PRIMERA PARTE SECCION CULTURA PAGINA 31 BALAZO: Flaubert a Maupassant I CABEZA: LIBRE CORRESPONDENCIA Croiseet, 31 de octubre de 1877. t... Hubiera preferido que B(ouvard) y P(ecuchet) comenzaran su paseo geologico en Havre, pero es imposible porque se han visto acantilados analogos... despues de una disertacion sobre el probable fin del mundo... producido por un cataclismo que se les sube a la cabeza... dos o tres piedritas se desprenden. Entonces un terror de panico los atrapa y se largan. Uno de elllos... se pierde en un pequeno valle con paredes abruptas... eso es lo que necesito. Confio en usted, y cuento con una respuesta inmedia ta. Cuando me llegue esta informacion, no necesitare mas que tres o cuatro paginas patra terminar mi capitulo de las Ciencias (...). Un abrazo. Su viejo amigo Gv Flaubert. PD.: Mierda para Mac-Mahon. *** Maupassant a Flaubert Paris, este 3 de noviembre de 1877. Si no le he escrito antes, querido maestro, es porque he esperado poder ir a verlo semana tras semana; mis finanzas no me han permitido emprender este pequeno viaje. Voy a intentar reparar mis errores con una descripcion exacta, acompanada de mapas para que comprenda el sitio que es muy complicado. Primero, no puede hacer partir a sus personajes de Bruneval para ir a Etretat, porque existe entre Bruneval y Antifer una punta muy entrada en el mar y que nunca he podido franquear a pie. Ahora bien, despues de Bruneval, yendo hacia Etretat, existe una playa muy bonita, la de Antifer. Se llega por tierra por un pequeno valle cuyo nacimiento se encuentra cerca de Tilleul, camino a Havre. Las dos laderas de este vallecito estan cubiertas por juncos marinos o aulagas. (...) Una vez en la playa se percibe a la izquierda un alto acantilado recto (100 metros) que va hacia El Havre. Una desviacion del acantilado detiene la vista a 500 o 600 metros de la playa. A la derecha, la playa continua durante 500 o 600 metros igualmente y es bruscamente atajada por una gran punta acantilada que se adentra bastante en el mar y bajo la cual se pasa por medio de un pequeno tunel (este pasaje podria tentar a Bauvard y Pecuchet). La punta acantilada,, que se llama la Cortina, tiene en su cima las ruinas de un antiguo puesto de guardia. Una vez llegado al pie de este acantilado se sube por medio de una cuerda (dos metros mas o menos), hasta el agujero que sirve de pasaje este agujero, bastante grande, tiene una apertura inferior y otra superior y se estrecha hacia la mitad, donde no tiene mas de dos metros de altura su longitud total es de mas o menos 15 metros. El canto rodado de la playa tiene una altura mucho menor del ot ro lado. Para lograr llegar alli se sigue por la derecha del agujero un pequeno sendero tallado en el acantilado vertical. Este sendero desemboca en una especie de escalera formada simplemente por agujeros en la roca, unos naturales, otros escarbados por los pescadores. Uno se sostiene con las manos en las cavidades del acantilado, y se desciende de nuevo hasta el canto rodado. La playa de canto rodado por aqui es muy estrecha y se percibe una gran extension de rocas cubiertas de algas. Contra el descenso del que acabo de hablar se perciben los restos de un enorme derrumbre. Doscientos pasos mas lejos, tres fuentes encantadoras de agua dulce. Caen de 5 a 6 metros entre espumas y la ultima hacia Etretat forma una pequena boveda bajo la cual uno avanza y desde donde se ve el mar por una apertura redonda, adornada de espuma donde fluyen hilillos de agua. Cosa esencial que olvide una vez en el tunel de la Cortina, se percibe bruscamente la Manne-Porte y, bajo la Manne-Porte, la puerta de Aval. (...) La Manne-Porte es una inmensa arcada bajo la cual se puede pasar sin mojarse los pies con marea baja. Cuando uno se le aproxima, se percibe en la parte inferior el picacho de Etretat que se encuentra 500 o 600 metros mas lejos contra la puerta de Aval. Seria necesario que Bouvard se cayera sobre las algas resbalosas para dar tiempo a Pecuchet de alcanzar la puer ta de Aval bajo la cual tambien se puede pasar con marea baja trepandose piedra por piedra, a veces saltando, pues casi siempre hay agua bajo esta puerta. La pequena bahia formada entre las dos puertas tiene esto de particular: que uno percibe hacia el centro una especie de semi-embudo con cesped en el que serpentea un sendero rapido que se llama la bailarina de vals de Jabour. Bouvard aterrorizado por el agua bajo la puerta de Aval y no pudiendo trepar como Pecuchet de roca en roca, arriesgandose a ahogarse en los intervalos que son muy profundos, regresaria sobre sus pasos y percibiria el vallecito. Uno sube primero por una parte del derrumbe que lleva al pie del acantilado luego el sendero lo bordea de A a B, y se hace luego mas rapido, es muy resbaloso, con piedras que ruedan bajo los pies y las manos, y termina en bruscos zigzags, la gente temerosa se aferra a las hierbas. (...) Este es (en estilo de guia) el itinerario de Antifer a Etratat. Me abstuve de todsa descripcion con imagenes para intentar hacerselo ver mas netamente. No se si lo he logrado. Si quiere otra cosa, si no le he entendido bien, escribame inmediantamente y le respondere el mismo dia. Adios, querido maestro, le mando un beso y un apreton de manos. Suyo. Guy de Maupassant. .