SECCION: INFORMACION GENERAL PAGINA: 2 CABEZA: La inseguridad del plan CREDITO: IGNACIO CABRERA* ENTRETEXTO: Las 11 medidas de seguridad tienen una gran limitante: combaten a la delincuencia solo con el poder de la policia, no toman en cuenta a la sociedad, no solo con su opinion, sino para involucrarla directamente en tareas apropiadas Es de llamar la atencion el rechazo unanime de la poblacion del Distrito Federal a las 11 medidas anunciadas por el regente como un verdadero plan de emergencia ante la creciente inseguridad publica, porque expresa la conciliacion en su contra de diferentes puntos de vista sobre el problema. El sentir general fue de sorpresa, temor y rechazo a lo que aparece como la principal percepcion de la autoridad sobre la delincuencia y como enfrentarla; la presuncion de ser sospechoso, suficiente para poder ser detenido, esculcado e interrogado por policias preventivos. Esta percepcion desconocio las actividades y horarios de los habitantes de la ciudad, por cuanto fue mas facil y rapido dictar una medida drastica e igual para todos, ciudadanos y delincuentes, siendo que estos ultimos deben ser una infima minoria de la poblacion, y el resto, o sea la mayoria, tendria que pagar las consecuencias. Cuando lo que se requeria era exactamente lo contrario; escoger el camino dificil e ingenioso de medidas de proteccion y confianza para la mayoria de la poblacion, y de eficaz captura y castigo a los infractores de la ley. Para los juristas y defensores de los derechos humanos lo mas grave fue la violacion de uno de los articulos mas importantes de nuestra Constitucion. Uno de los que consagra la proteccion y vigilancia por parte del Estado de las garantias de los derechos individuales del ciudadano. El articulo 16 senala: "Nadie puede ser molestado en su persona, familia, domicilio, papeles o posesiones, sino en virtud de mandamiento escrito de la autoridad competente...". Mas adelante el articulo aclara que solo en casos de urgencia y flagrancia se pueda detener a alguien sin mandamiento expreso de la autoridad. Entendiendo por autoridad competente a un juez del Poder Judicial. Queda claro, entonces, que otro tipo de autoridad, como la policia preventiva, se arrogo facultades que no tienen y comete actos ilegales en perjuicio de la ciudadania, violando ademas derechos humanos que se creian ya indiscutidos. Habria que agregar que junto a este sometimiento arbitrario del ciudadano a la policia preventiva, acto que en si ya causa molestia, aumentan las posibilidades de que la detencion cause dano fisico, si se realiza con violencia, lo que es tambien probable, y que el regis tro de pertenencias se convierta tambien en despojo y robo, con el consiguiente abuso de autoridad de los agentes policiacos. Para policias con experiencia el plan de seguridad es ineficaz, ya que expresa desconocimiento del modus operandi del hampa. Los retenes, revisiones y redadas solo son palos de ciego que no permitiran detener delincuentes, ni decomisar armas y que solo causan molestias a la poblacion, ya que un buen policia conoce de antemano en su sector o zona que delitos se cometen, quienes y como los realizan y, por lo tanto, su numero, organizacion, peligrosidad y ubicacion. La convivencia diar ia entre policias y delincuentes, e incluso cierta tolerancia entre ambos, siempre se ha permitido, siempre y cuando no rebase ciertos limites e incluso ayude a la conservacion de la paz social. Asi ha sido el sistema de policia y operaba con cierta eficacia. Lo que vivimos hoy es el desequilibrio de ese sistema, en donde la policia preventiva fue desatendida, siendo penetrada por el hampa, resultando en mucho la misma cosa. No puede operar un plan de seguridad con la actual policia, es facilitarles las cosas a la delincuencia. Primero se requiere formar un nuevo cuerpo policiaco y, entonces si, disenar un programa efectivo, separando claramente la prevencion del delito, como tarea amplia de ciudadanos y policia; con la captura de las bandas organizadas, cuestion que requiere de la formacion y especializacion de un cuerpo policiaco seleccionado, no como tarea del policia de crucero. En el fondo las 11 medidas expresan una concepcion equivocada del problema y, por tanto, una forma ineficaz de solucionarlo. Existen dos tipos de delincuencia. La organizada en bandas con multiples relaciones e influencias en corporaciones policiacas y juzgados, siendo los principales asaltabancos, traficantes de armas, contrabandistas, asaltantes en gran escala de autos, duenos de centros nocturnos y prostitucion en zonas perfectamente delimitadas. Bandas que son conocidas por todo policia con cier ta antigedad en la corporacion. Desmantelarlas es hoy un asunto de Estado, de seguridad nacional, ya que implica combatir por igual a la delincuencia organizada, asi como a buena parte de la actual policia que se encuentra infiltrada y corrompida. La otra delincuencia, la del raterillo de bolsos y de estereos de auto o de pequenas bandas de adolescentes asaltantes, sin dejar de ser un peligro, tiene otra dimension. Su proliferacion, ademas de expresar un problema social, se debe a una estructura de polici a obsoleta, laxa y sin control que requiere ser reformada. Las 11 medidas de seguridad tienen una gran limitante: combaten a la delincuencia solo con el poder de la policia, no toman en cuenta a la sociedad, no solo con su opinion, sino para involucrarla directamente en tareas apropiadas. A final de cuentas la poblacion es la mas interesada, mas que el gobierno, en solucionar este problema. Ademas que hoy la sociedad se encuentra organizada de muchas maneras, existe ya una participacion colectiva, de redes de ciudadanos que defienden los derechos de ninos, jovenes, ancianos, discapacitados, vecinos, de diferentes ocupaciones y actividades, de diversas preferencias sexuales, politicas y religiosas. Solo es cuestion de tenerles confianza y dejarlos participar. Si como es probable y deseable la regencia es forzada a dar marcha atras, y es borrada la palabra sospechoso y no se hacen detenciones arbitrarias, el programa de seguridad se desdibujara, mostrando las inconsistencias de medidas precipitadas y que no fueron consultadas con expertos y, sobre todo, con la poblacion. * Analista de temas economicos y politicos. .