda, a los dos se los llevaron presos. Sin embargo, Vicente Mayoral fue liberado a las pocas horas por falta de evidencias, mientras que se confirmaba, confesion y multiples testigos de por medio, que quien positivamente disparo fue Mario Aburto. Eran los momentos en que se consolidaba, en el animo de los investigadores, la hipotesis del asesino solitario. Sin embargo, las certezas se desvanecian de un dia para otro, y una foto del San Diego Union Tribune hizo que la investigacion se focalizara en un tercero en discordia, Tranquilino Sanchez Venegas. Ya habia sido detenido Tranquilino cuando Miguel Montes asume el mando de la investigacion del caso Colosio, y pocos dias despues da a luz la teoria de la "accion concertada", segun la cual un grupo de miembros del grupo Tucan, que teoricamente debian haber fungido como servicio de orden local para los actos del candidato priista en Tijuana, en realidad se habian prestado para abrirle paso al asesino. De aqui derivo la detencion de los Mayoral, padre e hijo, asi como de Rodolfo Rivapalacio Tinaj ero, quien era el encargado por el PRI tijuanense de reclutar y organizar a los tucanes. Ahora bien, ¨de donde surgio la teoria de la "accion concertada"? De la observacion del video grabado en Lomas Taurinas por personal de la Procuraduria General de la Republica. Es decir, los investigadores creyeron encontrar, en las imagenes del video de marras, la clave del complot para asesinar al candidato: en las actitudes, gestos y desplazamientos de una serie de personajes que aparecian en las cercanias de Colosio. Asi, habria un clavadista que se tiro a los pies de Luis Donal do para detener su avance, el "de lentes" le abriria paso al clavadista, mientras que Tranquilino se interpondria entre el general Domiro Garcia Reyes y el candidato para facilitarle a Aburto acercarse a este, etcetera. En el video, fracciones de segundo antes de que aparezca el arma que dispara a la cabeza de Colosio, se ve a Rodolfo Mayoral Esquer delante de quien luego se supo era el coronel Federico Reynaldos del Pozo, del Estado Mayor Presidencial, al parecer obstruyendole el paso. A la vista, la teoria de la "accion concertada" era impecable, y solo tenia un defecto: era demasiado perfecta, es decir, en la realidad del maremagnum en que se convirtio la salida del candidato y su comitiva del lugar del mitin, l a "accion concertada" solo hubiera sido posible si todos los actores y personajes involucrados (y no solo los acusados) se hubieran puesto de acuerdo y hubieran ensayado, como una coreografia, los actos y movimientos a ejecutar. Para que Miguel Montes y su equipo llegaran a esta conclusion hubo de pasar tiempo y centenas de interrogatorios y analisis, asi como la version autorizada de expertos de la policia espanola, quienes desacreditaron las primeras conclusiones de otros "expertos", en el sentido de que en los gestos y en los movimientos de los acusados era detectable la intencion de asesinar al candidato. Una a una se fueron debilitando o de plano desvaneciendo las "pruebas" que parecian apuntar hacia los tucanes y en particular hacia Tranquilino y los Mayoral. El primero en salir, en mayo del 94, fue Rodolfo Rivapalacio Tinajero. Casi un ano despues, en abril del presente, el juez dicto una sentencia absolutoria a Tranquilino Sanchez. Y ahora salen Vicente y Rodolfo Mayoral, en el contexto de una revitalizada hipotesis del complot, ahora ya no como "accion concertada", sino como la teoria del "segundo tirador". La PGR ha protestado, mas por rutina que por conviccion, las sentencias absolutorias de Tranquilino y los Mayoral, pero ni siquiera se ha ocupado de inte ntar probar el nexo, hasta ahora inexistente, entre los recien liberados y Othon Cortes, el supuesto segundo tirador. En reciente entrevista, y ante la pregunta de si la pista del caso Colosio se habia enfriado, el procurador general de la Republica contesto que "estaba mas caliente que nunca". No cabe duda que esta decision del juez Alejandro Sosa Ortiz la volvio a meter al congelador. A menos que la procuraduria sepa algo que los demas ignoramos, una conviccion empieza a extenderse, inclusive en sectores antes indispuestos a creer cualquier explicacion de los hechos que no oliera a complot: la de que los flamante s investigadores en realidad no tienen nada nuevo, y que es muy probable que esten inventando culpables para justificar el alboroto armado por sus propias pretensiones. La decision del juez ha provocado irritacion en algunos sectores, es cierto. Pero evidentemente el funda su juicio en razones juridicas, no politicas, y esto debe ser defendido en todo momento. De otro modo, si gritos histericos y semianalfabetas de gente como el senador perredista Guillermo del Rio, es lo que va a determinar las sentencias judiciales, entonces no estaremos avanzando hacia un estado de Derecho, sino que estaremos retrocediendo. .