PAG. 10 SECCION: INF. GRAL. CREDITO: ANNA M. FERNANDEZ PONCELA* CABEZA: Urbanas, modernas, trabajadoras y educadas El pasado 28 de junio la Direccion General de Atencion a la Juventud organizo, bajo la supervision de Gabriela Narvaez, una mesa redonda: "Perspectivas de la mujer joven para el siglo XXI". Se abordo el tema de la mujer joven en Mexico (Cristina Fuentes), las perspectivas de su desarrollo profesional (Sara Lovera) y sus caracteristicas y participacion (Anna M. Fernandez). Pero lo mas enriquecedor fue el dialogo entre mujeres jovenes de varios estados de la Republica, y de diversas organizaciones juveniles. Las coincidencias en la problematica especifica por una parte y, por otra, remarcar un cambio generacional de valores y situaciones, fueron los aspectos mas destacados que surgieron de la discusion. Si tuvieramos que definir brevemente los rasgos mas sobresalientes de las mujeres jovenes de nuestros dias, podriamos decir que son urbanas, modernas, trabajadoras y educadas. En primer lugar, y fruto de la explosion demografica habida en el pais en las ultimas decadas, 37 por ciento de las mujeres tiene menos de 15 anos, segun el Censo de 1990. De otro lado, y consecuencia, en parte, de la migracion campo-ciudad, 72 por ciento del total de las mujeres reside en nucleos urbanos. En segundo lugar, en anos recientes ha habido un aumento notable del control de la fecundidad, y se ha pasado de 6.3 hijos por mujer en 1973 _que representaba 30 anos dedicados a la crianza, a 3.8 hijos en 1986_ lo cual viene a representar de 10 a 15 anos de crianza. En tercer lugar, la situacion de la mujer con respeto a la educacion ha mejorado _en relacion con el hombre o a las propias mujeres de otras epocas. Aunque hay todavia un 15 por ciento de analfabetas, debe pensarse que hace 15 anos estas representaban practicamente 30 por ciento de la poblacion femenina. En cuanto a los estudios de primaria y secundaria las cifras de escolaridad y asistencia son similares entre ambos sexos, y es a partir de los 12 o 14 anos cuando las ninas abandonan la escuela para dedicar se a las tareas domesticas o al trabajo para la generacion de ingresos, con el objetivo de ayudar a sus familias. En la actualidad las mujeres representan 40 por ciento de la matricula universitaria; y si bien carreras como enfermeria, educacion y trabajo social siguen siendo feudos femeninos, no es menos cierto que la mayoria de las estudiantes eligen, de forma parecida a sus homologos masculinos, administracion, contaduria, derecho, medicina y computacion. En cuarto lugar, la poblacion economicamente activa femenina de 12 y mas anos de edad _que trabaja o busca trabajo_ es casi un 20 por ciento _segun cifras del Censo de 1990_ y aunque parece una cifra reducida en comparacion con la de los hombres, representa un crecimiento respecto de anos anteriores. Por otra parte, las encuestas sobre ocupacion realizadas en centros urbanos elevan el porcentaje a 35 por ciento. Pero no solo ha habido aumento en cuanto a la insercion de las mujeres en la fuerza de trabajo, ha cambiado su composicion, ya no solo son jovenes, solteras e hijas las trabajadoras, sino que se mantienen las casadas y madres. Ademas ha tenido lugar cierta diversificacion ocupacional, a pesar de que las mujeres siguen mayoritariamente empleandose como oficinistas, comerciantes, dependientes, tra bajadoras domesticas y educadoras. Y respecto de su participacion politica, esta es minoritaria, pero no solo en el marco de la politica institucional _partidos politicos y poderes del Estado_ en donde la edad promedio de las mujeres que acceden va de los 36 a 50 anos, sino y tambien en los movimientos sociales y organizaciones juveniles, asi como en el movimiento feminista. Una pregunta de doble sentido surge de inmediato: šA las jovenes no les interesa la politica? o, šla politica no se interesa por las jovenes? A pesar de los problemas que todavia subsisten, como mujeres y como jovenes _lease doble discriminacion, sin contar el sector social y la etnia a la cual pertenezcan_ la situacion de la mujer mexicana en los ultimos decenios ha cambiado. Y como se desprendio del acto, hay una mayor libertad de eleccion que nuestras madres y abuelas no tuvieron. Hay tambien el miedo a decidir y a equivocarse, pues se busca la a veces dificil complementariedad y armonia entre las relaciones afectivas satisfactorias de pareja y con los hijos, y un trabajo que nos realice profesional y personalmente. Una cosa quedo clara: la maternidad ya no parece ser la identidad vital por excelencia. Se tienen que superar presiones culturales todavia muy enraizadas en nuestra sociedad, y personales, internalizadas desde la infancia. El cambio de mentalidad es quiza lo mas importante, porque la generacion anterior, la del movimiento feminista, fue una etapa de ruptura, y la actual es epoca de algo mucho mas complejo: de construccion * Antropologa. .