SECCION ESPECTACULOS PAG. 37
BALAZO: TEATRO DE LA CIUDAD
CABEZA: Gilberto Gless, el camaleon del espectaculo
CREDITO: SILVIA GARCILAZO

Con 30 bien logradas imitaciones, chistes y ocurrencias, Gilberto Gless consiguio la noche del viernes que el publico lo aplaudiera de pie en lo que fue su debut en el Teatro de la Ciudad.
Desde su aparicion en el escenario, el artista senalo que "todos aqui nos vamos a divertir", advertencia que cumplio al pie de la letra cuando, similar a un camaleon, se desprendia sin dificultad de la caracterizacion de Armando Manzanero para dar paso a Lupe, integrante del grupo Bronco, a Mijares y a Chabelo.
Nuevamente aparecio Gilberto, prometiendo solo por esta vez "no jotear", pero a instancias del respetable olvido la promesa durante las dos horas y media que duro el espectaculo.
A ritmo de trompetas, bateria y teclados, la orquesta a veces convertida en el mariachi Arriba Todos acompano a Juan Gabriel, quien hizo dueto con Jose Alfredo Jimenez y Marco Antonio Muniz. Mas tarde, le dejarian el escenario al Principe de la Cancion, Jose Jose.
No le costo mucho trabajo a Gless ganarse el nutrido aplauso de la concurrencia, que rio a carcajadas olvidandose quiza de la crisis y sus consecuencias.
Con la imitacion de Vicente Fernandez logro levantar al publico de sus asientos para gritar "otra, otra, otra" y varios "bravo" que arrancaron lagrimas al comediante. Chente fue el mas achispado y el mas ocurrente.
No podian faltar los chistes de gallegos y regiomontanos que antecedieron a la aparicion de Nino Canun, Juan Jose Arreola y Chamin Correa, caracterizaciones no previstas que dieron paso "al que tiene un hijo en ayunas: Dyango".
Divos como Rafael, Roberto Carlos, Emmanuel, Jose Luis Rodriguez, El Puma, y Luis Miguel desfilaron por la pasarela del ingenio de Gilberto, asi como duetos formados por Diego Verdaguer y Amanda Miguel, o Pedro Vargas y Julio Iglesias.
Nuevamente estaban en el escenario Juan Gabriel, Chente, Julito, Jose Jose y Marco Antonio Muniz, quienes interpretaron Solamente una vez, numero que el publico recibio con admiracion y agrado.
El respetable pudo constatar que Gilberto posee un especial talento para hacer reir a carcajada suelta sin recurrir a los albures ni chistes subidos de tono. Supo hacer de su espectaculo un verdadero "show de cinco estrellas", mismo que se repitio el sabado por la noche.
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