SECCION CIUDAD PAGINA 17 CABEZA: Metamorfosis regresiva: de la libertad al toque de queda CREDITO: JORGE CALVIMONTES y C. Apreciados contertulios: fectivos de la Guardia Nacional de Estados Unidos. Episodios de ese tipo masacres y genocidios se daban casi de manera exclusiva en las aglomeraciones urbanas y rurales de America Latina y permanentemente en el teatro de las operaciones guerrilleras instalado por Sendero Luminoso en Peru. La metodologia del apartheid en el Africa del Sur acumulo millares de muertes mientras que en la Europa Central y del Este la caida de los regimenes socialistas pagaba un tributo postumo de afirmacion nacionalista y exterminio de las minorias etnicas. Nada de ello tenia importancia para la fria y apatica sensibilidad de las clases dirigentes estadounidenses, habituadas a pisar y pasar tanto sobre la historia como por encima de la biografia cotidiana. Asi fue, hasta que la rebelion de un nutrido mosaico de minorias etnicas se sintio fatigada de lamer las llamas del infierno en el seno mismo del "paraiso americano". El declamado american way of life mostraba su lado oscuro, sangriento y vociferante, inutil, tal vez; pero cumplidamente silenciado por las macanas electricas, los gases y las balas de goma. Era, inobjetablemente, la instalacion del Tercer Mundo made in USA. Siguieron, despues, otras secuencias, la del Trade World Center en Nueva York y la explosion de un edificio en Oklahoma obra esta de una milicia integrada por naturales de Estados Unidos. En alguno de estos hechos fue facil buscar, al principio, chivos expiatorios entre los adeptos de grupos asiaticos fundamentalistas, y como lo dijo, ayer, un comentarista gringo de la television "tanto que se los ha acusado, que ahora lo correcto seria presentarles excusas". Y, lo mismo que en las seriales filmicas de antano, un nuevo episodio de terror se exhibira ante la inerme y estupefacta sociedad estadounidense. Se trata de la asimilacion, vade retro, de procedimientos dictatoriales que no se escenifican en el celuloide sino en la pantalla gigantesca de la realidad cotidiana. Hay un rasgo distintivo: la represion se ejercera con el favor del deslumbramiento callejero, en los parques, en las avenidas o debajo de los porches donde debieran discurrir las tertulias. Es ta vez las victimas no seran ni vandalos ni delincuentes sino adolescentes menores de 17 anos con cuya detencion, al decir de las autoridades, se espera reducir el indice de criminalidad juvenil. Sin embargo, en el analisis de Emilio Viano, criminologo de la Universidad Americana, no se descarta que "en la practica, el toque de queda sirve para justificar actuaciones racistas por parte de la policia". Como toda voracidad, la vocacion represiva no se sacia con el ultraje y la humillacion de los browns, los yellows y los indocumentados; hace falta, ademas, tallar la mueca del terror en los rostros de los ninos. Los cuerpos policiacos de 110 ciudades estadounidenses, entre ellas Washington, se desplegaran todas las noches, desde las 11 pm hasta las seis de la madrugada, en busca de noctambulos menores de 17 anos para detenerlos e inscribirlos en un temprano historial delictivo. No importa si la medida es inconstitucional, si niega las minimas libertades de desplazamiento o ha sido rechazada por numerosas organizaciones que defienden los derechos civiles, ya que se trata, a todas luces, de una fatidica metamorfosis en la que una potencia que funge como gendarme internacional se convierte en flageladora de su propia vitalidad. Dicen, los que conocen la naturaleza del escorpion, que hay seres que perecen en su propia ponzona. De este lado, en la capsula de smog que envuelve al valle transparente, se edita, ejemplarmente, otro tipo de metamorfosis. La sociedad civil y la Asamblea Legislativa del Distrito Federal han parado en seco la exacerbada iniciativa policiaca que pretendia convertir la calma o la euforia nocturnal de nuestras calles en tinglado de persecuciones y caceria de "sospechosos". Se les dijo nel pastel, pero al mismo tiempo se hizo acopio de sugerencias y recomendaciones para que la delincuencia sea combatida. Un c ontraste: seguimos en el Tercer Mundo, pero al menos aprendemos a respetarnos, rechazamos el uso de la barbarie tecnologica y no admitimos a fardo cerrado que los sospechosos solo existan del lado de la poblacion civil, guapachosamente nocherniega. El caso del toque de queda en Estados Unidos, a esta altura de los suenos, es totalmente inaceptable. Irrita pensar que haya patrullas, fisgones y persecutores a la caza de ninos. ¨Habra razon alguna para que los futuros ciudadanos de Estados Unidos esperen la aurora tras los barrotes de una celda? .