PAG. 6 SECCION: INF. GRAL. CINTILLO: LOS HECHOS Y LOS MITOS CABEZA: Imagenes del PRI CREDITO: Gustavo Hirales Invitado a una mesa redonda sobre "El PRI, retos y perspectivas", esto fue en sintesis lo que alli dije: 1. La primera cuestion que quiero tocar es el estado que guarda el partido: La opinion generalizada, que comparto, es que el PRI atraviesa por una crisis muy profunda, o que ha llegado al final de un ciclo historico. Los sintomas de la crisis son evidentes: perdida progresiva de clientelas electorales y de votos, derrotas electorales sin precedentes, deterioro de liderazgos, adelgazamiento de los sectores, desdibujamiento del perfil ideologico del partido, perdida de confianza en la capacidad para retener el poder. La confusion y el escandalo se estan convirtiendo en la segunda naturaleza del PRI. Cada vez con mayor regularidad miembros del partido y gobernantes provenientes del mismo, aparecen asociados a delitos penales o hechos escandalosos. Y cada vez cunde con mayor fuerza, entre cuadros y dirigentes, la sensacion de perdida de brujula, de desdibujamiento del horizonte politico. De mantenerse las actuales tendencias, el PRI estara emplazado a entregar el poder en agosto del ano 2000, y esta perspectiva se vuelve mas ingrata en cuanto que el heredero politico mas probable sera el PAN, justamente el partido que nacio como reaccion frente a las conquistas (y excesos) de la Revolucion. La ola democratizadora que recorrio el mundo hace algunos anos, llego tardiamente a Mexico, pero sus efectos son igualmente sismicos: Todo lo establecido esta en crisis, lo nuevo no acaba de nacer, y lo viejo se resiste a morir. 2. Ahora bien, ¨cuales serian las causas mas profundas de la actual crisis priista? Hay una de caracter estructural, creo: El pais cambio a una velocidad que el PRI no pudo empatar. El pais, es decir, sus clases y tejidos sociales, los medios de comunicacion, las instituciones educativas y culturales, los partidos politicos de oposicion. El desarrollo economico, los procesos de urbanizacion y de movilidad social, la escolaridad, la relacion con un mundo cambiante, precipitaron sensibilidades y fenomenos nue vos, uno de los cuales, el reclamo democratico, afectaba profundamente a la cultura politica tradicional, es decir, priista. El PRI, desacostumbrado a y temeroso de la democracia, gasto mucho tiempo y esfuerzos en oponerse al avance democratico. Cuando por fin entendio que la lucha por la democracia era un fenomeno llegado para quedarse opto, junto con los sucesivos gobiernos, ya no por enfrentarlo, sino por retardar sus efectos lo mas posible. Tan es asi, que todavia la ultima reforma electoral antes de enero de 1994, se hizo bajo el signo de la contencion. Ahora las cosas se han precipitado, pero en el interin el desgaste fue m uy grande, tanto para el gobierno como para su partido. 3. Como lo han visto algunos observadores, la candidatura de Luis Donaldo Colosio era, en lo que cabe, garantia de un aterrizaje suave del PRI en la reforma interna y en la salida de su propia crisis. Una revitalizacion del partido no era impensable. Pero la muerte brutal del candidato echo a perder, entre otras cosas, esa posibilidad. El nuevo Presidente de la Republica se vio obligado, en medio de una crisis sin precedente para un gobierno que apenas se inicia, a tomar la famosa "sana distancia" del parti do, y el resultado es precipitar a este en el desconcierto. Si el Presidente ya no da la linea, o la da de manera que es dificil de captar, ¨como puede el PRI seguir siendo el PRI, es decir, el partido del Presidente? Pero esta es una de las cuestiones centrales en la crisis del PRI. Este ya no puede seguir siendo el partido del Presidente, debe pasar a ser un partido real, autonomo, con organos de direccion cuya eleccion surja de las bases y se deban, por tanto, a estas bases. No se trata de postular una "insurreccion" del partido contra el Presidente de la Republica, sino de establecer una nueva relacion, mas moderna y democratica, entre ambas instituciones. 4. La pregunta central, sin embargo, la que cruza toda la escena politica nacional, es la de si el PRI es reformable. Hay quienes piensan que el PRI ya no tiene remedio y que hay que darle santa sepultura. Otros opinan que el PRI solo se puede reformar bajo presion externa. Por ejemplo, bajo la presion que resulta de una reforma politica democratica que cancele en definitiva los extremos de la relacion privilegiada que (aun) se mantiene entre partido y gobierno, y cuyos excesos fueron evidenciados en relaci on con las pasadas elecciones locales de Tabasco, por ejemplo. Pero seria, en estas condiciones, una reforma al pie de la horca. Yo desearia que del PRI surgiera un impulso reformista de largo aliento que, acorde con lo mejor de sus origenes historicos y con su condicion de (aun) principal fuerza politica organizada de Mexico, le ahorrara al pais el costo de un final de regimen traumatico como el que ocurrio en los paises del este de Europa. Que dejara de estar a la defensiva y lanzar propuestas politicas de cambios, al menos en dos grandes ambitos de accion. Primero: una propuesta audaz y generosa en torno a la agenda de reforma politica y la reforma de Estado, que lo pusiera a la vanguardia en este aspecto. Segundo: una iniciativa de reforma interna que dejara de lado el juego instrascendente en que ahora se regodea, y que le diera al partido lo que no tiene, es decir, procedimientos clara y definitivamente democraticos para la eleccion de sus dirigentes y de sus candidatos a puestos de eleccion popular. Una renovacion ideologica y programatica, un reposicionamiento del partido frente a la dramatica situacion economica y social del pais. Lo que no puede es mantenerse solidario de situaciones aberrantes, como el gobernador de Guerrero, y en menor medida, el de Tabasco. Debe asumir una actitud mucho mas critica y autocritica, o seguira siendo identificado como el partido de los intereses inconfesables, de la corrupcion y hasta la represion. El partido de los humores autoritarios. Para el PRI ya no hay tiempos fuera: solo le queda renovarse o morir. *Politologo .